Prólogo;

11.9K 812 480
                                    

-Jamás en mi vida había conocido alguien como él-Confesé, mientras me acomodaba mejor en mi asiento-Con una personalidad tan adictiva, y una oscuridad tan atrayente. Él era un misterio, y lo supe desde el primer instante.

Me acerqué unos centímetros hacia la pequeña mesa junto a mi, estiré uno de mis brazos y alcancé un vaso de agua, me apresuré a beberlo para así continuar con mi relato.

-Era peligroso y temerario, y eso hacía que me gustase cada vez más y más-Solté jugueteando con los dedos de mis manos-Era muy convincente, hacía y decía cualquier cosa con tal de salirse con la suya y obtener lo que deseaba. Y en ese momento, yo era lo único que se encontraba en su radar.

La voz se me comenzaba a quebrar y por mi cuerpo recorría un escalofrío. Llevaba tiempo sin hablar de él, sin siquiera mencionarlo, pero jamás había dejado de pensarlo.

-Siempre supo como hacer sentir mal a una persona, ya sea con palabras o con una simple mirada-Mi labio comenzó a temblar-Podía pasar horas pensando en cómo destrozar la vida de alguien-Suspiré pesadamente-Riguroso, las cosas debían de estar donde decía, cómo quería y cuando así lo deseaba. Detestaba el desorden, lo cual es gracioso porque su vida era un desastre-Medio sonreí-Impredecible como el fuego, de repente sólo estaba caliente, luego quemaba y si no se controlaba lo incendiaba todo.

Muchos recuerdos se atravesaban por mi cabeza mientras lo describía, cada momento que pasamos juntos, cada aventura y cada problema en el cual nos veíamos envueltos. De repente, no me molestaba admitir que hasta lo extrañaba.

-No solo odiaba las rutinas sino que siempre andaba pensando en cómo escapar a ellas, y por eso siempre se veía envuelto en un nuevo embrollo-Informé-Era libre, independiente, atrevido, enérgico, intelectual, cambiante, nervioso, ingenioso, juvenil, divertido y nada parecía importarle en lo absoluto-Aseguré-Su nombre y la palabra paciencia no podían ubicarse dentro de la misma oración, jamás-Un nudo comenzaba a formarse en mi garganta-Pero en cuanto a ingenio, muy pocos podían competir con él, y quiénes lo hacían jamás tenían la oportunidad de vencerlo dos veces.

De repente una gran sensación de vacío se había apoderado de mí. Tal vez era nostalgia o quizás ansiedad, a pesar de ser dos sensaciones completamente diferentes, con frecuencia ambas hacían de mi una persona inestable.

-Frío como una roca, a la hora de mostrar sus emociones era completamente honesto-O eso creía-Pensé que como me quería, debía ser quien deseaba, esa persona sin miedo a nada, con ganas de todo al mismo tiempo. Alguien completamente loco, como él.

Y mis sentimientos habían cambiado, otra vez. Ya no era nostalgia, tampoco ansiedad, un profundo odio reinaba en mi corazón, el mismo odio con el cual había cargado durante todo este tiempo. Y al escuchar su nombre ya no lloraba, solo deseaba que pagara por sus acciones.

-De repente, por ser quien el quería, terminé por perderme a mi misma. Me transformé en el ser que él más odiaba, en una copia de si mismo-Tragué el nudo de mi garganta-Si, éramos él y yo contra el mundo. Pero siempre había sido como si solo se tratase de él, todo era siempre sobre él. Comencé a pensar que tenía una doble vida, y así fue.

Entonces la nostalgia, la ansiedad y el odio se combinaron con el dolor, ese dolor que había sentido durante meses, cada noche y todos los días desde aquella vez.

-Es un monstruo, un saco de mentiras. La peor de mis pesadillas, una de la que lamentablemente no pude despertar hasta que fue demasiado tarde.

Por primer vez durante todo mi relato, levanté la mirada del suelo y fijé mis ojos en los de aquella mujer sentada justo enfrente de mi. Junto a ella, una cámara apuntaba fijo y directo a mi rostro, y grababa cada uno de mis gestos y palabras.
Al notar que había concluido con mi historia, habló por primera vez durante toda la sesión.

-Bien, Margot. No debería, pero me tomaré el atrevimiento de informarte que de acuerdo a la descripción física que le has brindado a la policía un tiempo atrás, han encontrado un sujeto que cumple con todas y cada una de las características descritas por ti.

Sentí mi corazón latir rápidamente, y las palabras salían atropelladas de mi boca al preguntar de quien se trataba. Si lo habían encontrado, lo único que podía pensar era en que no quería verlo otra vez, nunca más durante el resto de mi vida.

-El sujeto ya ha dado su declaración a la policía-Informa-Su nombre es Harry Styles, y vive en Holmes Chappel, Cheshire. Asegura jamás haber pisado Londres, y no hay registros de su actividad fuera del pueblo en toda su vida.

-Harry Styles... No, no, no.

-¿No creés que este muchacho pueda ser de quién hablas?-Preguntó.

-En lo absoluto, no lo es. Deberían dejarlo ir.

La doctora Marshall asiente con su cabeza repetidas veces y anota algo en su cuaderno.

-La policía lo ha dejado libre tras tomar su declaración. Nada de lo que cuentas tiene relación alguna con su persona, y se lo considera inocente.

-Por supuesto-Aseguré.

Un silencio se apoderó de la sala y lo único que podía oír eran los latidos de mi corazón que amenazaba con escapar de mi pecho.

-Señorita Muttone, no quiero ofenderla pero me veo obligada a preguntárselo sin rodeos ¿Usted está completamente segura que esta persona de la cuál habla con llamativa ambigüedad, es real?

-Doctora, lo único que sé con seguridad es qué esa persona es real, y arruinó mi vida por completo.

Dicho eso, la mujer se puso de pie, tomó todas sus cosas y tras despedirse de mí y programar otra sesión, se marchó. Y yo pasé otra noche completamente sola en aquel frío y espantoso lugar.

FOUND | H.S |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora