YO SÉ QUE ESE NO ERES TÚ

431 40 0
                                    

Rogue POV'S

Sin duda no pude dormir nada ayer. Me sentía algo mareado al despertarme, pensé que era por el simple hecho de no haber dormido bien. Me duché y me vestí, ignorando por completo aquel mareo que cada vez más iba en aumento. No entendía lo que me estaba pasando, incluso Frosch me encontraba un poco pálido.

-Rogue, estás enfermo? te noto algo pálido - me preguntó Frosch, mirándome preocupado.

-Estoy bien, sólo me siento un poco mareado - le respondí; a quién quería engañar? el mareo me tenía bastante mal.

Solamente ante Frosch podía fingir que me sentía bien, ya que era algo despistado. A veces me sentía culpable por "abusar" de su confianza, estaba consciente de que eso no estaba bien. Pero ante una cierta persona ya no podía mentirle sobre mi bienestar y estado de salud...sí, ya todos sabemos sobre quién hablo...si Sting me ve así, no dejará de interrogarme hasta sacarme la verdad.

"Tengo que salir de aquí antes de que Sting aparezca" pensaba algo agitado, mirando hacia todos lados con la esperanza de que no anduviera cerca.

El mareo no parecía cesar, empecé a sentir frío y calor al mismo tiempo...algo me está pasando y estoy seguro de que no es bueno.

Salí corriendo del gremio, llamando la atención de los que se encontraban allí presentes, incluyendo a Frosch, aunque al menos éste no me había seguido.

Ya encontrándome lo bastante lejos del gremio, empecé a desorientarme poco a poco. La vista se me comenzaba a hacer borrosa, las voces se transformaban en ecos y para peor...oí una voz familiar a mis espaldas.

-Rogue? - preguntó aquella voz.

Mierda.

Me voltée con la esperanza de que la persona que estuviera atrás mío no fuera él. Pero como mi suerte no es la mejor de todas...

-Sting... - murmuré tembloroso, dos de mis cinco sentidos ya se habían esfumado.

-Sucede algo? - me pregunta acercándose a mí, pero yo retrocedo bruscamente.

-No te acerques! - exclamé, dejándolo sorprendido.

-Estás pálido... - se limitó a decir, su voz detonaba tristeza, y aún en mi estado me sentí mal por ello.

-Disculpa, Sting...tengo cosas que hacer ahora, debo irme - le digo, dándole la espalda; de pronto una risa escalofríante irrumpe en mís oídos.

-Esta es la oportunidad, Rogue...hazle pagar por el daño que te provocó, ya que aún no lo has perdonado, verdad? - al escuchar hablar a la sombra comprendí al instante que ella estaba haciéndome sentir así.

Sting todavía seguía observándome, con expresión de estar esperando alguna respuesta por parte mía, pero ya se la había dado...por qué diablos no se iba?!

-No te dejaré solo, Rogue, algo extraño te pasa, así que porfavor dime, que tienes? - me insistía él, no podía seguir cerca suyo, sino...

En eso observo mis brazos, en ellos empiezan a distinguirse unas marcas negras, las mismas que aparecieron cuando luché contra Gajeel...."no puede ser...tengo que irme de aquí" y dicho esto, echo a correr rápidamente hacia alguna zona lejos de la civilización; si la sombra lograba controlarme, no podía tener a ninguna persona cerca de mí.

Me detuve al lado de un árbol después de haber corrido por varios minutos. No sé cómo pude moverme cuando empezaba a perder el control de mi cuerpo a cada segundo.

-Vayas a donde vayas no escaparás de mí - me murmuró la sombra, luego apareció bajo mis pies, sonriéndome.

-Me prometí a mí mismo que no me dejaría llevar por ti y mucho menos que te apoderaras de mi cuerpo, no mientras Sting se mantuviera a mi lado! - exclamé con impotencia, sintiendo cómo mis piernas flaqueaban, ya no tenía control sobre ellas.

-Jajajaja porfavor! no me vengas con esas cursilerías, tú a mí me necesitas, por qué no lo admites de una buena vez? - y ahora su voz se escuchaba como pequeñas vibraciones en mi cabeza.

-Por qué debería admitir una mentira? no seas ridículo y ya déjame en paz! - le dije  enfurecido, sosteniendo mi cabeza con ambas manos.

-Con que era eso... - un murmuro me hace abrir mis ojos, aturdido.

No puede ser.

-Sting, déjame solo, no te acerques a mí! - le rogaba mientras sentía que la sombra junto a su oscuridad inundaban mi cuerpo, ya sea por dentro y por fuera.

-Eliminaré a esa sombra como sea, pero no permitiré que siga torturándote de esta forma, no quiero verte sufrir! - exclamó Sting. Entré en pánico al ver que no se iba.

-Ya no puedo...Sting...porfavor.... - mi voz apenas era audible, pero sé que me escuchó, ya que la expresión en su rostro era de total seriedad.

"Perderé la conciencia en cualquier momento...no quiero lastimar a Sting, si no se va ahora...tengo miedo de lo que le pueda hacer...ya no hay remedio...voy a..." al final no pude seguir pensando en nada más, la mente se me nubló, tanto mi cuerpo como mi corazón se tiñeron de oscuridad; caí rendido al suelo, seguramente ahora...no sería el Rogue de siempre...Sting...espero puedas perdonarme...no soy tan fuerte como creías...

Luego de caer al suelo sentí una fuerte explosión a mi alrededor, después de eso desaparecí, para que esa maldita sombra tomara posesión de mi cuerpo.

-No importa cómo o de que forma, pero...te sacaré como sea esa cosa de tu interior, sin arriesgar ni tu vida ni tus recuerdos, Rogue - esa fue la última vez que oí la voz de Sting, tan seguro y decidido...

Confío en ti, y siempre lo he hecho.

Entre Las Sombras | StingueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora