Desperté y sentí el peso de alguien más a mi lado, recordé toda la noche, todo lo que pasó con Matthew y sonreí para mí.
Poco a poco fui girandome hasta quedar de frente a él, observe sus pestañas.
La manera en que su cabello caía en la almohada y lo tranquilo que se veía, hemos pasado por tantas cosas y él es el que ha sufrido más,le acaricié la mejilla y abrió los ojos, habían recuperado un brillo normal, ya no parecían canicas, se veían vivos.
- Buenos días nena.
Sonrío y nos besamos.
- Hola Matthew.
Lo abracé y el aspiró mi cabello.
No se cuanto tiempo estuvimos así hasta que nuestros estómagos rugieron.
- Vamos a comer algo.
-¿ Vamos?.
- Si, ahora que ya estas... Estas vivo ya puedes hacer cosas normales.
- Es extraño ,volver a aparecer entre la gente.
- Te acostumbraras .
Me vestí y el hacia lo mismo, miraba su ropa con tristeza.
-¿ Que pasa?.
- Bueno mi ropa.
Sonrío tristemente.
- Después compraremos ropa, ahora vámonos.
Salimos y entramos a un pequeño local ,nos sentamos junto a una ventana y ordené unos hot cakes.
-¿ Y tu que vas a ordenar?.
- No lo se, se me antoja todo.
Terminó pidiendo unos huevos y hot cakes .
-¿ Que quieres hacer después?.
- No lo sé nena, estoy en blanco.
- Eso es raro.
- Lo se, tal vez ver a los clientes del departamento.
- Ja ja.
- ¿Donde queda ese departamento tuyo? El que te dejó Jack.
- Bueno a unos quince minutos de aquí.
Hace mucho que no iba para allá.
-¿ Quieres verlo?.
- Solo si tu estás segura.
Asentí, pagué la cuenta y caminamos ,llegamos a un edificio, tomamos el elevador y un escalofrío recorrio mi espalda, al recordar la primera vez que vine después de la muerte de Jack.
-¿ Estas bien Hayley? Si no quieres podemos irnos.
- Estoy segura.
Abrí con cuidado, estaba como lo recordaba, algunas cosas aún con plástico o en cajas, todo estaba cubierto de polvo.
-Tenia todo para su vida.
- Si, así era Jack ,lo planeó todo.
Toqué algunas cosas y me aguante las ganas de llorar, Matthew se dio cuenta y me abrazó.
- Fue una mala idea venir.
- No lo fue, debí haber venido antes, tal vez si debería venderlo y seguir adelante.
- Si eso es lo que quieres, adelante.
- Lo es .
Saqué las llaves y se las tendí a Matthew.
-¿ Que haces?.
- Quiero que tu las tengas.
- Debo dejar ir todo esto.
- Pero no entiendo.
- Siempre las llevo conmigo, no dejaba ir lo último que tengo de Jack aunque me lastimara.
Y por eso quiero que tu las lleves para poder liberarme un poco en lo que busco a alguien que la venda.
- Está bien nena.
Nos besamos y recogí unas cosas.
Salimos y fuimos hasta abajo.
Un guardia estaba ahí.
- Señorita Bellamy, ¿Como está? Hace mucho que no venía para acá.
- Si lo sé señor Fray.
- Mucho gusto joven...
- Matthew.
Dije rápidamente.
- Matthew...
Estaba esperando el apellido, ¿Pero que podía decirle?.
- Solo Matthew.
- Muy bien, espero seguir viéndola señorita.
- Si gracias.
Me despedí y Matthew solo asintió, lo único que tenía era su nombre y nada más.Llegamos a casa, el trayecto estuvo tranquilo y Matthew ni dijo nada, no quería que siguiera así y decidí romper el silencio.
-Vaya que día, estoy cansada y ahora tengo que prepararme para el trabajo y tu igual además tengo que hablar con Chris ,ya sabes para terminar con el y....
- No voy a ir.
-¿ Que dices?.
- No voy a ir Hayley, no más.
-No te entiendo ¿Por que?.
-¿ No lo ves?.
- Solo soy una carga para ti.
- No lo eres Matthew .
- Estas ciega, cuando el guardia pregunto mi nombre ¿Que de supone que le respondería? Sólo tengo el nombre ,nada de apellido, nada de nada.
- Pero eso se puede arreglar...
-¡ No se puede! No tengo nada, ni trabajo,ni familia, casa, todo.
- Pero me tienes a mi.
Dije sollozando.
- Lo sé, pero que te puedo ofrecer, nada, ni siquiera pagar la cuenta del desayuno.
Hayley, no hay un futuro para nosotros.
- No, no digas eso, lo hay y si no lo haremos juntos.
- Sólo soy un ente sin nombre sin nada para ti, de que sirve el amor cuando no puedo comprar algo lindo para ti, por que no soy nadie en este mundo, no existo y la persona que era antes ya murió hace casi un año.
Tenía razón para esta así de enojado, no tenia identidad, pero el amor que nos tenemos debería ser suficiente.
- Matthew, saldremos adelante juntos.
- No puedo Hayley, te amo con toda mi alma pero no puedes cargar conmigo y mi falta de identidad , yo sólo podré buscar una manera de sobrevivir.
-¿ Solo? ¿Que hay de mi?.
- Tu sola podrás, ya superaste a Jack, lo harás conmigo.
- El hilo... El hilo no te dejará.
- Lo sé, pero lo interentare, aunque me duela, será mejor no estas juntos , tu con tu vida y yo con la mía.
- No me puedes hacer esto.
Estaba hecha un mar de lágrimas.
- Es mejor así nena.
- No Matthew.
- Me voy a ir.
- No lo hagas, no Matthew.
Suspiró y sus ojos se llenaron de lágrimas.
- Es mejor , no quiero que sufras por mi, no tenemos un futuro juntos y lo sabes.
Lo abrazaba con todas mis fuerzas.
- Déjame ir.
Se aparto de mi.
Yo me tiré al piso, con mi corazón roto.
- Sería buena idea que aceptaras casarte con Christian.
-¿ Que?.
- Es mejor, mereces a alguien que pueda darte todo.
- Pero yo no lo amo.
- Cuídate Hayley.
Y salió.
Dejandome destrozada, me hice bolita en el piso y lloré mucho, hasta que me levanté y salí.
Hacia mucho frío y me abracé.
Toqué la puerta.
- Hayley, ¿Estas bien?.
Christian me miró y me hizo pasar.
-¿ Todo bien? .
- Solo quería decirte que acepto casarme contigo.
Sonrío y me abrazó.
- Gracias Hayley, prometo hacerte feliz .
Siguió besándome y me dejé llevar, aunque mi alma y corazón estaban en otra parte.
- Cuanto antes nos casemos será mejor Chris.
- Claro que si Hayley.Y así comenzó otro frenesí de cosas para hacer, me casaba en dos semanas .
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El Hilo Rojo
Storie d'amoreLa leyenda del Hilo Rojo nos dice que puede estirarse y contraerse, pero jamás romperse. ¿Que sucede cuando eso pasa? Hayley es una paramedico, tiene una vida feliz, junto a su familia, amigos y su novio. Un suceso trágico hace que ese hilo se rom...