Sweet Nightmares [FNAFHSYUME]

Enamorado

La chica de cabello blanco tiro su mochila al piso de la sala de estar, había llegado más tarde que de costumbre por quedarse ayudando a la linda rubia con la costura, sonrío al ver a su hermana de pie en el sillón cantando la canción que estaba en la televisíon.

—Nadaremos, nadaremos—Cantaba sin dejar de hacer movimiento con sus brazos. —Hice mis pancakes, están en la cocina—

— Hola a ti tambien, Mai— Puppet- sin prisas camino a la cocina, tenía hambre y agradeció que su hermana hubiera cocinado, no quería hacerlo ella.

— ¿Algo interesante el día de hoy?— Pregunto cuando entró otra vez en la sala, se sentó en el sillón que no era ocupado como pista de baile por la chica.

— Nopi, ¿Y tu? ¿Algún avance con el pajarito rubio?— Preguntó Mai sentándose de golpe para mirar con atención a su hermana.

— Nada, creo que me ganara el zorrito rojo, o el oso dorado—   Comento algo desanimada pero sin dejar de sonreír, la verdad ella no lo "creía" Ella sabía que uno de ellos ganaría el corazón de la linda rubia, si es que aún no había uno ganado.

— hum, no te rindas ya sabes , llegarás a tu meta , un día triunfarás y, tuyo será el honor. — Dijo con entusiasmo para tararear una melodía conocida para ambas

— ¿Hércules? — La otra asintió para seguir cantando — Voy a dormir Mai—

— Okey. Buenas noches.

La chica corría por los hermosos campos que parecían de caramelos para ver a lo lejos una figura  delgada con orejas de conejo sentado en la pequeña colina, estaba mirando hacia más allá del límite del Hope.

— ¡Hey Bon!— Grito llamando la atención del peliturquesa. Quien miró sorprendido a la chica para sonreírle.

— Buenas tardes Puppet— - Comentó distraído para volver la vista a la lejanía del territorio.

— Buenas noches— Corrigió con una sonrisa para sentarse al lado del de orbes esmeralda que ni siquiera presto atención a la corrección — ¿Se te perdió algo, además de tu suerte?—

La burla pasó desapercibida para el chico que seguía mirando hacia el límite, Puppet temía que en cualquier momento se levantara y corriera hasta donde el territorio Hope terminaba.

— Quiero salvar a Bonnie.— Murmuró.

— Creo que eso sería difícil amigo—  Bon la miró con el ceño fruncido, ella levantó las manos en señal de inocencia para que la dejara continuar. — Es un Ghost, Bon. ¿Crees ser capaz de luchar contra esas pesadillas?—

— No lo sé, pero tengo que intentarlo.

— Si esta enamorado el conejito— Se rio Puppet, había que estar ciego para no notar lo mucho que estaba enamorado Bon de Bonnie. La chica se llevó un caramelo a la boca que traía en su bolsillo.

— Puppet— Habló sin mirarla, recibiendo un 'hum' de ella — ¿Te has enamorado alguna vez?—

— Si— Hablo con naturalidad. Demasiada tranquilidad, tanta que no podía ser real. — Interesado en mi intento de vida amoroso ¿Eh?—

— ¿Que paso?

— Ella era una Hope que quería sacar al chico de sus pesadillas, solo que no podía decidirse de a quien salvar.— Rió con tristeza. — No soy la indicada para hablar de amor, ¿Por qué no vas con Joy a pedirle consejos?—

— Su novio también es Hope, no creo que su respuesta sea la que espero.— Comento Bon sin saber que su amiga también tenía una gran cantidad de problemas con su novio Hope.

— Solo debes ir, destruir las pesadillas, o algo así. Lo importante es que lo ames.

—Gracias Puppet, ¿Ella se decidió por alguno al final?

— Por qué no le preguntas tú— Una rubia se acercaba con una sonrisa. Bon miro a Puppet con una mezcla de confusión y tristeza. 

— Holo, ¿Que tal chicos?— Pregunto Chica con su característica sonrisa.

— No mucho, linda— Le dijo Puppet levantándose del césped  — Bueno Bon, un gusto hablar contigo, debo irme. Adios—

— Adiós— Respondieron los otros dos.

—  ¡Buenos días! — Grito la enérgica albina a dos centímetros del oído de su gemela, la de cabello más corto luego de lanzar un gruñido se removió en su cama para acomodarse aún con la chica encima, quien no dejaba de reír.

— Quítate Mai— No le molestaba la presencia de su hermana, pero eso no cambiaba el hecho de que la estuviera asfixiando, ella no era precisamente pequeña — Mai, si no te quitas  sufrirás la tortura de Godzilla —

— ¡Todo menos Godzilla!— Grito apartándose de su hermana, quien ahora era ella la que reía de la reacción de la de cabello largo. Mai y Puppet eran alocadas y unidas a su manera. Nada les quitaría aquella felicidad tan propia de ellas, no siempre sería así. Puppet temía que su hermana se enamora, y que ahora solo fuera ella.