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Diferencial

— ¿No crees que si agregas demasiado podría en una catástrofe?

— ¿Desde cuando eres el que se preocupa por ese tipo de cosas?

Tony suelta una risa ligera ante la pregunta de su amigo. Él y Bruce se encuentran jugando en el laboratorio que Tony le acondiciono especialmente a este. En ese momento alguien llega a irrumpir sin previo aviso.

— ¿Perdiendo el tiempo como siempre, Stark?

— ¿Cómo es que te dejaron entrar? —pregunta Tony mientras se acerca al recién llegado.

—No necesito el permiso de nadie... ¿Cómo estás Bruce?

—Bien... bastante bien ¿Y tú?

—Bruce, eso no se pregunta es evidente que Rhodes está de maravilla.

—Oh pero claro que lo estoy, no verte por todos estos meses ha sido una bendición.

Tony finge enfado y Bruce suelta una risa ligera.

— ¿No vas a darme si quiera un abrazo? ¿A caso no me extrañaste?

—Me llamabas casi a diario pidiéndome auxilio por las estupideces que cometías, no te extrañe mucho exactamente.

—Eres de lo peor.

—Me alaga que lo digas ya que tú eres el experto en eso aquí.

—Vamos a tomar algo antes de que logres enfadarme y te eche del edificio ¿Vienes Bruce?

—No yo... me quedó a terminar esto, gracias.

Tony asiente para luego salir del laboratorio con Rhodes detrás de él. Van por el elevador hasta la oficina de Stark y de inmediato sirve algo para que los dos puedan beber.

—No me dijiste que volvías hoy.

—Perdón mamá, no sabía que debía avisarte de cada pasado que daba.

Tony rueda los ojos.

— ¿Qué tal todo?

—Excelente, el servicio es magistral.

—Pensé que volverías dándote cuenta que enlistarte en la marina fue el peor error de tu vida.

—Estoy en donde quiero estar amigo, pero dejemos eso aun lado, estoy bastante seguro que de lo que menos quieres escuchar es de mis largos entrenamientos que me hicieron dudar si seguía vivo o no en múltiples ocasiones. Mejor cuéntame... ¿Qué hay contigo?

Tony sonríe, James Rupert Rhodes ha sido su mejor amigo desde que juntos andaban por las calles haciendo de las suyas, o bueno Tony lo inducia a hacer de las suyas. No lo ve mucho desde que decidió enlistarse en la marina y se va por largas temporadas. Pero ahora está de vuelta y aunque no sabe si será por mucho tiempo sin duda se siente entusiasmado por ello.

—Pues las cosas en las industrias Stark están de maravilla, tengo lo del proyecto con los chicos de la universidad y...

—Oh vamos, quieres que ruegue porque me cuentes sobre el tal Steve ¿Cierto?

Tony sonríe de nuevo.

—Ya que insistes.

— ¿Cómo están las cosas con él?

—Es... perfecto supongo. Ahora somos oficiales pero eso ya lo sabías, te conté sobre mi plan de pedírselo y dijiste que sería mucho pero ¡Oh sorpresa! Dijo que si y llevamos ya tres meses juntos y...

—Oh por dios esto es serio... estas parloteando como un cotorro, esto es serio. Jamás estuviste así por nadie. Ni siquiera Pepper ¿Cómo esta ella por cierto?