The boy knows something ✔ (TBKS #1)

Capítulo 4

Aquella noche casi no pude dormir.
Me quedé despierto tumbado ne mi cama, mirando hacia mi ventana que daba una vista clara hacia la de Mackenzie.
No se si estaba esperando ver las luces encenderse, en señal de que ella había vuelto a casa. De todas formas no fui capaz de verlo. Quizá no haya prendido las luces al regresar o quizá no haya regresado. Después de ver lo de esa noche, ya no estaba muy seguro de cómo o quién era Mackenzie Bloom.

Al horario de ir al colegio esperé verla salir de su casa, para quizás interceptarla allí.
No iba a dejarme sin explicaciones despues de lo que había visto. Me mataba la incertidumbre.
De cualquier manera no la vi a la salida de su casa; solíamos coincidir muy pocas veces porque 1) yo me quedaba dormido y salía pitando tardísimo o 2) ella salía muy temprano para alcanzar el bus vacío.
Esperé verla en la escuela. Y con esperé quiero decir que estuve atento y con los ojos en todas parte en los recesos y en el almuerzo.

Estaba a punto de entrar a clase de química, la última del día y de la cual no había hecho los deberes (bueno, en todo caso, yo no suelo hacer deberes de ninguna materia. Ja, Connor goals) cuando la vi.

La vi desde la otra punta de la fila de casilleros. Su coleta despeinada, sus lentes, su ropa holgada y los libros en su mano estaban ahí. La niña nerd y rara estaba allí. Ni rastro de la mujer que había visto añoche entrar a aquella fiesta.
Las comparé mentalmente y aún no podía creer que fueran la misma persona. ¡Hasta June solía decir que ella no tenía idea de como vestirse! Bueno, también solía decie que ganaría el premio a la cosa más rara y fea que había pisado este instituto. Si, ella no tenía mucho tacto que digamos.

- Bloom - le dije cuando me le acerqué por atras, con mi sonrisa burlona de siempre.
- ¿Tú? - me miró con el ceño fruncido y se volvió a voltear para meter sus libros en su locker - Ten cuidado, no vaya a ser que te vean hablando conmigo.
- Si, bueno, deja que se acostumbren, porque tengo un par se cosas que decirte, es mas ¿Sabes que, Mack? Tengo varias preguntas.
- ¿Disculpa? - me volvió a mirar con su famosa cara de vete a la mierda. Nada nuevo.
- Se tu secreto. Te vi anoche.
- No tengo tiempo para tus bobadas, Connor.
Caminó para irse pero la detuve.
- No son bobadas. Y lo sabes, sabes lo que se.
- No, no lo se.
Me di cuenta que miraba alrededor, como esperando que nadie nos viera hablando. Estaba bastante incómoda.
- Mira, cuando pase la última hora ve para el estacionamiento. Podemos hablar en mi coche.
- Ni loca. No iré.
- Si,irás.
- ¿Que te pasa? - me miró extrañada.
- Mira, no he dormido en toda la noche. Promete que irás al coche.
- ¿Quieres apostar? - se rió y siguió su camino a clase de álgebra.

Esa sonrisa me recordó a aquella boca pintada de color café de anoche. Si, era ella, era su sonrisa. Y era increible que lo fuera.