-¿Entonces te vas el viernes después de la universidad?- Sydney preguntó confusa.
-Si, y nos pilla el puente de noviembre hasta el martes.- Respondí.
-Ya que estás en la calle, ¿podrías comprar algo para cenar?
-Claro, ¿chino o indio?
-¡Chino!- Respondió cual niña pequeña.
-No se ni para que pregunto.- Colgué y fui a por la comida antes de llegar a casa.
Mientras esperaba a que hicieran la comida estuve pensando en que hacer durante los días que estaríamos.
Podríamos visitar Virginia Beach un día, o ir a la capital del país.
Llegué a casa y cenamos.
-¿Y por qué de repente vais?
La pregunta de Sydney me caló hasta los huesos.
Dudaba si decirle la verdad o simplemente que era para avanzar en la relación.
-Ee... Emm...
La voz me temblaba demasiado como para hablar con claridad. Me puse a temblar todo, y no era capaz de tranquilizarme.
-¿Tan malo es?- Me preguntó algo preocupada.
Yo solo asentí con la cabeza.
-Si no quieres no me lo cuentes.
Nos quedamos los dos en silencio. Solo se podían oir los ruidos que hacíamos al comer.
Me aterraba el hecho de que tarde o temprano la gente lo sabría.
Sydney estaba bebiendo de su bebida.
-Inés está embarazada...
-Ehckj...- Sydney se atragantó al segundo de decirlo
Me miró con ojos amenazantes mientras terminaba de tragar.
-¿De cuanto?
Su voz tembló.
-6 semanas.- Respondí.
Se quedó callada mirando a la nada. Hacia pequeños movimientos con los labios, como si estuviera contando.
-En el cumpleaños de Tony. ¿Tu primera vez con ella y la embarazas?- Me miraba como si fuera un descuidado.
-Sí, y vamos a ir a casa de mis padres a contarles aquello...
Un golpe sobre la isla me hizo callar.
-¿Estais locos? ¿Vas a presentarles a tu nueva novia con la que llevas poco mas de un mes y les vas a decir que van a ser abuelos? Hay que tener un buen para de huevos para hacer eso.
Me lo soltó y cogió aire. Se quedó mas ancha que larga con ese comentario.
-Me alegra que me apoyes.- Dije en modo de sarcasmo.
-Óliver...
Me hizo fijarme en ella.
-Soy tu mejor amiga y te apoyo en tu misión suicida.
...
Llegó el viernes. Teníamos el equipaje ya hecho para que al llegar de la universidad nos fuéramos directamente y no perder el avión.
Llegó el taxi, y nos dirigíamos a él.
-No se como se tomaran tus padres esto, pero en cualquier caso, te echaré de menos si no vuelves.- Me dijo Sydney con su sonrisa que decía "Te vas a cagar, pero te quiero."
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La razón de Oli. [COMPLETA]
RomanceOliver Málaga es un chico de 18 años que empieza su primer año en la universidad. Es un chico español, cuyos padres tienen grandes cantidades de dinero. Se encuentra actualmente en Los Estados Unidos, en el estado de Colorado. Mientras que su famili...