Capítulo 26

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 Suspiro mientras me siento al lado de una señora que sostiene su bolso con fuerza, como si fuera a intentar atracarla.

 Ahora mismo, no tengo ni fuerzas ni para pedirle un chicle.

 Llevo todo el fin de semana con los mismos pantalones de pijama, paseando por la casa y mirando las paredes de mi habitación mientras tenía música de ruptura en los auriculares. Aunque en realidad no ha habido ninguna ruptura, pero lo he sentido así. Que yo recuerde, siempre me ha gustado Nick, y decidir que tengo que superarlo...no sé, es como si hubiera perdido una parte de mí.

 Y sí, sé que suena terriblemente patético y parece un insulto al impresionante palacio del feminismo y la defensa de la dignidad de las mujeres pero, como he dicho antes, estoy tremendamente cansada.

 Además, al teléfono tengo a Phoebe pegando saltos, contándome no sé qué rebaja del centro comercial, y que es increíble, y que deberíamos pasarnos después y que bla bla bla...

-Bueno, ahora lo hablamos, ¿vale?-suplico al auricular. Necesito unos segundos de paz de la emocionada y a la vez chillona voz de mi mejor amiga.

-Oye, ¿estás bien?-me pregunta Phoebe.-Sé que has estado mala pero...no sé, se te escucha rara. ¿Seguro que no te pasa nada malo?

 Seguramente vio la nota que dejé en mi novela de Wattpad, en la que me disculpaba por no subir capítulo el fin de semana, pero que estaba mala y no conseguía concentrarme. Y no es mentira, porque al fin y al cabo me sentía mal. Todavía me siento mal. He pensado hasta en dejar la novela, pero por mucho daño que me hace, también es una manera de escapar de mi realidad, y por nada del mundo voy a dejar esta historia.

 Me apoyo en el cristal y hago un esfuerzo por parecer animada.

-Sí, de verdad. Sólo es que me duele la cabeza-le digo, y por un momento sonrío, olvidándome que mi amiga está al otro lado de la línea y no puede verme.-Quizá tenga un virus de esos de 48 horas.

-¿Y por qué no te has quedado en casa?

-¿Yo? ¿Quedarme en casa y faltar a clase? ¿Estás loca?-me incorporo y vuelvo a sonreír.-Además, te sentirías increíblemente sola sin tu patata, tonta.

-Yo estoy rodeada de gente que me haría compañía-bromea Phoebe, aunque me siento culpable. Phoebe es realmente guay. Si no se juntara conmigo, quizá podría conocer a amigos a su nivel.

 Aún así, me alegro mucho de tenerla. Es como mi hermana y siempre me ha apoyado en todo.

 Pero, a pesar de todos esos años de amistad y del lazo que nos une, no le he contado lo del beso con Nick. No porque no confíe en ella, si no porque tengo intención de guardarlo para mí, como un pequeño secreto. Aún no estoy segura de que no fuera un sueño, pero es increíble, y a la vez tan personal...

 Cierro los ojos y recuerdo esos pocos segundos en los que nuestros labios se juntaron. Sabía bien a pesar de estar bebiendo cerveza, y su roce...Increíble.

 Cuando vuelvo a mirar por la ventanilla, veo que el autobús se ha detenido en la parada del instituto. Veo a Phoebe en un banco, haciéndome señas muy contenta, y veo también una marabunta de gente entrando en el edificio. Y la vida...supongo, es así. Cosas buenas y malas.

 Pienso en el beso y consigo levantarme y dar unos cuantos pasos fuera. Pienso en el beso y consigo hacer como si escuchara a mi amiga. Pienso en el beso durante las interminables clases, cada vez más y más lentas.

 Mi instituto no es nada fuera de lo común. La gente es, en general, amable, y aunque las clases sociales se notan al instante, no se hace hincapié en ellas...al menos, no mucho. Yo suelo pasar e ir con Phoebe a todos lados. Soy demasiado tímida para relacionarme con nadie.

Keep her safe (Nick Robinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora