Camille. |h.s|

29.

—¡Muévete! —Me empuja un oficial, y me cierra la reja en la cara—

—No tuve nada que ver con ese accidente ¡Por Dios! Camille es mi esposa, no le haría daño

El oficial me mira y sonríe, se que mi declaración no vale mucho ahora, pero debo salir de aquí.

—Estarás aquí hasta que ella diga lo contrario. —Da media vuelta y se va, dejándome completamente solo—

No puedo pensar en nada más que en Camille, no puedo creer lo que acaba de pasar; Verla en aquella camilla me dejó completamente en Shock.

Sería incapaz de asesinarla, pero me siento demasiado culpable, si tan solo hubiese llegado con ella a tiempo; Nada de esto hubiese pasado.

Quiero saber cómo está, pero encerrado en este lugar no podré. Pasar la noche aquí no fue nada nuevo para mí, pero en estos momentos estoy completamente desesperado. Hershel llega hoy, o seguramente ya debe estar aquí; Tomando en cuenta que es más de medio día. No me imagino como va a reaccionar cuando se entere que Camille tuvo un accidente.

(...)

*Narra Camille*

Puedo sentir el peso de mis ojos, pero poco a poco los abro. Al principio todo es borroso pero logro ver con normalidad al pasar de los segundos. Trato de moverme y ponerme de pie, pero un dolor enorme en mi abdomen no me lo permite, tomando en cuenta que mi rodilla está enyesada. ¿Qué pasó? ¿Dónde está Harry?

Todo viene a mi memoria; capítulo tras capítulo, mis ojos comienzan a cristalizarse y mis lágrimas salen sin parar.

Miro a un costado y está un pequeño timbre; Trato de alcanzarlo pero me cuesta demasiado, tomo un suspiro profundo y logro tomarlo. Lo presiono y a los pocos segundos visualizo entrar al doctor, detrás de él está mi madre y mi tío.

—Cariño, ¿cómo estás? ¿Cómo te sientes? —Dice preocupada mi madre—

—¿Dónde está Harry? —Es lo primero que viene a mi mente, y al único que necesito—

—Hija, tranquilízate. No quiero presionarte ahora, pero, ¿recuerdas qué pasó ayer?

—No fue Harry si es lo que tratas de decir madre. —La miro algo indignada y ella enseguida mira a Hershel—

Mi tío asiente y manda un texto enseguida. Es indignante que crea eso de Harry, él no sería capaz de tratar de asesinarme, mucho menos a su hijo...

—¿Dónde está Harry? Lo necesitamos, su hijo y yo lo necesitamos.

Todos se miran entre sí, y lo único que ocasionan es que me altere, ¿Qué es lo qué pasa?

Cuando está por hablar mi madre mi tío la detiene y él empieza a hablar.

—Harry vendrá enseguida cariño, descuida.

Asiento y seco las pocas lágrimas en mi rostro. Empiezo a tocar mi vientre, pronto llegará Harry y saldremos de aquí, para irnos a casa todos.

(...)

*Narra Harry*

Escucho pasos acercándose a mí, por lo que le doy una última calada a mi cigarrillo y lo dejo caer, pisado sobre él. Me pongo de pie y estoy atento a lo que pasa.

El oficial empieza a abrir la reja y se hace a un lado.

—Puedes salir, estas libre de culpa. He hablado con Hershel; Aún siguen en el hospital, debes ir de inmediato.