Alma Del Dragon

Capitulo 17

Un recuerdo olvidado

Era un dia soleado, aunque algunas nubes comenzaban a aparecer poco a poco. En el pueblo de los hermanos Viktor y William, se encontraban los pequeños Cynder y Feralas, entrenando juntos bajo la supervision de Lunarus. Golpeando a los muñecos, siguiendo las instrucciones de su maestro, se mostraban energicos y entusiasmados. Los hermanos permanecian no muy lejos, mirando a los dragones entrenar.

Viktor: Estoy orgulloso de ti, hermano.
William: ¿A si? Ja, si madre pudiera oirte ahora.
Viktor: Bueno, en parte.
William: Explicate.
Viktor: Por fin decidiste hacerme caso de tener un ejercito de dragones a nuestro control.
William: Deja de mal interpretar las cosas. Quiero que los dragones sepan defenderse. No volverlos bestias salvajes bajo ordenes de un tirano.
Viktor: Bueno, bueno. Tenia que intentarlo. Me imagino que la otra dragona tambien hara lo mismo.
William: Por supuesto, Syrinx pronto se les unirá. Es solo que aun no esta lista para esto.
Viktor: Al menos dales un entrenamiento duro, no algo tan facil...
William: Viktor. Son muy pequeños...
Viktor: Pero son dragones.
William: -refregandose las cienagas- Eso no quiere decir que no sientan dolor.
Viktor: Bah, como quieras. Pero deberias tratarlos por como son. Animales, no personas...
William: Hermano, retirate. -dijo con un tono serio y firme.-

Viktor se fue. Lunarus le ordenó a los dragones a detenerse, mientras se dispuso a hablarles seriamente.

Lunarus: Bien, pupilos. Es hora de avanzar un poco en el entrenamiento. Un dragon no solo se caracteriza por su enorme fuerza, sino que tambien por tener un gran don natural. El fuego es lo que la gran mayoria de dragones posee...

El se paró firme, apuntando hacia uno de los muñecos y lanzó una poderoza llamarada que, en cuestion de segundos, lo dejó en cenizas.

Lunarus: Pero no es solo escupir fuego lo que un dragon puede hacer. Hay muchos dragones que en lugar de fuego, tienen poder de algun elemento. Una magia poderosa y potente, capaz de impresionar al más antiguo de los magos. Pero no es algo facil. Cada dragon le toma su tiempo encontrar su elemento. Bien ¿Entendieron?
Cynder y Feralas: ¡Si!
Lunarus: Bien, vamos a intentarlo. Cynder, tu primero.

Ella se acercó, manteniendo una pequeña distancia entre ella y su objetivo, mientras mantenia sus ojos cerrados.

Cynder: Estoy lista.
Lunarus: Concentrate profundamente. Canaliza esa energia dentro de ti. Siente como se mantiene escondida por ahi. Cuando estes lista...

Sintiendo un cosquilleo pequeño, se animó. Abrio sus ojos y abrió la boca esperando lanzar algo. Sin embargo no salió nada, haciendo que se sintiera desanimada.

Cynder: No funcionó.
Lunarus: Estas muy desconcentrada.
Cynder: Supongo que si. Me preguntaba si lanzaria fuego o tendria algun elemento... o tal vez ambos.-Dijo con un tono contento.-
Lunarus: No hay muchos dragones que puedan hacer ambas cosas, pero no pierdas la esperanza. Probablemente lo descubriras pronto. Feralas, tu turno.

Ella se hizo a un lado, mientras que el se preparaba para intentarlo. Cerró sus ojos, tomó un poco de aire y luego exhaló con fuerzas. Lo unico que logro fue que sus pupilas brillaran de rojo, al igual que una pequeña luz roja que se formó en su boca. Pero todo solo fue por un segundo o dos. Se sentia levemente mareado y le faltaba el aliento, pero lo recupero rapido.

Feralas: Pude... Pude sentirlo por unos momentos-Dijo con un tono alegre.-

Lunarus estaba sin palabras, como si ver eso le hubiera recordado algo.

Lunarus: Emm, si... tomense un descanzo, ahora vuelvo.

Mientras el se dirigia hacia William, Cynder se acercó a el.