Capitulo quince: Hola, yo, de nuevo.
Estaba tan acostumbrada a tenerla conmigo, estaba tan acostumbra a ella. A sus abrazos, a su sonrisa, a su risa. Estaba tan implicada en todo lo que ella implicaba, incluso a las cosas no tan buenas, como el modo en que fruncía el ceño cada vez que me regañaba o la manera en la que gritaba cuando estaba molesta, pero ahora mismo desearía tanto que vuelva a regañarme.
Al final todos tenían razón, si era demasiado ingenua. Creía que ella estaría conmigo para siempre, como me lo había prometido. Creía que si ella me quería lo suficiente cumpliría esa promesa, y sé que no puedo culparla por no quedarse, sé que no fue su decisión, pero eso no quita el hecho de que duela, de que duela tanto.
Creía que por fin, después de tantas desgracias en mi vida, después de dieciséis años de mala suerte, de una vida de mierda, Dios estaba siendo justo conmigo, que estaba teniendo un poco de confusión con mi persona.
No soy una persona religiosa, de hecho, creo que perdí a Dios hace mucho, pero quiero culpar a alguien de mis desgracias, porque no quiero aceptar que todas las cosas malas que me están pasando sólo suceden porque si.
Quería, no, necesitaba creer que que alguien allí arriba tenia un plan para mi y que todo el dolor que estaba sintiendo y por el que estaba pasando era pasajero,
y para mi desgracia, no fue así. Era sólo cuestión de tiempo para que esto que creía perfecto, que era bueno y me hacía bien, acabará.Hoy estoy aquí, postrada de rodillas ante la cama de mi abuela, como lo he hecho estos tres meses desde que entró en coma llorando y rogandole que regrese, pero ella no lo hace. No me escucha, ni me siente, ni mucho menos siente mi dolor. Y no la culpo, sé que si ella pudiese evitar todo esto, si pudiera evitarme todo este dolor, lo haría.
Lástima que no tiene ese poder,
y que yo tampoco lo tengo.Gaste todo el dinero que había ahorrado para conocer a Abraham en los gastos del hospital, a penas y me alcanzó. Lo peor del caso es que ya ni siquiera puedo seguir trabajando porque tengo que cuidar a mi abuela, no puedo dejarla ir, y en el estado mental en el que me encuentro no estoy para cuidarme ni a mi misma.
Respecto a Abraham, no me rendí de inmediato, a pesar de que no pude ir al concierto tenía las esperanzas de que podría ir a la firma, pero esas esperanzas desaparecieron en un abrir y cerrar de ojos. No tenía ni el dinero para comprar un pasaje para ir a capital ni mucho menos la edad necesaria para viajar sola.
Me parece impresionante como lleva tanto tiempo construir un sueño, imaginarlo, soñarlo, creer que puede hacerse realidad, y que se destruya en menos de un segundo.
Así que me pase esa tarde y parte de la noche en el baño del hospital llorando -me hubiese sentido avergonzada si no fuera por el hecho de que estaba en un hospital, y aquí la mayoría está llorando en cada ocasión que puede, así que es bastante normal-, mientras veía los directo que miles de chicas hacían mientras estaban en la fila esperando a ser abrazada por la persona que me completaba.
Me quedé allí, por horas, observando a miles y miles de chicas sonreír, gritar, llorar y abrazar en los brazos de Abraham.
Me quede allí, observando como ellas cumplían un sueño que yo jamás iba a cumplir._____Sofia. - La voz del doctor Engel sonó entre mis caóticos pensamientos. Su voz salió tan bajita que me heló la sangre. Levante mi vista y lo observe, allí, con las manos unidas delante de él y una mirada cargada de disculpa.
En ese momento, lo supe.
Supe a que venía.
_____No... Por favor.- Rogué, con la voz rota y los ojos llorosos. Él se acercó a mi, luciendo demasiado apenado. Lo había conocido en el momento en que ingresaron a mi abuela por un derrame cerebral, hace tres meses. Él estuvo conmigo en cada momento, no eramos amigos, pero si que nos llevábamos bien. Había sido mi contención en todo este tiempo que había estado sola.
____ Lo siento. - Susurró, con pena y tristeza.
¿Lo siente? ¿lo siente? ¿cómo diablos puede sentirlo?, si nunca la conoció, ¡él no lo siente! ¡no quiero que me diga que lo siente si no es cierto!.
______ Su cerebro ya no funciona. - Prosiguió, colocando su mano sobre mi hombro para tratar de reconfortarme.
Pero ni siquiera eso iba a hacerme sentir mejor.
Porque ella ya no estaba,
y si ya no esta, nada tiene sentido.
Meses después.
M
e gustaría mucho decir que luego de que mi abuela muriera me mantuve fuerte. Que decidí luchar por ella y seguir adelante a pesar de todo. A pesar de mi madre, de los abusos físicos que recibía a diario de mis compañeros en el colegio, de la depresión con la que estaba liderando, pero la verdad es que no fue así.
Jamás fui una persona fuerte, siempre que me pasaba algo, por lo más mínimo que era, me lamentaba y lloraba, quejándome de mi mala vida. Jamás esperé mucho de mi, las personas no lo hacían. Mi madre no lo hacía, nadie lo hacia, entonces, yo tampoco lo hacía.
Así que, luego de que mi abuela muriera y a pesar de que intente aferrarme con uñas y dientes a aquel momento de bienestar que me había brindado, no fue suficiente.
Y aquí estaba yo: Mi yo, de nuevo. La Sofia de verdad.
La imperfecta, la suicida, la anoréxica,la "rara" del colegio, la rota.
Aquí estaba de nuevo, con los miles de demonios en mi cabeza, recordándome una y otra vez que el mundo está fracturado y que necesita por ello necesita menos personas rotas y más que sepan unir.
Y yo no era una de ellas.
Entonces, aquí estaba de nuevo. Mi verdadero ser. Mi alma rota y vacía se encontraba ahora fe arrodillas frente al retrete, vomitando mis problemas, mis recuerdos, mis dolores.
Aquí estaba yo, recostada contra la pared del baño de la casa de mi madre, marcando en mi cuerpo tantas veces como las miles de veces que necesite a alguien y nadie estuvo.
Si, había vuelto, yo. La chica inestable que siempre fui, la chica con el corazón roto y el alma herida. Esa que se lástima así misma por que se odia lo suficiente como hacerlo.
Y había llegado para quedarme.
《《《《《》》》》》》》
Gracias por leer♡
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Tras La Pantalla ||Abraham Mateo|| COMPLETA.
FanfictionLo único que ella podía hacer era amarlo tras una pantalla, quien diría que eso cambiaría su vida. ... ×Prohibida su adaptación × ¡Historia 100°\° mia!