Seis - Cena con un caballero

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 Eché un vistazo a mi calendario, el lunes de la próxima semana tenía mi último examen en la universidad, estaba a tres días de ser toda una profesional, mi vida finalmente estaba tomando el rumbo que quería. Tuve que cancelar los planes con Sasha para el sábado, fue horrible escucharla maldecir, ella que es tan correcta para hablar, creo que nunca la había escuchado decir una mala palabra y así enfadada como estaba fue a correr a los brazos de su novio, él me observaba con el ceño fruncido pero luego sonrió.

 Me di una ducha rápida, me vestí algo provocativa (siempre era mi carta segura) y para cubrir mi aspecto me coloqué el sobretodo que me llegaba hasta los tobillos, me había cansado un poco el tema de tener que seguir ocultándome para salir a las partidas, esperé que los novios se encerraran en su cuarto y tomé las llaves del auto, golpeé suavemente la puerta de su habitación y le avisé a mi amiga que me iba.

 Cuando estaba en el garaje a punto de darle marcha a mi coche recibí un mensaje de Noel que estaba afuera, realmente no tenía muchas ganas de conducir y yendo contra mis deseos de seguir viviendo me encontré con Noel en la puerta del edificio, su sonrisa no podía ser más grande cuando me entregó el otro casco. Le pregunté si estaba bien, solo me contestó que estaba pensando demasiado y besó la comisura de mis labios, una descarga un poco más intensa que aquella que sentí con Blas me recorrió, torció una sonrisa. Me ayudó a subir y me aferré fuerte a su cintura.

 No pensé en nada mientras viajábamos, el aire atravesando las uniones del casco me refrescaba y rodeando a Noel con mis brazos me sentí como en casa. Disminuyó la velocidad a los pocos minutos y nuevamente me ayudó a bajar y me quitó el casco.

— ¿Estás lista pequeña? – arqueé una ceja.

— ¿Lista para qué? – me desabotoné el sobretodo y dejé ver un top diminuto de color amarillo y unos vaqueros muy ajustados, me dio un paneo rápido intentando que yo no lo notara pero pude ver la manera en que me estaba mirando y un extraño cosquilleo en un lugar un poco más debajo de mi estomago me hizo sonreír.

— Para jugar, nena. Tienes nuevos compañeros, los que solían ocupar nuestra mesa decidieron rotar, no los culpo, que una mujer les rompa el culo en un jueguito les aplasta la hombría – tomó mi mano y me llevó hasta la puerta, se colocó detrás de mí y llamé a la puerta tres veces – Luces increíblemente apetecible hoy – me susurró con sus labios muy pegados a mi oído, la puerta se entreabrió y los ojos negros de Rog aparecieron – Parece que va a llover – dijo Noel mientras aún estaba algo aturdida por el efecto de su boca en mi oído. ¿Qué demonios me estaba pasando? Por Dios, es Noel, solo Noel... solo está jugando conmigo, seguramente tuvo una mala noche con su "no cita" y estaba un poco necesitado. Sí, tenía que ser eso. Sacudí mi cabeza intentando espantar los estúpidos pensamientos y mostrando todos mis dientes ingresé al antro que era mi segundo hogar.

 Los susurros comenzaron cuando apenas crucé el umbral y me senté en el único lugar que estaba vacío. Noel acercó una silla junto a mí, pero no jugó, últimamente no estaba jugando, era como mi guardaespaldas. Miré a cada uno de mis contrincantes, al instante lo supe, sería pan comido.

 Una hora después había vaciado los bolsillos de los otros jugadores y abandonaron antes de que pudiera doblar la apuesta; entonces Noel se sentó frente a mí.

— ¿Ahora estás lista, nena? – tomó el mazo de cartas y comenzó a mezclarlas de tal manera que solo veía una gran mancha blanca.

— El estudiante superará al maestro – dije frotándome las manos – Voy a hacerte pedazos – le guiñé un ojo.

— Eso me gustaría verlo – empezó a repartir las cartas y casi una hora después me había quitado la mitad de mi dinero, estaba completa y absolutamente furiosa, todos se pararon y rodearon nuestra mesa para observar — ¿Estás asustada, pequeña? – Negué con la cabeza y él sonrió – Vamos a hacerlo más entretenido – colocó todas sus fichas en el medio y mis ojos salieron de su órbita, era la última mano.

Incandescente - Parte de mí {COMPLETA}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora