ANTES - XXX ; Royals.

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El viento golpeando mi rostro en aquel oscuro descampado, el humo de aquel cigarrillo colándose por mis fosas nasales junto con el perfume barato de la muchacha.

-A veces necesito alejarme de la ciudad, ayuda a quitarme el estrés-Habló antes de darle una calada a su cigarro.

No respondí.

-Últimamente te he notado demasiado callado-Soltó-¿Sucede algo?

-He estado pensando, sólo eso-Respondí.

-Espero que en mi desnuda-Rió.

Negué con mi cabeza repetidas veces.

-Lárgalo-Ordenó Kara, arrojando la colilla de su cigarrillo.

Me tomé mi tiempo, las cosas con Kara no eran para nada fáciles.

-¿Qué es lo que tienes con los Muttone?-Pregunté, y se me quedó mirando-Me refiero, ellos te lo han dado absolutamente todo. Cubrieron tu educación, tus actividades extracurriculares, tu vivienda, se encargan de que no falte comida en tu mesa y...

-Y los detesto-Escupió.

-¿Por qué tanto odio hacia ellos?

Kara suspiró.

-Mi padre solía trabajar para Memphis-Confesó-Era encargado de finanzas, mantenía a las corporaciones de los Muttone en pie-Prendió otro cigarro-Lo teníamos todo, éramos extremadamente felices. Por algun motivo papá no dejaba que me acercase a ninguno de los Muttone, era extraño, porque él y Memphis eran grandes amigos, y Margot y yo compartíamos ciertas clases cuando eramos pequeñas.

-¿De verdad?-Asintió.

-Margot jamás se percató de mi existencia-Suspiró-Ella sólo se limitaba a relacionarse con un grupo selecto de personas, quienes claramente se le acercaban por formar parte de la realeza londinense-Hizo rodar sus ojos-La familia Muttone siempre fue iluminada por los reflectores, eso lo sabes. Ellos crecieron con eso, y siempre anhelé lo mismo-Confesó.

-¿Tener la vida de Margot?

-¡Siempre quise ser Margot!-Exclamó.

-La muy perra había nacido para ser el centro de las miradas por donde caminaba-Soltó con ira-¡Y ella no se percataba de aquello! Detestaba su actitud tan desinteresada, y el hecho de aquella humildad... incluso contando con dicha fortuna, ella era malditamente sencilla.

-¿Te molestaba el hecho de que Margot fuese una persona sencilla?-Enarqué una ceja-Eso es ridículo.

-Mis celos hacia Margot eran ridículos-Soltó-Quería ser ella... Rogaba a mi padre porque me dejara acercarme y simplemente pedirle un maldito bolígrafo ¡Quería algo que le perteneciese!

Aquello me asustaba.

-Quería su voz, su cabello, sus muñecas, sus amigos... quería su familia. Quería ser Margot Muttone-Repuso, y me pareció enfermizo-Memphis y Francesca sacaron a sus hijos de la institución, y los educaron en casa. Tras la partida de los Muttone, los ojos comenzaron a focalizarse en mí. La gente deseaba lo que yo poseía, y eso me encantaba. Aunque aquel apellido seguía resonando por los pasillos del instituto:

-¡Ella no es una Muttone!

-¡Lillian quiere ser como Margot!

-¡Lilian nunca podrá ser como Margot!

-¡El padre de Lillian trabaja para el papá de Maddox!

-¡Morrison jamás se fijaría en alguien como Lillian!

FOUND | H.S |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora