°Capitulo 9°

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Me paro en seco, parpadeo varias veces para adaptarme a la luz, trato de aclarar mi visión, contengo la respiración al ver a Darek sentado con sus piernas cruzadas en los tobillos, tiene un traje de tres piezas con su corbata que esta floja y me mira detenidamente.

- ¿De qué hablas? - por fin encuentro mi voz.

-Gracias por hacerme el favor de esta noche - me quedo rígida con la mandíbula apretada.

- ¿Me contrataste? - le digo alterándome.

- ¿Qué? No, solo me enteré de que mataste a uno que afectaba indirectamente mi negocio digo...nuestro negocio - dijo aun mirándome fijamente.

-No le puedes decir a nadie ¿Entendido? - le digo señalándolo con el dedo acusatoriamente.

- ¿Por qué lo haría? - dice poniéndose de pie.

Me quede callada haciéndome la misma pregunta, ¿Por qué lo haría? No lo sé, pero es mejor prevenir.

Se acerca lentamente hasta donde estaba yo, es mucho más alto que yo así que tuve que alzar la vista para quedar mirándolo a los ojos, nos quedamos viendo fijamente a los ojos durante unos segundos hasta que suspiró, se sobo los ojos con las manos frustrado y hablo.

- ¿Por qué no lo dijiste?

Lo mire con una ceja enarcada en forma de pregunta.

- ¿Por qué lo tendría que hacer? - pregunte con el ceño fruncido.

-Somos una familia - dijo con el ceño fruncido.

- Corrección ustedes son una familia yo soy solo una más de la casa - dije mirándolo a los ojos.

- ¿Cuándo lo vas a aceptar? - preguntó aun frustrado.

- Espero que nadie se entere – Evadí su pregunta

- Bien - dijo suspirando y negando lentamente con la cabeza.

Asentí en respuesta, me dirigí a la escalera, llegue a mi habitación, me cambie y me tire a la cama rendida, no dure más de cinco minutos hasta caer en los brazos de Morfeo.

{***}

Me desperté gracias a unos pasos que sonaban apresurados en la escalera, me quede unos segundos mirando el techo hasta que abrieron mi puerta de golpe, mire hacia esa dirección y me encontré a mis hermanos mirándome con el ceño fruncido, me senté en la cama y les pregunte.

- ¿Qué?

-Queríamos despertarte con agua- dijo Ryan señalando unas pistolas de agua que no me había dado cuenta que traían en las manos.

- ¿Por qué? - pregunte levantándome de la cama.

- Emmm... ¿de bienvenida? - dijo Nate encogiéndose de hombros.

- ¿Me preguntas o me respondes? - pregunto divertida.

- No lo sabemos - dijo Nathan.

Suspire, me acerque a la puerta - ¿Para que vinieron?

- Te veníamos a despertar para avisarte que hoy tenemos que entrenar - dijo Ryan.

- ¿Entrenar? - pregunte confundida.

- Si, ahora que estas aquí tienes que poder defenderte por ti misma - dijo Nate.

-Bajo en diez minutos - dije para después empujarlos fuera de mi habitación y cerrar la puerta con seguro... por seguridad.

Arreglo mi habitación lo más rápido que puedo, cuando ya está mejor entro a mi armario, tomo ropa deportiva, un top negro, una licra del mismo color y unas zapatillas de deporte azules oscuras con negro, luego de bañarme me recojo el cabello en una cola alta, y me aplico protector solar, reviso que todo esté bien antes de salir, bajo hasta el primer piso, voy hasta la cocina, entro y encuentro a una señora que no tengo ni la menor de quien es, ella se voltea para mirarme y deja de hacer lo que sea que estaba haciendo.

-Buenos días señorita Zoe, soy la cocinera de la familia Sparks, ¿Desea algo para desayunar? - pregunta con un tono de voz formal, pero a la vez alegre.

Niego con la cabeza - No gracias, voy a entrenar y después desayuno, ¿Sabe dónde están todos? - pregunto dándome cuenta de que no escucho ninguna clase de ruido cerca.

-Están en el patio trasero esperándola - dice señalando la puerta que da al patio.

- Gracias - digo dirigiéndome al patio.

Ella asiente y sigue en su tarea, cuando salgo veo a todos mis hermanos listos para entrenar esperándome, Mónica y Darek están sentados a un costado de donde se supone que entrenaremos, es una explanada en la parte trasera de la piscina bastante grande y excelente para entrenar, me acerco a los chicos lentamente, mientras caminaba cruce mirada con Darek, este me hizo un gesto con la cabeza tratando de darme ánimos discretamente, suspire y me hice al frente de Nate.

- ¿Preparada? - me pregunta este moviendo la cabeza de lado a lado haciendo que su cuello suene.

- ¿Batalla cuerpo a cuerpo? - ellos asienten - Bien - dije, Ryan y Nathan se pusieron al lado de Mónica.

- Esquiva, ataca y cúbrete - es lo único que me dice Nate antes de ponerse en posición de ataque.

Hago lo mismo y dejo que ataque primero, así lo hace, manda un puño a mi costado derecho, dejo que me impacte, no hago mueca de dolor, vuelve a posición, escucho que los chicos empiezan a gritar mi nombre para animare pero paso de ellos, miro a Nate justo cuando siento una patada en mi abdomen que me deja sin aire, doy unos pasos atrás pero sin quitar la mirada de los ojos de Nate que me mira con lastima, también paso de ella, último golpe que dejo que me impacte, al parecer que Nate pensó lo mismo que yo porque mando su puño a mi parte izquierda de mi cara con toda su fuerza, un golpe de este tipo dejaría en el piso a cualquier persona que no hubiera recibido peores golpes, hasta inconsciente hubiera quedado.

El impacto solo me hizo mover un poco mi cabeza hacia el lado, sentí un sabor metálico en mi boca, escupí hacia un lado y como ya sabía salió sangre, escuche un grito ahogado de parte de Mónica al ver la sangre, miro a Nate, veo arrepentimiento en su mirada y también confusión al ver que sigo consciente, me limpio la boca y hablo:

-Ahora es mi turno.

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