CAPÍTULO XVI: ¿MI MEJOR AMIGO JULIÁN?

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NARRA THOMAS

–thomas e-el es un chico nuevo que trabaja aquí, es del aseo –dijo papá.

–ah... Vale.

–S-si soy nuevo aquí –tartamudeo.

Mire nuevamente a chico que me saludó y sonreí para luego seguir hablando con mi familia. El chaval seguía hay parado y me extraño porque sus ojos se estaban humedeciendo, un momento ¿esta llorando?

Mi padre se paró, tomo al chico de la espalda y lo llevo afuera de la habitación, le dijo algunas cosas, el tío le gritó algo y volvió a mi lado.

–¿por que lloraba? –pregunte.

–nada hijo, cosas de él.

–vale... ¿cuanto tiempo más estaré aquí?

–solo este día, mañana regresas a casa, te mantendrán en observaciones.

–¡tom! –se lanzó sophi a mi cuando entramos a la casa–te extrañé demaciado.

Le sonreí y correspondí el abrazó, no recordaba nada de esto, esta casa no es en la que vivía antes, no sabía donde ir, todo era nuevo. Al parecer tuve un accidente y perdí parte de mi memoria, no me dieron detalles de aquello.

–hijo ven –segui a mamá por las escaleras y llegamos a una gran habitación pintada de azul, todo estaba muy ordenado y bonito–aqui duermes tu.

–vale...

Examiné detalladamente todo en el lugar y volví a sonreír.

–bueno te dejaré a solas para que descanses –asenti y ella salió cerrando la puerta.

Me recosté en la cama mirando el techo blanco, no quería volver a cerrar los ojos sentía que ya había descansado bastante para volver a dormir denuevo. El doctor me dio licencia de una semana para ir al instituto nuevamente. ¿tengo amigos?, ¿novia? Algo tendré que tener, sin previo aviso mi puerta se abrió de golpe, entrando por ella mi padre.

–tom... –se sentó a mi lado en mi cama, comenzó acariciar mi cabeza, algo que me extraño ya que nunca he recibido su cariño, pero aún haci se sentía bien–quiero que sepas que aunque nunca me veas o tal, te quiero mucho ¿sabes? –asenti no del todo convencido.

–¿no recuerdas nada de lo que ha pasado, desde que llegamos aquí?

–no papá.

–vale..., Hijo en una semana más irás nuevamente al instituto y si alguien te molesta tu solo dímelo ¿vale?

–¿por que alguien me molestaría?, ¿tu sabes algo?

–no, solo decía tu sabes cómo es la juventud ahora, el tema del bullying y tal.

–vale...

–tom tu siempre has sido un buen hijo, no quiero que te juntes con personas que no son buenas en tu vida.

–¿a que te refieres? 

–a que no quiero que tengas amigos que te lleven por un mal camino, por ejemplo... Un maricon o un drogadicto.

–se les dice homosexual.

–vale como se les llame, solo no quiero que te juntes con personas de ese tipo.

–¿y por que yo me juntaría con un homosexual?

–no lo sé, es que ahora hay mucha gente con esa enfermedad, vas a cualquier lado y te encuentras a uno. Tú me entiendes.

Asentí confundido y volví mi vista al techo. Mi padre me acarició la cabeza una vez más y salió de la habitación. No sé si me estaría tomando el pelo, pero eso fue más extraño que haber llegado a una casa que no conozco en absoluto.
Sentí hambre, me puse de pie dispuesto a buscar la cocina, cuando iba por el pasillo directo a la escalera escuché como Sophie hablaba con alguien, me han enseñado que es malo espiar, pero me intrigaba ya que se escuchaba algo alterada.

amor de un adolescente perdidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora