El Hilo Rojo

Capítulo 30

- ¿Y ahora que hacemos? .
Le pregunté.
- Yo creo que deberíamos levantarnos y comer.
Me reí y le dí un codazo.
- No hablo de eso.
- Lo sé, bueno, no creo que tengas contactos en el bajo mundo.
- Claro que no, pero deberíamos investigar.
- No creo que sea algo que gogleas o encuentras en un directorio.
Puse los ojos en blanco.
- Tonto.
Nos levantamos y preparé un desayuno ligero.
- ¿ Que vas a hacer con el departamento?¿Lo vas a vender?.
- Sí, no puedo imaginarme vivir así, con el recuerdo de Jack aquí.
- Lo imagino.
- Por eso, solo desayunamos y nos vamos a nuestra casa.
-¿ Nuestra?.
- Nuestra.
Como no tenia nada mas que mi vestido, así nos tuvimos que ir,estaba totalmente despeinada, parecía una loca.
- Hasta luego señora.
Me dijo el guardia, lo saludé con la mano y nos fuimos.
- Piensa que nos casamos, que divertido.
- Date prisa.
Estaba totalmente roja.
Llegamos y mi teléfono estaba lleno de mensajes de voz.
- Tu madre ha de estar vuelta loca.
- Ni me lo digas, no quiero escuchar los mensajes.
- Tendrás que hacerlo nena, para saber como fueron las cosas.
- Odio cuando tienes razón.
Apreté el botón y dejé que se escucharan los mensajes.
- Hayley ¿Que demonios pasó? Christian...
Lo corté y corrió otro.
- Hayley, mamá se puso como loca, le dije que no te había visto, habló con Christian y el se veía muy mal ¿Que pasó exactamente?.
Otro mensaje corrió.
- Christian me dijo que tu estas con alguien más,mas vale que contestes niña así no es como te eduque...
Matthew solo se reía.
- ¿Es cierto que Christian te engañó?  Escuché que una chica dice que los encontraste, tienes que contestar...
Había más mensajes y casi todos de mi mamá renegando de mi, algunos de Linda repitiendo lo que me dijo Cara.
- Tienes que hablar con tu hermana nena.
Marqué su número.
-¿ Hayley?.
- Si soy yo.
- Por el amor de dios ¿Donde estabas? Eso ya no importa, mamá estaba como loca, así que yo calme a los invitados, Christian estaba diciendo que le dijiste que estabas con alguien y mamá explotó.
- Lo siento Cara, estaba en el departamento que me dejó Jack.
- Menos mal, en fin después escuché que una chica dijo que estaba con Christian y tu los encontraste, se lo dije a mamá y ella le reclamó a él y pues no le quedo mas que admitir que era cierto, lo corrió de la casa y más calmada se lo explicó a los invitados, aun así está furiosa contigo.
- No entiendo por que.
- Ni yo, oye que bueno que estés bien.
- Gracias Cara, por todo.
- Para que están las hermanas.
- Te quiero.
- Yo también, cuando puedas ven a hablar.
- Lo prometo.
- Adiós.
- Adiós.
Me tumbé en el sofá.
- Vaya, estuvo buena la fiesta.
- Lo sé, no quiero ver a mi madre.
- Tienes que, entre mas pronto mejor, además tienes que quitarte el vestido.
Fui a cambiarme, y después fuimos a casa de mi madre pero ella no quiso recibirnos, así que hablé con Cara y le presenté a Matthew, se cayeron  muy bien y más tarde nos fuimos.
-¿ A dónde vamos?.
- Quiero ir a ver  a Jack.
- Hayley, debes dejarlo descansar.
- Lo se pero hay algo que me dice que vayamos.
- Está bien, vamos.
Llegamos y como siempre nos sentamos en el piso, esta vez no quería hablar, así que solo me recargue en Matthew y estuvimos callados, hasta que alguien se puso delante de nosotros.
Miré hacia arriba y me quedé muda.
Jack.
- Hola Matthew, hola Princesa.
- Jack.
Parecía muy asombrado.
-¿ Que haces aquí?.
- Vine a felicitarlos.
-¿ Por que?.
- Han pasado tantas cosas y lo han hecho juntos, es increíble, pensé que no lo lograrían.
- No  entiendo.
Me miró.
- Pues...
Se sentó con nosotros.
- Quiero disculparme por todo lo que les ha pasado.
Era necesario que pasaran por tanto, solo así a ti te dejarían quedarte.
Señaló a Matthew.
- Eran pruebas.
Hablé.
- Así es Hayley, el que Matthew se quedara atado a ti ya era un problema que debíamos solucionar, pero tú lo viste y se complicó más.
Calló y nos miró.
- Pensamos en romper su hilo pero era imposible, nosotros no tenemos jurisdicción en eso, así que propuse ponerles pruebas para que te dejaran quedarte, obviamente todos se opusieron y trataban de buscar métodos para separarlos, así que empecé a seguirlos hasta donde podía para reunir pruebas de que Matthew merecía otra oportunidad.
- ¿ Nos seguías?.
- Claro, no siempre pero la mayor parte del tiempo si,  empecé a ver como ustedes dos se enamoraban poco a poco.
Y bueno después presenté las pruebas de que lo que ustedes tenían iba mas allá de la muerte, me dijeron que si ustedes lograban averiguar lo que les pasaba lo pensarían y así fue, el señor Fu les ayudó, ellos ya saben en que acaba la vida de cada uno de nosotros, así que ya sabían que  tu Hayley llorarías  por Matthew y que te casarías con Christian.
-¿ Lo sabían? Pero no me casé con el.
- Exacto, por eso Matthew empezó a ser visible, te estabas rebelando contra el futuro que ya estaba escrito,entre mas lo hacías el iba recuperando todo lo vivo, por que todos se daban cuenta de su amor y bueno, yo hablé con alguien más y me concedió el único deseo que tenía.
Quería que tu fueras feliz y no lo serias si te quedabas con Christian .
-¿ Con quien hablaste, con dios?.
Pregunto Matthew y Jack solo sonrío.
- Bueno y es así como sucedió todo, en cuanto a tu identidad... Se que te preocupa, no debe ser así, toma.
Le tendió un collar con una pequeña ala.
- Con esto no tendrás que preocuparte, todo acerca de tu identidad estará resuelto cuando llegues a casa.
- Gracias  Jack.
Lo miré con lágrimas en los ojos.
- No hay de que, solo quiero pedirte algo princesa.
- Dime.
- No vendas el departamento.
- No lo haré.
- Bien, yo tengo que irme.
Se levantó y nosotros hicimos lo mismo.
-Siempre te amaré.
Me dijo mientras me abrazaba.
- Y yo a ti.
- Matthew, cuídala muy bien.
- Lo haré, de verdad gracias por todo.
Nos sonrío y empezó a caminar y desapareció.