Recuerdos Quemados.

1.5K 164 239
                                    

*Advertencia* Este Dylan Thompson, no tiene relación con el actual. Tómalo como una variante malvada.

Un año atrás.

Hace exactamente un año atrás. Jason Grace fue a observar por primera vez una de las peleas de Percy Jackson organizadas por Nico di Angelo.  Percy ya era conocido como el "invicto". Poseía el ingenio y la fiereza que todo hombre sueña alcanzar alguna vez.

Lo que muchos practicaban durante años para perfeccionarse en el arte de la pelea, para Percy era algo natural y sencillo. Su cuerpo se movía solo con elegancia. Daba golpes acertados, y patadas que derribaban a hombres el doble de su peso y tamaño.

¡Admiren al gran Perseo Jackson! ¡Terror de titanes!
¡El horror de gigantes!

Esa noche él peleaba con uno de los Thompson. Con Fray Thompson. El segundo menor, el más veloz.

Los Thompson en ese entonces, no eran sólo cuatro hermanos, si no que eran cinco... El quinto era el más joven, de la edad de ambos primos.

Se llamaba Dylan. Dylan era arrogante, egoísta y bien parecido. Llevaba una camiseta de los Dallas Cowboys y sonreía como si se considerase un regalo de Dioses para las mujeres delincuentes.

Y le encantaba las chicas ajenas...

¡Como le gustaban aquellas chicas, eran su perdición!

Las chicas que ya tenían dueño. Dylan las enamoraba, las encantaba, suspiraba en sus oídos derramando miel y besandolas con la mirada.

¡Un verdadero conquistador! Percy aprendió todo acerca del arte de cortejar a su lado. Fue su más fiel aprendiz...

Le daba tanto placer verlas despachar a sus novios y que vinieran arrastrándose hasta él.

Para que él solo pudiera decirles:

- Estaba jugando contigo, Puta. ¿Crees que vales tanto para estar conmigo? - Y se reía en sus caras, humillándolas hasta dejarlas secas de tanto dolor.

Ese exquisito momento lo saboreaba con cada fibra de su ser.

Le encantaba sentirse superior de esa manera. No había mujer que se resistiera.

Bueno, hubo una mujer que le dijo "No".

Y su nombre era/es Piper McLean.

Era su tercera cita con Jason.  Ella estaba hermosa y deslumbrante esa noche. A todos encanto y embeleso.
Completamente a todos... Hasta a los que no debería.

Dylan y Percy eran amigos. A Dylan le encantaba ver la golpiza que le daba Percy a sus hermanos. Y solo eso en común, los unió.

Jason y Piper se abrazaban y compartían miradas cargadas de amor a varios metros de él. Sus manos le picaron por la ansiedad. Y se relamia los labios impaciente. Necesitaba que estuviera lamiendo sus pies y más que eso.

En un determinado momento Dylan le pidió a Percy que le presentará a Piper, él desconfiado le advirtió que salía con su primo.

- ¡No te entrometas en su relación, Dylan! O juro que te mataré. - Le advirtió con diversión en la voz pero con seriedad en la mirada. - Es la chica de mi primo. -

Con toda la hipocresía del mundo, él sonrió y respondió. - Solo quiero apreciar más de cerca su belleza. Nada más. Te prometo mi amigo, qué no haré nada, ni un solo dedo moveré. -

PERCY PUNK - PERCABETHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora