Boss <Romanogers>

-Capítulo 41- "All I Have"

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E

Omnisciente

Al día siguiente ambos se levantaron juntos de la cama.

Se podía decir que ella estaba, de alguna manera, más tranquila ese día. Incluso liberada.

Una pequeña, tímida y naciente sonrisa se mantuvo en su rostro hasta la empresa, donde la vio por última vez hasta la noche.

Un peinado diferente marcaba un estilo antes visto en ella, y sus facciones relajadas llegaron hasta a asustar al castaño.

Ella estaba sentada frente al tocador, poniéndose el collar que usaría por el resto del día, así que Steve aprovechó y se le acercó por detrás, abrazándola y aspirando el perfume que se había puesto.

—¿Por que tan feliz hoy?— preguntó con una sonrisa.

Ella le sonrió vagamente por el reflejo del espejo.

—Haré un gran acto hoy— admitió.

Esto confundió aún más al hombre de los ojos azules, quien se separó de la rubia.

—¿Qué harás?— preguntó.

La mujer de los ojos verdes se volteó, quedando frente a él.

—Te diré más tarde.

Sabía que no lograría sacarle más información, así que se dio por vencido.

Como debió haberlo hace tiempo.

—Bien, entones... ¿vienes conmigo hoy también?

Negó con la cabeza.

—Tengo que hacer algo antes; puedes ir tú primero— palmeó su pecho y salió de la habitación.

—¿Te puedo acompañar?— le siguió.

Hizo una mueca.

—Ah, quisiera ir sola— pidió.

Él aún la miraba con extrañeza.

Se acercó a él con una sonrisa y puso una mano en su mejilla.

—Estaré bien.

—Algo así pasó hace algunos meses atrás, y mira cómo estás— señaló los moretones a medio sanar en sus brazos.

Agachó la cabeza.

Escuchó un suspiro delante de ella.

—Sólo prométeme que volverás, ¿sí?, que te veré unos minutos después en la empresa.

En su voz predominaba la preocupación.

Alzó la vista y se encontró con esos mares azules que tenía posados en sus ojos.

—Lo prometo— dijo, alzándose para darle un beso.

Pero no todas las promesas se cumplen.