Destiny (Editando)

Capitulo 18 *Relación secreta*

– L-lo siento –susurró apenada.

– ¿Por qué te disculpas? –pregunto en voz suave mientras acariciaba su mejilla.

– Esto no estuvo bien... us... –la miro serio–. Tu estas casado.

– Ella lo entenderá –aseguro–. ¿Te arrepientes? –rozo su nariz con la de ella.

– N-no –balbuceo pues aunque sabia que estaba mal no se arrepentía–. Pero esto esta mal, Kagura te quiere y no quiero que se ponga mal por mi culpa –lo abrazo escondiendo su rostro en el pecho del peli-plata.

Sesshomaru acaricio su cabello, quería que la relación entre ellos dos fuera algo serio aunque tendrían que esperar, tenia que resolver su situación con Kagura.

– Rin –la llamo en voz baja y ella levanto un poco la mirada–. ¿Confías en mí? –ella parpadeo varias veces.

– S-sí –él suspiró, ¿por qué le era difícil hablar?

– Quiero que lo nuestro sea serio.

– ¿Qué? ¿Me estas proponiendo ser tu amante? –se alejó de él.

– No, no quiero que seas mi amante –respondió serio–. Quiero que seas algo más.

– Lo veo imposible –se cruzó de brazos, aunque su expresión parecía seria su mirada reflejaba tristeza.

– Solo espera –se acercó tomándola de la cintura–. Veré la manera en la que podamos estar juntos.

– ¿Estás bromeando? –no podía creer lo que le estaba diciendo.

– ¿Tengo cara de estar bromeando? –la sujetó con fuerza haciéndola jadear.

– Tienes razón... Tienes cara de amargado –le saco la lengua y él negó con media sonrisa–. Pero... –respiro hondo–. ¿Estas hablando en serio?

– Muy en serio –si quería que ella aceptara tendría que dejar su orgullo aun lado para poder decirle lo que pensaba–. Solo ten paciencia. ¿Qué dices?

Rin se mordió el labio nerviosa, Sesshomaru la gustaba y aunque a veces lograba disimular, en esos últimos días le era imposible pues platicaba más con él o lo esperaba a cenar cuando no llegaba temprano. Sin darse cuenta había una relación entre ellos solo que sin formalizar.

– Solo con una condición –susurró.

– Te escucho –junto su frente con la de ella.

– Que Kagura no salga mal de todo esto –lo miro suplicante.

– Será como quieras –se acercó a sus labios para volver a besarla pero no lo logro ya que Urasue toco la puerta.

– Joven Sesshomaru –lo llamo–, el joven Naraku y la señorita Moegi acaban de llegar –aviso.

– En seguida voy –dijo serio mientras observaba a Rin con gracia pues estaba toda sonrojada.

– ¿No ha visto a Rin?

– No, debe estar en su habitación.

Escucharon los pasos de la mayor alejarse, Rin se soltó del abrazo del peli-plata.

– Debo irme –camino hacia la salida.

– ¿Por qué no me dijiste que ya no eras novia de Naraku?

Ella se detuvo y lo miro de reojo.

– Porque... –suspiró–, no creí que fuera importante mencionarlo –se encogió de hombros–. Hay que irnos –comenzó a caminar de nuevo cuando sintió que él la tomaba de la muñeca y la hacía girar.