— Hey, cuidado— Le dijo el chico de cabello rubio mostaza sujetando con fuerza la muñeca de la chica para evitar que ella tropezara.
Llevaban caminando por los tejados de aquella zona por un rato, pero Mangle no dejaba de tropezarse y chocar con Springtrap. Y aun así la terquedad de la albina le impedía pedir ayuda al chico que pasaba algunas noches mirando el cielo nocturno desde esos lugares.
—Yo puedo sola—Murmuró, para apartarse de golpe, tropezando cayendo de espalda, para su suerte aun en el tejado y no cayó al piso.
—"Yo puedo sola"—Se burló el rapero para ofrecerle una mano para levantarse, que acepto algo sonrojada y malhumorada. —¿Aún no quieres mi ayuda?—
—Solo callate y avanza— Springtrap rió con más ganas y la hizo seguirlo. Llegaron al tejado al que Springtrap planeaba llegar.
El atardecer se veía hermoso desde aquella altura y ese lugar, Springtrap tenía razón aquel lugar era perfecto, no sabía porque se había negado a acompañarlo cada tarde. Quizás por la altura y la distancia que había que recorrer.
— Es hermoso— Murmuró la albina, el cielo que era como un hermoso lienzo en manos del mejor de los artistas, un profesional en combinar colores, Mangle nunca había visto el cielo teñido de tal forma tan singular.
— Lo es— Respondió el chico con la gastada capucha de conejo, pero su mirada no estaba posada en el increíble cielo, sino en la chica sentada a su lado, su largo cabello blanco caía hasta su cintura, pocas veces la veía con aquel peinado y no dejaba de encantarle aquel hermoso color blanco.
Era un sentimiento horrible, él no podía entender el porqué de aquel molesto sentimiento, seguía sintiéndose como un pequeño con miedo a que le arrebataran a su amiga de infancia, para Springtrap quererla tanto no bastaba, sentía que en cualquier segundo llegaría alguien más, más capaz, más guapo, más todo y menos como él. Estaba solo en aquel mundo hasta que conoció a los dos astutos y malhumorados zorros. Miró con una pequeña sonrisa a la albina que se había quedado dormida.
Dejó su malgastada chaqueta con su peculiar capucha de conejo sobre el cuerpo de la albina, y dirigió su mirada al cielo que poco a poco perdía luz dando paso a la noche. Pensó que su yo del pasado hubiera llorado sin consuelo. ¿Enamorado? Definitivamente odiaba aquella palabra, aquella sensación, pero daría lo mejor de sí para enamorarla. Y como un tonto le sonrió a la nada de solo imaginar a la albina sonriendo.
El chico se quedó dormido luego de perder la cuenta de la cantidad de estrellas que veía. Abrió los ojos en el colorido y empalagoso mundo.
— Llegas tarde apestoso— Le dijo la chica con orejas de zorro a su lado, Springtrap solo se estiró aún recostado en el verde prado para sonreirle a la albina que estaba sentada a su lado.
— No es justo que lo diga quien me hizo esperar toda la noche y no llegó ayer— Sonreía a pesar de no estar muy feliz realmente, era verdad había esperado a la chica toda la noche, solo se sentó en el lugar que acostumbraban ir, pero ella nunca llegó.
— Oh, bueno yo, fui a ver a Deuz, luego en casa me quede viendo una película, es todo— La albina no se le oía nerviosa, pero por su espalda sentía las gotas sudor frío. No había visto ninguna película aquella noche, de hecho había llegado a casa cuando ya había amanecido por su suerte Foxy había dormido como un tronco. (La verdad siempre lo hacía)
— Mientes enana— Se rió mientras despeinaba el flequillo de la chica.
— Vamos a buscar a los chicos.¿ Me acompañas o que?
— Me temo no tener otra opción
Ambos caminaron en silencio por los hermosos prados, sus colores empalagosos brillaban, Springtrap no podía dejar de mirar de vez en cuando a Mangle, aunque ella lo ignoraba olímpicamente.
— Así que Deuz ¿Eh?— Le dió un ligero codazo en el estómago de la chica que se tenso al instante.
— ¿Qué intentas decir, pestoso?
— Nada, nada, pero no dejaré que mi enana caiga en manos de los nightmare — "No otra vez" Pensó, pero prefirió dejar la frase sin acabar a recibir un posible golpe de la chica, quien no contestó nada en lo que quedó de camino. Aunque no dijo ni una palabra el chico noto la pequeña sonrisa que estaba en su rostro.
Temía perderla, pero más temía dejar de ver aquella hermosa sonrisa de Mangle, no le importaba verla con Deuz, se conformaba con verla sonreír. Él también sonrió sin notarlo.
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Sweet Nightmares [FNAFHSYUME]
Fanfiction-Déjame secar tus lágrimas, me niego a verte sufrir, solo quiero verte sonreír otra vez. «Cuándo un categoría Hope se enamora de un categoría Ghost sus sueños se ligan y su única misión será destruir todas las pesadillas para liberar a la persona am...