ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 6

4.8K 360 12
                                    

ʜᴀᴢᴇʟ ᴛᴜᴍʙᴀ ʟᴇᴠᴇᴢǫᴜᴇ.
ᴍᴇɴsᴀᴊᴇ ᴍᴀɴᴜᴀʟ.

Ⓝⓐⓡⓡⓐ Ⓝⓞⓥⓐ.

Llegamos a la mesa de Hades, ví a Ray con un chico rubio y una chica muy bonita también rubia.

—¿Ray es tu novio?—Dijo Nico sorprendiendo me

—Claro que no, tonto, es como mi hermano mayor—le respondí

El asintió, pidió una cajita feliz y lo mire confundida.

—¿Que?.

—¿Una cajita feliz?—Sonreí divertida.

Se encogió de hombros y fue a quemar su comida, lo seguí después de pedir la mía, ví a Hazel que venía con Frank, cuando me vio, sus ojos color oro tomaron un brillo especial.

Pasó directamente hacia la mesa, Nico y yo caminamos de regreso, empezamos a comer, Hazel llegó y me dijo.

—Vaya que gran día ¿no?—vio a su hermano.

Nico solo se encogió de hombros, me miro a mi y asentí.

—¿Algo que me quieran contar?.—nos sonrió.

—Si, come o se va a enfriar—sonreí.

Pareció algo molesta con mi respuesta y reí.

—¿Que hicieron hace rato?—Dijo dándome codazos.

—Entrenar, leer...¿Por que tan interesada?

—¿Y tu Nico?—Dijo ignorando mi pregunta.

—Entrenar—dijo viendo a su hermana.

—Mhm, ¿Nova, cómo va tu reputación?—Dijo sonriendo llevándose una cuchara de comida a la boca.

Entendí, casi me ahogó cuando lo dijo. La vi a con los ojos como platos.

—N...Nos es...Escuchaste—dije tosiendo.

—Oh, claro que lo hice—sonrió con dirección a su hermano.

—Lo viste todo, ¿no es cierto?—Dijo tranquilo.

—No era mi intención, pero cuando iba a entrar oí música y ví por la ventana—sonrió inocente.

Nico solo suspiro.

—Por favor no digas nada—le pedí.

—Tranquila, nadie te ha dicho que soy Hazel Tumba Levesque—sonrió en mi dirección.

Reí un poco, Nico solo la vio divertido, tal vez sea los niños del Inframundo pero son tan normal como todos.

Cuando acabamos la comida, fui con Ray, quien estaba abrazando a una chica rubia, la misma chica rubia que le llamo la atención.

—Ray, hermano hablemos—dije llegando a su mesa.

Todo mundo se había quedado mudo a oír la palabra hermano.

—Claro que sí. Hermanita—dijo.

Dejo de abrazar a la chica que me miraba mal, pero sonrió con burla y me dijo.

—Te apuesto que te teñiste por falta de atención.

—Te apuesto a que te óperas te para no ser los 100 metros planos—le devolví la sonrisa burlona.

Ella tapó su escote, me vio mal y se fue a regañadientes.

—Buena esa hija de Hades—dijo un chico sonriéndome coqueto.

Diferentes Culturas, Mismo Amor (Nico di Angelo y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora