Entre Las Sombras | Stingue

SOMBRA

Sting POV'S

Tras varios minutos de camino llegamos a la ciudad, y en un sólo instante sentí que estaba perdiendo a Rogue de la peor manera que pudiera existir. Ví cómo caía al suelo, pálido ya sin respirar, e incluso ya no emanaba magia de él. Tuve la sensación de que el tiempo se detenía, ya no me importaban los demás, sólo éramos Rogue y yo.

Pero Lucy me hizo volver en sí, me sacó del shock en ese momento, tomándome de la mano izquierda y llevándome con los demás hacia un hospital, quizás. Era Natsu-san quien llevaba a Rogue en sus brazos, corriendo a una velocidad increíble, pasando entre la gente y esquivándolos de una forma sorprendente.

-Ayuda!!! nuestro amigo está herido, necesita ser atendido urgentemente!!! - gritaba Natsu-san, llamando la atención de todo el público que se encontraba allí.

-Cálmate un poco, Natsu! asustarás a los demás - escuché que le decía Lucy, regañándolo como siempre.

Pero luego mi vista se centró en Rogue, se lo llevaron de inmediato e insistí en que me dejaran estar con él, sin embargo no me permitieron pasar.

Entre tanto alboroto ni me percaté de cuánto tiempo había pasado. Me mantuve sentado en el suelo, apoyándome en la pared, intentando pensar positivo y confiándome ciegamente en que Rogue estaría bien.

-Debes estar tranquilo Sting, él saldrá de ésta - me animó Lucy, sonriéndome.

-Lo sé, Rogue es fuerte, estoy seguro de que se recuperará - le corroboré, sintiendo cómo la voz se me quebraba; dentro de poco me echaría a llorar, pero enfrente de ellos no lo haría.

Narrador POV'S

Ya casi era de madrugada, Juvia y Gray se habían ido a sus casas, prometiendo que volverían al día siguiente para ver a Rogue. Natsu y Lucy se quedaron para acompañar a Sting, no lo dejarían solo.

-Estaremos en deuda con Rogue, él protegió a Lucy de aquella sombra - le dijo Natsu, poniendo su mano derecha sobre el hombro de Sting.

-Todo pasó muy rápido, si pudiese haber hecho algo... - murmuró Lucy, sintiéndose culpable.

-No es momento de estarse lamentando por lo sucedido. Rogue siempre ha sido una buena persona que protege a los demás, y confío en que seguirá viviendo por mucho tiempo más - le dijo Sting, notándose la frustración en sus palabras.

En eso aparece el médico a cargo de Rogue, señalándole a los tres que se acercaran.

-¿Cómo está Rogue? - Sting fue el primero en preguntar.

-Tuvo mucha suerte ese muchacho, logramos devolverle la vida y nos costó demasiado; ahora está estable, aunque no podrá usar magia durante unas dos semanas por lo menos - les informó el médico, con serenidad.

-No pudieron tomarle pruebas de sangre para analizar el componente de la sombra que lo atacó? - le preguntó Natsu.

-Hicimos eso apenas lo trajeron aquí, pero no tuvimos resultados concretos, la magia de esa sombra es desconocida por ahora - le respondió el hombre.

-Puedo ir a ver a Rogue? - le preguntó Sting.

-Claro, pero procure no despertarlo, ya que debe descansar - le ordenó el médico, guiándolo hacia la sala en la que se encontraba el susodicho.

Lucy y Natsu veían cómo se alejaba Sting junto al médico, por lo que aprovecharon de hablar ahora que el rubio no estaba ahí.

-Supiste algo mientras estuviste con Sting en la misión? - indagó Lucy.

-Intenté hablarle de él disimuladamente, pero no dió señales de que le importase mucho, también...aunque Rogue se fuera de su lado no supo qué responder, de verdad es raro - le dijo Natsu.

-Está bien, luego aclararemos eso, por ahora esperemos a que Rogue se ponga mejor - le dijo Lucy, sonriendo.

-Aye! - exclamó Natsu.

Sting entró en la habitación, mirando a Rogue detenidamente. Estaba con todo su abdomen vendado, la palidez en su piel ya había desaparecido, y ahora dormía plácidamente sobre la camilla.

"¿No te daría miedo perderlo algún día?"  aquella pregunta resonaba más fuerte en la mente de Sting luego de ver cómo se encontraba Rogue. Se sentía fatal al no haber protegido a su compañero, mejor amigo y hermano. Se sentó en una silla que había al lado de la cama, contemplando cómo dormía Rogue.

-Perdóname por no haber estado allí, Rogue - le susurró Sting, casi como un lamento.

-Sting... - murmuró Rogue entre sueños.

El ojiazul quedó sorprendido al escuchar su nombre, aún sabiendo que estaba dormido. "Me habrá escuchado?" se preguntaba él en su mente, y al ver que Rogue se estaba inquietando un poco, le tomó la mano derecha para tranquilizarlo.

De repente Rogue comenzó a abrir los ojos lentamente, e inspeccionó el lugar hasta encontrarse con la mirada preocupada de Sting. Incluso en su estado tan deplorable Rogue se sonrojó, sintiendo cómo el ardor subía hacia sus mejillas.

-Por fin despertaste, me tenías jodidamente preocupado! - le hizo saber Sting, emocionado.

-No creí que sobreviviría...cuánto tiempo llevo dormido? - le dijo Rogue, algo confundido.

-Desde ayer en la tarde hasta hoy, ya casi son las seis de la mañana - le dijo Sting, riéndose.

-Las seis de la mañana?! Sting...estuviste todas estas horas aquí? al menos has dormido algo? - le preguntaba Rogue, asombrado.

-Primero que nada, cálmate; segundo, cómo podría dormir sabiendo que tu vida corría peligro? no seas idiota! eres como mi hermano Rogue, si te perdiera me quedaría solo...y no quiero eso - le dijo Sting, bajando la vista.

Rogue reaccionó ante esto último; "hermano?" se preguntó él, un poco decepcionado. Aunque bueno, era de esperarse. Sting jamás aceptaría sus sentimientos, ya que no eran iguales, aún si fuesen llamados "Los Dragones Gemelos de Sabertooth."

-Por cierto, no pudimos obtener alguna información sobre la sombra que te atacó - le informó Sting.

-No importa, yo mismo descubriré qué era esa sombra y cuál era su objetivo, además... - le decía Rogue, pero hizo una pausa.

-Hay algo más, no? - le preguntó Sting.

-...el aroma que desprendía esa sombra me era conocido, ya fuera una persona o una simple sombra; siento que ya nos hemos visto antes o ha estado cerca de nosotros - le dijo Rogue con seguridad.

-Te es conocido, eh? también su ataque no te dió tiempo de actuar, sólo te limitaste a proteger a Lucy - le dijo Sting.

-Me dijiste que la protegiera, no? deduzco que ella igual te ha de importar mucho - le dijo Rogue, con un deje de recelo que no logró pasar desapercibido ante los oídos de Sting.

-Estás queriendo insinuar algo, no es así? - le preguntó Sting, empezando a molestarse.

-Para nada, sólo estoy opinando - le respondió Rogue, sin mirarlo.

-Te dejaré descansar, no te esfuerces demasiado - le dijo Sting, dirigiéndose hacia la puerta.

-Lo sé - le dijo Rogue, cerrando los ojos. "No te vayas...quédate un poco más, porfavor."

-Y, Rogue...no pienses cosas que no son - dicho esto Sting se fue, cerrando la puerta tras de sí.

Rogue sentía un enorme vacío en su pecho, viendo que Sting se alejaba cada vez más de él. Detestaba esta situación...quizás si le confesaba sus sentimientos se aclararían muchas cosas y todo estaría mejor, pero aquel sueño se lo impedía, era todo muy confuso; decidió volver a dormir sin saber qué hacer.