En las Sombras

Capítulo 4

Unos días después Ravi se sentía como en las nubes, no sabía cómo, ni porque, pero sentía que estar con N era como si una enorme fuerza que no era de este mundo lo atrajera a él.

Todos los días al salir del trabajo, N esperaba por Ravi para una sección de besos en la que ambos luchaban por obtener el control. Como resultado, N había estado pasando un montón de tiempo en el regazo de Ravi, con la lengua de él en su boca y las manos de Ravi acariciándolo por todas partes.

Por lo general, después de unos diez minutos de besarse duro, Ravi lo invitaba para algún lugar a pasar el tiempo y platicar, pero hoy se estaba tomando su tiempo, besándolo una y otra vez, profundo y muy sucio, hasta que ambos apenas podía respirar.

N estaba dejando el control en manos de un humano, y eso extrañamente le gustaba demasiado. El teléfono de Ravi sonó, interrumpiendo el candente beso que se estaba dando. Miró la pantalla del aparato y cortó la alarma.

— ¿Pusiste una alarma? — le preguntó N divertido.

— Si, lo hice, vamos, si no, llegaremos tarde a la función de las ocho.

— Ok.

N nunca había entendido el afán de ir a un lugar, donde se iba a ver a otras personas según a actuar, jamás lo había entendido, pero ir con Ravi se sentía bien. Le gustaba complacerlo, y casi siempre hacían lo que Ravi proponía, ya que no era posible hacer lo que a N le gustaba, porque  sus gustos eran algo diferentes.

* * *

Justo un mes después de que comenzaran su extraña relación, Ravi estaba planeado celebrar su primer mes junto a N y llevarlo a la playa, pero el mal tiempo les impidió salir a la carretera.

Ese día se encontraban en el departamento de Ravi viendo una película, la cual en realidad N no estaba viendo, porque estaba muy entretenido besando el cuello de Ravi, mientras se encontraba sentado una vez más en su regazo.

— ¿Así de interesante esta la película que ni siquiera la estás viendo? — le dijo Ravi.

— En realidad, tengo una mejor idea — le respondió N al oído — que te parece si tú y yo...

Ravi sintió una corriente eléctrica recorrer su cuerpo ante las palabras de N, y dejó de poner atención al televisor para concentrarse en lo que N le estaba haciendo en el cuello.

Lo abrazó más a su cuerpo y comenzó a acariciar su espalda, mientras lentamente metía las manos debajo de la ropa de N para tocar su piel con sus manos.

Un apasionado beso en los labios fue el detonante para que Ravi se levantara con todo y N encima, llegara hasta su habitación y lo colocara sobre la cama. Después fue en busca del lubricante que guardaba en la cómoda de su cuarto.

Mientras regresaba al frente de N que estaba sentado en la orilla de la cama, comenzó a desabotonar su camisa mostrándole así su bien trabajado cuerpo, N mordió su labio inferior mientras lo observaba con ojos de lujuria, y esa pequeña acción hizo temblar a Ravi de deseo.

N no necesitaba ser preparado, pero eso su novio no lo sabía, así que al ver la mirada de necesidad de Ravi, rápidamente se posicionó justo enfrente de él, mientras bajaba su pantalón y el bóxer que llevaba puesto, liberando así su muy pronunciada erección.

Ravi miró abajo hacia él. N le devolvió una mirada hambrienta, y antes de que Ravi dijera algo se apoderó de su miembro y lo empujó en su boca. N amó la forma en que llenó su boca, amó la forma en que los dedos de Ravi acunaron su cráneo, firme y enérgicamente. Cerró los ojos y lamió a través de esa cabeza pulida, otra explosión de sabores y sensaciones familiares, ya que no era muy común que el hiciera esa clase de favores, pero hacérselo a Ravi era diferente.