No quiero tu ayuda | Assassin's creed [SIN TERMINAR]

Capítulo 21: Primera vez

[Este capítulo está basado en un One-shot que leí en inglés, me gustó mucho cómo estaba escrito y decidí cambiar algunas cosas y hacer como una especie de ¿renovación? Bueno, no sé explicarlo, en fin, espero que os guste y si no queréis leer nada explícito pasar al siguiente capítulo, gracias <3]

Todavía podía sentir a Connor parado a mi lado. Tenía los ojos clavados en mí y parecía un poco tenso. Por otra parte, él siempre estaba así, tenía un millón de cosas volando por su cabeza en un momento dado, y eso ponía infinitas cantidades de estrés en su mente y en su cuerpo.

Connor se movió torpemente sobre sus pies, volviendo su atención hacia la ventana de la cocina. Sus oscuros ojos escudriñaban el aire libre, observando las ramas mientras se balanceaban suavemente en la suave brisa del otoño.

—Godfrey y Terry me dijeron que necesitarían ayuda para mover madera hoy. Tienen una carga en el aserradero que necesita ser puesta en su carro. Cortan demasiada madera en comparación con la que pueden manejar.

—Siempre parecen morder más de lo que pueden masticar, ¿eh?

Él estuvo de acuerdo.

—White también me pidió que recolectara hierbas medicinales. Probablemente iré al bosque más tarde hoy.

—No te quedes fuera mucho tiempo. Realmente quiero pasar el día contigo. Prepararé una cena.

—No te preocupes. Prometo que estaré pendiente de la hora.

Connor se inclinó, envolviendo un brazo alrededor de mi cintura para que pudiera acercarme lo suficiente como para darme un beso en la sien. Luego se fue, tan rápido como había llegado. Salió de la cocina con un chasquido, y me dejó sola para hacer la cena una vez más.

Mi relación con Connor era inusual, pero no era infeliz de ninguna manera. Simplemente estaba ocupado con la vida que llevaba, y eso le dejó poco tiempo para estar a mi lado. Al principio, era algo que me había echado para atrás, aunque no le mencioné nada de esto a Connor, pero pronto me acostumbré. No tenía mucho tiempo para mí, aunque también había aprendido a pasar el tiempo que podía conmigo. La verdad es que no era mucho, y a menudo me dejaba con ganas de más, pero yo era feliz.

¿Fue egoísta por mi parte decir que quería más? Estaba feliz con nuestra relación. Aunque no estábamos cerca, nuestros momentos compartidos eran significativos. Sin embargo, Connor siempre parecía estar conteniéndose. Sus besos eran castos y cortos, sus toques fugaces. Pensé que después de varios meses en nuestra relación él se sentiría más cómodo y seguro. Y aún así, incluso en las noches en las que dormíamos abrazados Connor se aseguró de que nunca estuviera demasiado cerca de mí.

No quería hacerlo sentir incómodo, así que fui a su paso.

El tiempo había pasado volando, ya era de noche y ya había servido la comida en los platos, aunque Connor todavía no había llegado quería pensar que no le quedaba mucho.

O eso espero.

—Tranquila Miriam, ya sabes cómo se pone, distraído por la naturaleza y todo. —dijo Achilles con una sonrisa amable en su rostro.

Asentí. Eso era verdad, pero lo quería de vuelta ahora.

Y entonces dentro de unos minutos apareció por la puerta.
Me limpié las comisuras de mi boca y me levanté para recibirlo.

Connor me miró, iba a hablar pero le interrumpí.

—Mentiroso.

Iba a volver a hablar pero le volví a interrumpir.