La tercera vez ocurre en la biblioteca.
Yo estaba aburrida, comiendo una manzana mientras releía "La dama del alba" para un comentario de texto que tenía que hacer la semana siguiente. Todo estaba muy tranquilo, pero a ver, qué te esperabas. Es la biblioteca de un instituto. No hay ni un alma.
Bueno, tanto como ni un alma...
Oigo un golpe detrás de mí, y cuando me doy la vuelta, veo a Nick tirado en el suelo. La muleta está en el suelo, y es evidente que se ha caído por culpa de ella.
-Mierda...-masculla él, y no puede evitar tocarse la cabeza.
Yo me río y Nick alza la mirada, algo sonrojado.
-Ha sido por la puta muleta-dice señalándola con mala cara.-Joder, tío, yo que quería sorprenderte...
Me levanto y de un salto estoy a su lado en el suelo.
-Créeme-le susurro.-Me has sorprendido.
Nick sonríe, aliviado, y por fin me besa. Nos pasamos así todo el recreo, y casi me pierdo la siguiente clase, pero es que es muy difícil decirle no a Nick Robinson, y aún más cuando no para de besarte el cuello.
La cuarta vez es al día siguiente, a la salida de clases, donde Nick me espera para llevarme a casa. Aunque digamos que no fuimos a casa directamente, si no que nos quedamos un rato en el aparcamiento.
La quinta vez fue en el baño del instituto.
La sexta vez...
Llevamos así más de un mes, buscando excusas para besarnos continuamente. Hace tiempo que rechacé mi parte racional al acceder a todo esto de forma involuntaria. No sé qué somos, pero sé que me encanta la manera en que mis labios se acoplan a los suyos. No sé si debería decirlo, así que lo he callado, incluso a Phoebe, pero sé que me encanta ver cómo su pecho sube y baja después de besarnos. No tengo ni idea de qué piensa él, pero sé que no estoy lista para perder esto, no después de haberlo ansiado por tanto tiempo.
Cuando bajo las escaleras de dos en dos para desayunar, me encuentro a mi hermano en calzoncillos, comiendo cereales tranquilamente.
-Ponte algo, hermano-me quejo al pasar por delante de él para coger un zumo de la nevera.-Das asco.
-Oh, vamos, estoy muy bueno, Ci-dice mi hermano, guiñándome un ojo.-Lo que no se luce, se pudre.
Intento no vomitarle encima o reírme en su cara.
-Podrás estar todo lo bueno que quieras, pero si no te das prisa, no creo que tus abdominales te lleven volando al instituto-me burlo, aunque hay cierta envidia en mis palabras.
Mi hermano se va en el coche con Nick, aunque yo no, para no crear sospechas. Es injusto, pero me lo callo y me aguanto.
-Ah, no, hoy Nick va al médico a ver lo de la muleta, así que me voy contigo, hermana-dice Rugge, y deja el plato en el fregadero. A continuación, me revuelve el pelo y añade:-Así que sé buena, y espérame para que pueda vestirme.
Me quedo algo decepcionada porque Nick no vaya hoy. Es una mierda, porque no podré verlo ni besarlo. Últimamente, es como mi droga, no sé cómo explicarlo. Cuanto más lo pruebo, más quiero. Y sé que esta explicación es un cliché, pero de verdad que es así como me siento.
Así que empiezo el día con un hermano semi desnudo y sin la posibilidad de ver a Nick. Genial, ¿no?
Las clases pasan lentas, muuuuy lentas, y parece que el recreo no vaya a llegar nunca. Me desespero cada vez que miro el reloj y sólo ha pasado un minuto. ¡Joder!
ESTÁS LEYENDO
Keep her safe (Nick Robinson)
Fanfiction"Nunca terminas de asumir que no puedes mantener a todo el mundo a salvo, ¿no, Nick?" "Con mantenerte a ti es más que suficiente".