DIAMANTE (remastered)

CAPÍTULO 8-PARTE 2

El momento en que empecé a atar cabos y me di cuenta de que era muy probable que Mr Bernhard, el mayordomo, fuera de mi familia, probablemente mi sobrino, fue muy extraño. Sorprendentemente, en lugar de ponerme a hablar sin parar, en quedé callada, y luego fruncía la nariz y seguí caminando hacia el interior de la casa. No estaba segura de si Lucy se había dado cuenta, ni siquiera de si era posible que la relación fuera verdad. Bernhard es un apellido más o menos común, al fin y al cabo, y yo aún no tenía hermanos. Bueno, al menos en 1912, después ni idea.

Claro, cuando diez minutos más tarde, ante la mesa del té, Lucy y Paul empezaron a actuar raro, antes de anunciarme que iba a tener un hermanito, la información pasó a ser demasiada y, ya sí, empecé a hablar como metralleta.

Paul empezó tirando el té sobre le mesa, y la doncella apareció ara limpiarlo. Lucy le fulminó con la mirada, y luego carraspeó.

-Bueno, ¿hay alguna novedad?

Gideon y yo habíamos acordado en esperar a tener una fotocopia de los documentos para darles antes de contarles nada más. Ellos también se merecían un par de días de descanso. Era incapaz de imaginarme dos años con la tensión que estábamos sufriendo, y era lo que ellos habìan vivido: cuando huyeron a 1912 yo apenas tenía una semana, y llevaban bastante tiempo tratando de vencer al conde y a los Vigilantes desde la sombra, intentando recabar la mayor cantidad de información posible. Así que ellos apenas habían tenido dos meses de descanso entre mi nacimiento y mi primer viaje.

-No-dijimos al unísono.-Aunque no parecen creernos demasiado, ayer tuvimos un par de reuniones más y las caras de incredulidad y escepticismo son muy abundantes-añadió Gideon.

-Oh.

-Desastroso. Le escribiré a mi hermano, con suerte si yo le suelto unos cuantos improperios se lo tomará un poco más en serio.

-No, él se lo toma en serio, son los demás los que no-solté dejando mi taza de té sobre la mesa. Lucy me miró sonriendo, y se le cayó la galleta que tenía en la mano.

-Oh Dios mío, que torpe estoy hoy-dijo sacudiéndose las migas del vestido.

Paul le dio un codazo, y Gideon y yo nos miramos. ¿Qué demonios les pasaba a esos dos?

-Estoo... Gwendolyn...

-Gwenny...

Ambos hablaron a la vez.

-Lucy está embarazada.

-Vas a tener un hermanito.

-O hermanita.

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La información había resultado chocante, pero claro. Ahora el asunto del mayordomo siendo parte de mi familia tenía un poco más de sentido. En cualquier caso, cuando Gideon caminaba a mi lado, aguantando mi incesante cháchara, también le vio sentido. Y me dijo que no dijera nada.

Al saltar al presente y caer sobre el sucio suelo del sótano de Temple, oí un ruidito desagradable. Similar a un chillido que ya había oído.

Mr Marley.

Me giré y, efectivamente, ahí estaba el semáforo.

Con un brazo ensangrentado que se agarraba con fuerza.

Gideon saltó a mi lado.

-Que demonios...

Por suerte fue capaz de actuar más rápidamente y de dos zancadas le agarró del hombro y le hizo una llave contra el suelo en menos de tres segundos.

-Gwen, llama a tío Falk, deprisa.
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N/A: sí, se que es corto, y que lleváis esperándolo mucho mucho mucho tiempo. Lo siento infinito. Es que estamos de vacaciones de navidad, ¡y estoy todo el día de fiesta! En realidad no: estoy todo el día durmiendo como un oso en hibernación.
Y no tengo excusa, pero bueno. Aquí os dejo este corto capítulo antes de ir a ver rogue one por tercera vez(AMO ESA PELICULA) y entrar en hibernación de nuevo. Intentaré subir algo mas mañana, de acuerdo? Besos y se os quiere demasiado. Y  FELIZ AÑO NUEVO CHICAS!!!!!!!!!