My cold mate.

CAPITULO DOCE.

Tome aire y alze una ceja dudosa.

— ¿Pasa algo Nate?.— pregunte buscando sus ojos.

Estos despegaron su mirada de West y me miraron a mi,por lo que le dediqué una pequeña sonrisa.

El solo cerro sus ojos con fuerza.

— ¿Donde estabas?.— habló osco.— Te estuve buscando por dos horas Malesse.

Frunzo el seño.

— Estaba con Cam,fuimos a el bosque.— respondí.— Repito,¿Pasa algo?.

El volvió su mirada a West,sin responder mi cuestión.

— ¿Nate?.— insistí.

El me miro y por un momento vi el miedo en sus ojos,como si temiera de algo o alguién.

¿Acaso este hombre tenía miedo de algo?

— Alpha,le sugiero que...

Interrumpí a la rubia.

— West,¿Me quieres decir que sucede?.— me giré viéndolo a el.

— No tengo la menor idea.— respondió encogiendose de hombros.

Cuando volví mi vista a Nate,la rubia tenía su seño fruncido de forma muy pronunciada.

Me arme de valor.

— ¿Me pueden dejar hablar con Nate?.— cuestioné en general.

— Claro,hablen.— dijo West poniendo una mano en su mentón con la vista fija en nosotros.

— A solas.

West hizo una mueca.

— Vamos Alice,veamos alguna serie en mi habitación.— chasqueo sus dedos.

Cuando ellos ya iban por la puerta de la cocina,note que Jocelyn seguía parada,sin moverse.

Y apuesto a que quería quedarse.

— Vamos rubia,mueve el culo.— apremio West.

Ella me dio una mirada molesta y salió de la cocina junto a West y Alice.

Cuando estuve a solas con Nate,el se acerco a mi.

Cuando estuvo frente a mi,tomo mi cara con delicadeza,y por un momento pareció examinarme.

— Te puedo asegurar que estoy entera.— susurré.

El suspiro aliviado.

— Unos vampiros estaban merodeando la zona.— hablo después de unos cuantos segundos de silencio.— Me sentía desesperado de no encontrarte por ningún lado,pensé que...podrían haberte dañado.

Lo mire con atención y después suspire.

— Tranquilo,no tienes de que preocuparte.— acaricie su mejilla.— Estaba con Cam y West,fuimos a el lago...

— ¿Que?.— cuestionó poniéndose de pie de forma inmediata.— ¿Fuiste al lago?.

Mire sus ojos que parecían estar salidos de su orbita,su expresión de miedo y enojo a la vez.

¿Que había hecho ahora?.

— Si,fuimos un rato y después regresamos a el bosque,dimos otro paseo,dejamos a Cam en su casa y finalmente West y yo regresamos aquí.— dije simple.— Nada de el otro mundo.

El tomo mi rostro entre sus manos y me miro a los ojos.

— Jamás vayas a el lago,jamás lo hagas Malesse.— habló lento.— No quiero perderte,no a ti.

Frunci el seño al ver la fuerza con la que me abrazaba,y susurraba que yo no me iría.

Mierda,parecía haber entrado en crisis.

Me separe un poco de el y le sonrei.

— Aquí estoy,no me iré nunca Nate.— acaricie su mejilla.

El me miro,se acerco a mi,al punto de que nuestras respiraciones se mezclaban.

Acortó la distancia que habia entre nuestros labios y lo hizo.

Me beso.

Y mentiría si digo que yo beso muy bien y pude seguirlo a la perfección,porque diablos,nunca había besado a nadie.

Primero solo fue algo ingenuo,después cuando nos pudimos sincronizar fue cuando realmente sentí todo eso en mi estómago,parecía un elefante saltando la cuerda en mi interior.

Pase mis manos por su cuello,sus manos bajaron desde mi cintura hasta mis muslos,de donde me cargo, de forma automática mis piernas se enredaron alrededor de su cintura y me sostuvo sobre la isla de la cocina.

Mis manos se enredaron en su cabello,estirando de el,pidiendo más.

Cuando el aire faltaba en mis pulmones,fue cuando nos separamos.

Abri mis ojos,viendo su rostro sonrosado y sus labios hinchados.

No podía imaginar mi cara si esa era la suya.

Ese había sido un primer beso absolutamente genial.