Alma Del Dragon

Capitulo 6

Una pesadilla eterna

Al día siguiente, en el pueblo, Owenat les explicaba a Daniela y Syrinx unas cosas, mientras Cynder espiaba a escondidas...

Syrinx: Déjame ver si entiendo. Ember desapareció...

Owenat: Si.
Daniela: Y desde hace meses, viaja por el mundo salvando personas y ayudando a todos...
Owenat: Así es.
Syrinx: Entonces...¿Abandono el pueblo para ser una heroína?
Cynder: (Pff, esa rara se hizo famosa...)
Daniela: Me pregunto si algún día la veremos de nuevo.

William sostenía un cofre mientras se dirigía hacia Cynder quien estaba a un costado de la pared del castillo.

William: Cynder.

Ella se dio vuelta. Por un momento se asustó pensando en que la habían atrapado espiando, pero se tranquilizó y conservo la calma.

William: Necesito que lleves esto al pueblo de Olaf.
Cynder: ¿Un envío? Oh, vamos ¿No puede hacerlo alguien...?

William: No. Lo harás tu y punto.

Dijo con un tono serio, dejó el cofre en el suelo y se marchó. Ella estaba un poco sorprendida, pues era la primera vez que lo veía reaccionar así.
Sujetó el cofre por los costados con sus garras y emprendió vuelo hacia el pueblo que no estaba muy lejos. Como los dragones ya habían terminado su entrenamiento, luego de tantos años, ya podían salir y volver libremente. Además, entrenar y aprender ya no era algo obligatorio. Mientras ella se ocupaba del encargo, los demás seguían hablando sobre el tema.
Se demoró un poco más de lo que tenía planeado, pues no supuso que fuera tan pesado dicho cofre. Apenas lo entregó, se dirigió hacia su hogar pues estaba en medio del atardecer. Pronto el sol se ocultaría y la idea de ir de noche no le gustaba en lo más mínimo. A mitad de camino, decidió ir a pie al lado del rio debido al cansancio que sentía. Faltando poco para que el sol se ocultara, estaba a punto de emprender vuelo...

Cynder: ¿Eh?

Sentía una presencia extraña, que sin duda alguna la observaba. Se dio vuelta y como se esperaba, no había nada.

Cynder: (Tal vez estoy imaginando cosas...)

Miró al frente y al instante se agachó al ver que una espada hecha de sombras casi le corta la cabeza. La espada, que voló a toda velocidad, se incrustó en un árbol y a los pocos segundos se desvaneció. Cuando se paró, vio que frente a ella estaba un dragón de lo más extraño; Era joven, de casi su mismo tamaño, los ojos rojos y todo el cuerpo estaba cubierto por sombras. No se podía ver el color de sus escamas ni nada en el, solo sus brillantes ojos rojos.

Cynder: ¿Cómo te atreves a atacarme? Sucia criatura de la oscuridad...
???: Cynder, tu hora ha llegado.
Cynder: (¡¿Cómo demonios sabe mi nombre?!)
???: Acabaste con la vida de un dragón inocente. Ahora yo, Nightmare, vengare su muerte.

Cynder: No se de lo que estás hablando...

Nightmare se escabulló en un agujero de sombra en el suelo, salió al lado de ella y trató de atacarla con sus alas. Por suerte, ella fue más rápida, lo esquivo y ,sin pensarlo dos veces, le dio una fuerte embestida con sus alas, derribándolo y haciendo que se golpeara con unas rocas.

Cynder: No sé qué es lo que quieres o que mentiras te han dicho, pero de todas formas no pienso perder contra nada o nadie que provenga de la oscuridad.

El se levanta, no parecía haber sufrido mucho daño del golpe.

Nightmare: Tu alma está condenada, perdiste el poco honor que te quedaba al acabar con la vida de un dragón inocente. Debes pagar el precio por...
Cynder: Si, escucha. Aun no entiendo de que hablas. Si lastime a uno de tus amigos de la oscuridad pues no me importa, ninguna de esas criaturas por mas "inocentes" que sean.
Nightmare: Ja, tan arrogante como siempre...