CAPITULO SIETE.

19.8K 1.6K 339
                                    

Dedicado a: melisssa_stilinski24

Al pie de las escaleras se encontraba el,con un traje negro impecable,dandome la espalda.

Comenze a bajar las escaleras,haciendo resonar mis tacos por todo el lugar.

Nate se giro y me miro con ambas cejas alzadas,era una expresión de sorpresa pero a la vez de admiración.

Sonrei tímida y me puse frente a el,mirando mis zapatos.

El puso dos dedos en mi mentón y me hizo alzar el rostro para encontrarme con sus ojos grisaseos viendome fijamente.

El se aclaró la garganta.

— El vestido te queda corto.— articulo con voz gruesa.

¿¡Enserio!?¿¡Solo diría eso!?

¡Malditos celos de alpha!

Suspire.

— Pero aún así,luces preciosa.— susurro.

Levante la vista y puse un mechón de mi cabello detrás de mi oreja.

— Gracias.— respondí.— Tu luces muy...guapo.

Cuando dije eso,sentí mi rostro arder,solo esperaba que no se notará tanto como normalmente se notaba.

— Gracias.— respondió el.— Anda,tenemos que irnos o llegaremos tarde.

Asenti.

El tomo mi mano,a lo que de forma inmediata mi loba comenzó a aullar como loca.

Mi cuerpo sintió una corriente eléctrica que me recorría una y otra vez.

¿Era esto normal?

Jamás había sentido tal cosa,solo una vez pero fue cuando metí un tenedor a la conexión de la casa.

Jamás lo hagan.

No me di cuenta en que momento había subido a el auto,pero este ya se encontraba en marcha.

Miraba por la ventana de forma atenta.

Nunca había entrado a esta parte de el bosque,supongo que sería de otro territorio o no se,tal vez era neutral.

Eso significaba que no era de nadie,conforme la población de las manadas iba creciendo podían tomar de ese espacio para construir.

En esta ciudad era extraño que manadas vecinas pelearan con otras manadas,todos eran muy unidos y que yo recuerde,jamás hubo guerras con otros lobos.

Lo unico malo,es que estaba infestado de vampiros,así es,esos asquerosos chupa sangre se aparecían por aquí muy seguido.

Lo cual era un problema,ya que muchas veces mataban a niños,o se comían los animales de la aldea.

Nunca se había dado el caso de que convirtieran a un bebe o a un niño,solo a adultos.

Sentí una mano en mi hombro por lo que miré a Nate.

— Llegamos.— dijo bajando de el auto.

El troto hasta el otro lado de el auto y me abrió la puerta.

Baje.

El engancho nuestros brazos y comenzamos a caminar.

— No te despegues de mi,se amable con quien sea que te salude y Malesse.— respiro hondo.— No vayas a gritar,por lo que más quieras.

Puse los ojos en blanco.

— Bien,seré una dulzura.— mire al cielo.

Avanzamos hasta la entrada,donde un hombre con esos extraños trajes de pingüino nos abrió.

Por dentro todo estaba blanco,había musica de orquesta y barras de comida por todas partes.

Mmm,comida.

¡Concéntrate Male!

Volví la vista al frente,en donde Nate ya saludaba a un anciano.

Este me miro de arriba a abajo,demasiado descarado diría yo.

Me extendió la mano.

— Samuel Breto.— dijo el,su acento era extraño,podría jurar que era un italiano.

Sonrei.

— Que hermosa acompañante trae hoy, alpha.— miró a Nate.— Las pelirrojas,son una debilidad.

¿Que?

Juro que en estos momentos quiero soltar una carcajada,pero prometí ser una dulzura.

Nate gruñó por lo bajo.

— Es mi Luna Samuel,procura dirigirte a ella con más respeto.— me apego a el.— Vamos Malesse,te presento a mi mejor amigo.

Me jalo y yo lo seguí.

— ¿Quien era ese?.— susurre.
Nate tomo dos copas y me extendió una,la tome y lo mire alzando una ceja.

Solo quería saber quien era ese señor y quería saber que hacía aquí,es decir,solo había alphas jovenes con sus lunas,el era viejo y estaba solo por lo que veía.

— Es un alpha viejisimo,no tiene una luna,y por lo tanto no tiene descendientes,solo busca chicas jovenes para que le den un descendiente,pero ninguna chica es capaz de pasar los tres meses de embarazo.— bebió de su copa.— Además,con lo viejo que es,le cuesta trabajo estar “Activo”.

Reí bajito.

¡Quería soltar mil carcajadas y no podia!

Un chico se acerco.

— ¡Nate!.— exclamó.

— West.— dijo Nate.

Ambos se saludaron como hombres,cuando el chico me vio alzo una ceja.

— ¿Tu prima?.— ladeo la cabeza.

— Mi luna.— corrigió Nate.

El chico abrió su boca en plan ohmigoshhj.

Reí y el se aproximo a mi abrazandome.

— ¡Cuñissss!.— me sarandeo.

Reí un poco.

— Basta.— dijo Nate separandonos.

West bailo sus cejas pícaro.

— ¿Celos?.— tomo a Nate por los cachetes y comenzó a moverlo de un lado a otro.

Nate solo puso los ojos en blanco.

Seria una noche divertida.

My cold mate.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora