El Playboy quiere Besarme, [SP#3] | ✓

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7. Desesperación y conversaciones con Malcolm  

Me dirigí a mi casillero y vi una nota pegada en la puerta.

"TEN CUIDADO".

Estaba escrito en mayúsculas, con letras enormes y en un color rojo intenso. No me podía creer que mis compañeros estuviesen tan sumamente desesperados como para llegar a este punto. Escuché a unos chicos reír un par de pasos detrás de mí, arranqué la nota y la arrugué tirándola a una papelera que había en la esquina. La molestia apareció en mí, pero me dije a mí misma que debía mantener la calma.

Volví a mi casillero y lo abrí, cogiendo los libros que necesitaba para las demás clases. El almuerzo acababa de empezar, así que con entusiasmo pensé en encontrarme con Gina. La necesitaba tanto a mi lado que básicamente también si aguantaba las provocaciones de los demás era por ella.

Cuando acabé, cerré la puerta y me di la vuelta, preparada para ir a la cafetería. Sin embargo, una vez que comencé a caminar por el ancho pasillo, todos los ojos se pusieron sobre mí, siguiéndome. Los ojos pertenecían a mis compañeros, les miré y les lancé un par de miradas.

¿Qué demonios querían?

Hice caso omiso y miré hacia el frente. Al segundo en el que lo hice, no tardé en escuchar burlas y más burlas, y obviamente un buen número de apodos desagradables. Muchos susurraron mojigata cuando pasé por delante, tomando una respiración profunda recé internamente porque mi carácter no saliese a la luz y no mostrarles cómo me sentía.

Pero, de repente, en cuestión de mini segundos, todo el mundo comenzó a gritarme. Mientras pasaba, mis compañeros estaban a ambos lados del pasillo, abucheándome e insultándome. Sus ojos eran fríos y me encontré cerrando las manos en puños. Me supliqué a mí misma no reaccionar.

━¡Apestas! ━oí que gritaba un tipo━. ¡Eres una puta!

Miré a la persona en cuestión y lo vi sonreír. La ira hervía dentro de mí y sabía que pronto mi paciencia se agotaría. Pero sabiendo que era lo que ellos buscaban, empecé a caminar lejos y salí a la calle, necesitaba relajarme y tomar el aire. No podía alterarme más de la cuenta porque no quería darles una respuesta.

Fuera, el tiempo era precioso. Hacía sol y todo estaba cálido, así como también el cielo despejado. Una brisa fresca pasó por mi lado y me dio unos escalofríos agradables, pero aún me sentía estresada. Sentía como si me estuviese ahogando poco a poco con todo lo que estaba sucediendo en los últimos días.

Me estaba dando cuenta de que decirles que me iba a quedar el beso había sido una mala idea. Eso sólo me había llevado a que la gente me odiara, y si había creído que me iban a ignorar, estaba completamente equivocada. Tenía más atención ahora que nunca y eso sin duda no era nada bueno.

Cerrando los ojos, me apoyé contra una pared. Me dije que sólo tendría que soportar esto durante seis meses, pero no me relajé. Incluso aunque me lo dijera mil veces, mi estómago seguiría apretado y encojido de los nervios. Estas personas estaban completamente locas por el juego y solamente me preguntaba hasta qué punto eran capaces de llegar.

━Daisy ━oí decir a alguien.

Abrí los ojos y me encontré con Malcolm de pie justo en frente de mí. Caminó más cerca y sus ojos se suavizaron mientras me miraba, sorprendiéndome. El hecho de que mi corazón latiese con fuerza me ponía enferma, así que aparté la mirada.

━¿Qué quieres? ━pregunté rotundamente, mirando al suelo.

━¿Estás bien? ━preguntó.