Capítulo ocho

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*Leed hasta el final del capítulo, porfa*

-Vaya desorden, ¿no tenías una criada?

-Sí, pero no vino ni hoy ni ayer.

Miro a Seven y me fijo en su rostro, que parece nervioso. Aparto la mirada y me quedo de pie en medio de la sala, para después seguir a Yoosung, que a su vez sigue a Seven.

-Estoy ocupado –pasa por una puerta y se sienta en una silla delante de un ordenador –Si queréis tanto quedaros no me molestéis.

Pasamos a la habitación y hay una cama con las sábanas de color rojo y una mesa con un ordenador encima. Es de última generación y está formado por dos monitores, un teclado con teclas con luces que se iluminan con un orden y un ratón con forma cuadrada. Varios cables van hacia abajo y desaparecen por debajo del escritorio. Es maravilloso, así que voy corriendo hacia el ordenador y me lo quedo mirando de cerca.

-Mira qué definición... Este monitor es enorme. Y este teclado... Con estas teclas parece que vaya a irme al paraíso...

Toqueteo toda la pantalla del ordenador y Seven me mira, extrañado.

-¿Te gustan los ordenadores?

-Sí, bueno, más o menos –respondo, en voz baja –Tampoco se me dan bien, ya sabes, solo sé abrir un Word y poco más.

Yoosung se ríe y Seven se mantiene serio, pero sus comisuras se curvan ligeramente hacia arriba, intentando reprimir una risa. Asiento, satisfecha, y me aparto del ordenador rapidamente para ponerme al lado de Yoosung.

-Como os dije antes, si es que os queréis quedar, podéis usar cualquier ordenador que veáis, menos este que estoy usando.

-¿De verdad?

Seven asiente y mira a Yoosung. Me mira fijamente y me hace una seña con la cabeza indocándome la puerta de la habitación. Frunzo el ceño y les doy la espalda para salir por la puerta con la máxima dignidad que puedo. Seguro que Seven quiere intimidad para decirle algo a Yoosung, probablemente sobre mí, así que cierro la puerta y doy un par de pasos en el sitio y acerco la oreja a la puerta.

-Seven, no seas tan seco con ella.

-¿Como que no sea tan seco? Traes a una chica, totalmente desconocida, a mi casa. ¿Y si es una espía? ¿O quiere investigar sobre mí?

-No digas eso, seguro que es buena persona y no tiene malas intenciones.

-Bueno, lo que sea, tú vigílala, ¿vale? Que no se meta en ninguna habitación.

-De acuerdo.

Oigo pasos, así que me aparto de la puerta y me apoyo en la pared de delante con los brazos cruzados, mientras saco el móvil y hago como que escribo un mensaje. Se abre la puerta y Yoosung sale con una sonrisa en la cara.

-Seven me ha dicho que podemos usar sus ordenadores, yo creo que jugaré una partida al LOLOL...

Caminamos hasta el supuesto salón y hay unos cuantos ordenadores sobre unas mesas, con un par de cascos en cada uno. Yoosung se va a directamente a uno de los ordenadores y se pone a iniciar sesión con su cuenta de LOLOL. En cuanto se pone los cascos y empieza la partida, me giro y me adentro en un pasillo con varias puertas en cada lado. Entro en cada una pero solo hay salas con ordenadores viejos y aparatos inservibles.

Salgo del pasillo y vuelvo al salón, me aseguro de que Yoosung sigue jugando y paso por una puerta para adentrarme en la cocina. Abro un armario y lo encuentro lleno de bolsas de Honey Budha Chips. Suspiro y lo cierro con suavidad. Salgo de la sala y voy por el mismo pasillo en el que se encuentra la habitación de Seven, donde me paro y acerco la oreja a la puerta para asegurarme de que sigue tecleando. Asiento, satisfecha, y me meto en otra habitación, donde veo un ordenador portátil.

Me acerco y me debato entre si llevármelo a casa o mirarlo aquí, pero decido no llevarlo, porque Seven ya sospecha mucho de mí, y si ve que falta un ordenador me va a culpar. Cierro la puerta tras de mí y corro hacia el ordenador. Lo abro y por suerte ya está encendido y sin contraseña, así que cojo un lápiz de memoria de mi bolsillo trasero y lo meto en uno de los puertos USB.

Copio y pego todas sus carpetas de archivos en mi lápiz de memoria en menos de un minuto y lo saco, para después bajar la pantalla y dejarlo como antes. Me levanto de la silla y me dirijo a la puerta. La abro con cautela y miro a ambos lados del pasillo, pero no hay nadie, así que suspiro con alivio y salgo. Me voy en la dirección contraria a la que vine y cojo el pomo de otra puerta y empiezo a girarlo, pero oigo que alguien carraspea a mis espaldas. Hago una mueca y me giro para encontrarme con Seven, mirándome con los brazos cruzados.

-¿A dónde se supone que vas?


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Os propongo una cosa, a todos los que comentéis y deis like (las dos cosas) os dedicaré el siguiente capítulo. Voy a intentarlo hoy de momento, y si veo que funciona lo haré más veces.

Así me ayudáis a que la novela se de a conocer :D

Y si me seguís en Twitter, os seguiré de vuelta ^^ (rubiusquad)

Enfin, que aquí tenemos a Seven aka el chico más borde que he conocido en mi puta vida, ¿qué os parece?

Si tenemos muuuchas leídas y votos y comentarios, subiré el siguiente capítulo el martes :D

MUAH💋

Guerra de hackers [Seven Mystic Messenger]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora