DESPUÉS - XXIX ; What Lovers Do.

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What Lovers Do se reproducía en el estéreo de mi auto. Aquella canción me recordaba a Margot, todas las canciones me recordaban a Margot.

La extrañaba, maldita sea. Pero debía continuar con mi vida, me había encargado de ser un jodido hijo de puta. La había dañado de una manera irreversible, y tenía más que claro que las cosas no volverían a ser lo que alguna vez fueron, por el simple hecho de que jamás fue real.

O tal vez sí.

Tal vez jamás me di cuenta de lo mucho que había anhelado besar sus labios en el pasado, tal vez jamás noté que aquellas caricias a su rostro no eran forzadas, tal vez jamás quise aceptar que aquellas madrugadas de largas charlas me encantaban, o el sentir su cuerpo junto al mío me enloquecía.

Tal vez jamás quise aceptar que nunca había amado a nadie como lo había hecho con Margot desde el primer maldito día en que la vi.

Tal vez por fin comprendía que lo mío con Kara era una enfermiza obsesión, había dejado que controlará mi accionar y que me arrastrarse con ella hasta lo más profundo del infierno.

Kara sabía a la perfección como manipular, como mantenerme atado a su accionar y sus deseos. Era increíblemente buena en lo que hacía, aunque penosamente no hacía nada bueno.

El aceptar el hecho de que había amado a Margot desde el primer momento me hacía sentir una persona diferente, no podía explicar como. Pero aquello que sentía por ella me hacía desear ser alguien bueno.

Porque eso es lo que sucede al encontrar a la persona indicada, el verdadero amor nos envuelve de tal manera que deseamos el bien y hacer el bien.

Y el amor que sentía hacia Margot había logrado que hiciera algo impensado, pero irremediablemente bueno.

-¿H-hola?-Hablé nervioso tras escuchar su preciosa voz del otro lado de la línea.

-Hola, ¿Quién habla allí?-Preguntó.

-Soy Harry, mamá-Respondí temblando, mientras conducía por las demasiado transitadas calles de Londres.

-¡¿Harry?!-Exclamó sorprendida-¡Mi Dios, Gemma es tu hermano!

-¿Bromeas?-Escuché la escandalosa voz de Gemma.

-Mi pequeño-Sollozó-No te imaginas lo mucho que te extrañamos.

Me mantuve en silencio.

-Harry cariño, debemos hablar en persona. Por favor-Continuaba sollozando, y el nudo que se había formado en mi garganta me impedía hablar-Cariño, pensé que luego de ayudarte con lo de Margot volverías a casa, pero desapareciste nuevamente y te hemos buscado durante años y...

-Pronto iré a verte mamá-Informé-Solo no vuelvas a mencionar a Margot, por favor.

-De acuerdo, cariño-Suspiró.

-Estoy llegando a un lugar madre, me pondré en contacto pronto. Saluda a Gemma de mi parte.

-Esta bien-Soltó-¡Gemma, Harry te manda saludos!-Chilló emocionada-Harry, cariño-Dijo-Por favor no vuelvas a desaparecer.

-No lo haré-Aseguré.

-Oh, por cierto. Aquella vez no pregunté absolutamente nada sobre Margot, pero lo cierto es que lo que sucedió con la muchacha rompió mi corazón-Confesó-Y sea lo que sea que esté sucediendo ahora, por favor no lastimes más personas.

-Lo sé, madre-Lancé un largo suspiro y tragué el nudo de mi garganta-Yo... te amo mamá.

-¡Oh por Dios, mi pequeño!-Sollozó-¡También te amo!-Exclamó-Y ahora será mejor que cuelgue, y así poder llorar tranquila.

FOUND | H.S |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora