UNA NOCHE ESPECIAL

506 42 11
                                    

Narrador POV'S

Era un nuevo amanecer en la ciudad de
"Crocus", Rogue ya se había despertado, y al momento de ducharse, se sintió algo incómodo, y más que nada por tener que usar un baño ajeno.

Luego de unos minutos terminó de ducharse, se puso una toalla alrededor de la cintura, viendo que el desayuno se lo habían dejado sobre una mesa que estaba al lado de la puerta. Se sorprendió un poco por tanta atención, pero bueno, sólo sería una vez en la vida.

Después de comer se lavó y se arregló, se colocó su típica vestimenta, se peinó y salió de su habitación. "Iré a ver si Sting ya despertó" se dijo Rogue, aún era temprano, por lo que pensó que lo encontraría durmiendo todavía.

Primero que nada, cometió el peor error de su vida: no haber tocado la puerta antes de entrar. Al estar dentro del cuarto quedó hecho piedra. Sus mejillas comenzaron a arder, se sentía totalmente avergonzado. Sting acababa de ducharse y venía saliendo del baño, pero no muy presentable...Rogue no fue capaz de moverse siquiera, ya que frente a sus ojos se encontraba un Sting completamente desnudo.

Hubo un breve silencio entre los dos, hasta que Sting, hecho una furia, sacó de una sola patada a Rogue del cuarto.

-Toca la puerta antes de entrar, maldito pervertido!!! - le gritó Sting, cerrando la puerta de un golpe.

Rogue yacía desconcertado en el suelo, sonrojado a más no poder; empezó a sentir un leve calor en todo su cuerpo y estaba seguro de una cosa...jamás olvidaría la imagen de Sting desnudo enfrente suyo.

Se reincorporó, el ardor en su rostro aún no se iba, no sabía cómo reaccionar
ya que, quizás, sus sentimientos por él hayan aumentado al verlo así.

-Maldición...esto no tuvo que pasar - se dijo Rogue, dirigiéndose al salón principal.

Dieron las doce del día, todos habían quedado de verse con la princesa en el lugar ya mencionado. Rogue ya estaba allí, y se ruborizó un poco al ver a Sting bajar por las escaleras. Iba con un traje más anticuado que de costumbre, pero con su apariencia le venía bien.

Yukino iba con un vestido blanco que le llegaba un poco más arriba de las rodillas, y sobre sus hombros tenía puesto un abrigo de plumas blancas y azules.

-Buenos días chicos, espero que hayan dormido bien - les saludó la princesa Hisui, cortésmente.

-Buenos días, princesa! - exclamaron los tres al unísono.

-Su trabajo comenzará a partir de las 18:00 p.m., ya que a esa hora empezarán a llegar los invitados; al momento en que ya lleguen todos, ustedes tres se quedarán a mi lado, vigilando a cada una de las personas que más tarde se encuentren en esta sala, entendido? - les ordenó la princesa.

-Entendido - respondieron los tres.

Minutos después, Sting y Yukino paseaban por los jardines, ya que la princesa les sugirió que dieran una pequeña vuelta por los alrededores.

Mientras que Rogue, estaba afuera de la entrada principal del castillo, cabizbajo, pensando en lo sucedido. Muchas emociones habían sido removidas en su interior.

-Sting... - murmuró Rogue, soltando un largo suspiro. Le molestaba que estuviera con Yukino en estos momentos.







(En los jardines del castillo)

-Cómo van las cosas con la señorita Ultear, Sting-sama? - le preguntó Yukino.

-Vamos bien, cada día que pasa la voy queriendo más - le respondió Sting, sonriendo.

Entre Las Sombras | StingueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora