CAPÍTULO 33: EN VERDAD FUE POR AMOR?

435 34 0
                                    

Sting POV'S

Dicho esto último no pude evitar sonrojarme, y lo peor era que ya no podía dar marcha atrás. Rogue me miraba impaciente y confuso, conocía perfectamente esa mirada suya.

-Qué estás queriendo decirme? - me preguntó sin rodeos; sentía miedo, ya que luego de que le contara todo, sin duda se alejaría de mí.

-Sólo la verdad - tragué pesado, pero decidido.

-La...verdad? - empezó a balbucear; lo miré divertido para intentar "relajar" un poco el ambiente.

-Así es! ahora entenderás el por qué de mis comportamientos extraños hacia ti, y si decides alejarte de mí después de saberlo todo... lo comprenderé - le respondí, pudiendo ver cómo se tensó ante mi respuesta.

Rogue asintió. Respiré hondo, imaginé miles de cosas que podrían suceder luego de esto, pero no me dejé llevar por el miedo, ya que debía acabar con su sufrimiento.

-Cuando éramos pequeños poco a poco comencé a considerarte como mi mejor amigo, por el simple hecho de que me hacías reír y me divertía mucho estando contigo; el tiempo avanzó, empezamos a crecer, y debido a que siempre estabas ahí apoyándome, haciéndome sentir mejor cuando estaba triste...fue ahí cuando te comencé a ver como mi hermano...pero no pensé que...al pasar los meses pasarías a ser la persona que sólo quería tener para mí, la persona a la cual no quería compartir con nadie. Véelo de la forma que quieras, pero en ese entonces bien claro tenía que yo sin darme cuenta me había enamorado de ti y a pesar de eso...decidí guardar silencio, ya que sería estúpido que alguien como yo...que sólo era tu amigo...se hubiese podido enamorar de una persona tan buena como tú - le dije, y desvié la mirada, aunque deseaba ver con todas mis fuerzas la expresión que podía tener Rogue ahora mismo.

Pero al girarme en dirección hacia él me quedé sorprendido al ver que me había dado la espalda, tenía la mirada hacia la ventana.

- Y como decía...me quedé callado durante mucho tiempo, por miedo a que si te confesaba todo me rechazarías. Decidí seguir comportándome como el amigo normal que tú conociste en un principio y creí que podría continuar así por el resto de mi vida...pero vaya que fui un idiota...no aguanté lo suficiente, el peso de este sentimiento era insostenible, por lo que había pensado en decirte la verdad mucho antes de que dieran comienzo a los Grandes Juegos Mágicos, pero me distraje de lo más importante debido a la tan esperada pelea con Natsu-san; olvidé la decisión que había tomado...y todo quedó allí a la deriva...cuando me di cuenta de que no cumplí lo que me prometí, me sentí fatal, sentí que me fallé a mí mismo y perdí el coraje y agallas que antes tenía para enfrentarme a ti... - hice una pausa, esa sensación de auto-decepción hacia mí mismo levemente volvía a aparecer.

Rogue, por su parte, no emitía palabra alguna, pero sé que me estaba oyendo, por lo que esta vez decidí ir directo al grano.

-Pasó un tiempo. En unos meses había recuperado el valor y confianza que perdí y fue entonces que decidí confesarte todo... pero se presentó aquella misión en que fuiste atacado por esa sombra, y otra vez dejé de lado mi objetivo por miedo a perderte; cuando fui a verte para ver cómo seguías, te ví al lado de Juvia, abrazados... y nuevamente sentí que la distancia y la ilusión de que me corresponderías quedaba en el olvido, cada vez te veía más cercano a Juvia. Realmente ví que ella estaba tomando mi lugar...y no lo soporté, me topé con Ultear y como ví que ella era bonita y tenía sus "cualidades"...yo pensé de una manera egoísta...en vengarme de ti, porque creía que...me sacabas celos estando con Juvia - me arrepentí al decir esto último, me sentía una mierda de persona y ahora fue que entonces Rogue se volteó para mirarme.

-Vengarte de mí? - preguntó inexpresivo.

-Si...mi mente me jugaba malas pasadas en todo momento, más cuando te veía con ella; y en aquel instante en que estuvieron a casi nada de besarse...allí fue que exploté y creo que empeoré cuando me dijiste todo eso de Ultear. Estaba convencido de que todo lo que me decías era mentira y que sólo era para hacerme sentir mas miserable de lo que ya era... por eso fue que te borré la marca del gremio de esa forma tan dolorosa, porque sólo pensaba en mi propio sufrimiento...y la realidad era que sólo querías protegerme...tal y como lo hacías en el pasado...y aún así...me siento mal al haber utilizado a Ultear para olvidarte, para sacarte de mi cabeza; pero si no pude hacerlo cuando apenas era un niño...menos lo podría hacer ahora - las lágrimas comenzaron a brotar de mis ojos en contra de mi voluntad, pero ya no podía resistirlo. Hice cosas que estuvieron mal, me arrepentía de todo el daño que provoqué en este corto pero a la vez "largo" tiempo.

-...a veces pensaba que mi castigo era que tú me pidieras que acabase con tu vida, pero me negaba a aceptarlo, no lo iba a soportar. Acepto que me odies, que te alejaras o cualquier otra cosa, pero no que te fueras de mi lado para siempre! - grité lleno de impotencia, y al mismo tiempo rompiendo en llanto.

El silencio de Rogue me desesperaba cada vez más, ansiaba saber qué pensaba él de todo esto, qué era lo que sentía por mí ahora que ya lo sabía todo.

-Por último...cuando te dije que había conocido a Ultear, cuando te conté que nos habíamos besado...siempre esperé una reacción negativa por parte tuya...sólo quería oír todo lo contrario a lo que me decías! he ahí una razón más para hacerte todo eso; pero el alma me volvió al cuerpo cuando Juvia me hizo saber que tú estabas enamorado de mí, desde hace mucho tiempo. Y ahora, mis comportamientos hacia ti son porque me cansé de esperar, no quiero que nadie más sea lo suficientemente cercano hacia ti en excepción de mí! y perdóname...te traté como quise...cuando ni siquiera te podía tener... - luego de decir esto me tapé el rostro, ya que las lágrimas no parecían querer cesar. La pesadez en mi pecho y todo lo que guardé en estos años en mi interior había desaparecido...haberme confesado me dejó aliviado, pero ahora sólo faltaba...la opinión de él.

Tenía miedo de levantar la mirada hacia él y encontrarme con sus ojos, los cuales ahora podrían estar desprendiendo una notable rabia.

Al destaparme el rostro aún humedecido, quedé congelado al ver cómo pequeñas gotas de agua caían al suelo. Al levantar mi vista, unas visibles lágrimas provenían de Rogue, y sin dudarlo me atreví a abrazarlo. Se veía frágil, como si estuviese a punto de derrumbarse.

Sentí los temblorosos brazos de Rogue rodearme el cuello, aferrándose a mí como si su vida dependiese de ello. Sollozaba sin querer detenerse, yo sólo lo abracé con más fuerza; tenía que echar todo fuera, porque si no es ahora...cuándo?

-Sting...nunca pensé que tú...te sentías de la misma forma que yo... - murmuraba Rogue entre lágrimas, cuando bien ahora podría estar golpeándome al saber la verdad.

-Perdóname...sólo pensaba en mí...nunca me paré a ver que lo realmente importante para mí estaba justo frente a mis ojos - me lamenté, dejando escapar alguna que otra lágrima.

Duramos así unos minutos, llorando uno en los brazos del otro; cualquiera que no comprendiera estos sentimientos diría que nos vemos patéticos.

Luego, Rogue logró calmarse al igual que yo, habíamos desechado las lágrimas que desde hace un buen tiempo nos estaban ahogando.







Rogue POV'S

Cuando Sting terminó de confesarme lo que tanto tiempo se había estado guardando para sí mismo, al instante sentía ganas de golpearlo, pero mi cuerpo no respondía. A pesar de haber escuchado todo eso, no podía odiarlo si se sintió de la misma manera que yo desde que éramos niños...ni siquiera podía guardarle rencor.

No comencé a llorar por estar triste ni nada parecido...sino por alegría, de saber que la persona que amaba se sentía igual que yo, que ambos pasamos malos momentos por sentir algo tan fuerte mutuamente, por ese sentimiento que nos carcomía diariamente...por ese algo tan maravilloso y doloroso que llaman amor.

Ya se había hecho tarde, los ojos nos pesaban de tanto llorar, y aquella noche, sin dudas ni objeciones dormimos juntos; el sólo hecho de sentir la cálidez que él desprendía cuando estaba a mi lado era como estar en el cielo. Él ya se había dormido sin haberme soltado, y yo me dormí minutos después, sintiendo los latidos de su corazón.

Entre Las Sombras | StingueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora