Me apliqué rímel y comencé a arreglar de nuevo mi cabello con las manos, me paré en seco y me quedé viéndome en el reflejo del espejo. Sonreí y una pequeña carcajada salió de mis labios al darme cuenta de que me arreglaba para el chico del bus, para el chico que probablemente no vuelva a ver en mi vida.
Mis mejillas se ruborizaron y me coloqué lápiz labial antes de salir del baño con una sonrisa.
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El Chico Del Bus
Teen FictionTodos alguna vez nos hemos enamorado de alguien que nos encontramos por la calle y que probablemente no volvamos a ver jamás. Aunque al destino le gusta jugar, ¿no? ~•~ -¿Puedo sentarme aquí? Mi cabez...