Estaba parado frente a la puerta cerrada.
Eran aproximadamente las 18:00hs así que ya estaría en casa, y sus padres trabajando. Me había tardado mil siglos paseando por todas las tiendas de la ciudad para encontrar ese algo perfecto que estaba buscando.
La caja color blanco con moño rojo me pesaba un poco así que decidí dejarla en el piso. Era de grande como dos microondas, uno encima del otro. Me sequé las palmas de las manos en el pantalón y me decidí a tocar el timbre.
Aquí vamos.
Escuché pasos arriba, alguien bajando la escalera y por fin abriendo la puerta.
Vi a Mackenzie con el pelo en una coleta medio despeinada, una remera y un short. Nada más, así de simple. Estaba hermosa. Desde hacía un tiempo cada vez que la veía me paraba a pensar que estaba hermosa. Y esta vez no me reprimí a mi mismo, me dije una y otra vez lo bella que era.
- ¿Connor? Que..
- Espera - le dije - De verdad, de verdad no digas nada porque le he ensayado en el carro todo el camino y si me cambias algo te juro que me voy a olvidar todo.
Me miró sorprendida, lo cual era bastante chistoso porque ponía una expresión súper mona.
Allí, en el umbral de su puerta, comencé a hablar.
- Tu.. quiero decir, yo, en el hospital, he sido un idiota. No por las cosas que te dije, porque en realidad lo sentía, si no por cómo lo dije. Te lo he dicho como si fuera algo al pasar y no lo es. Realmente. Pero está bien que no me hayas creído porque ni yo mismo lo hubiera hecho si fuera tú. A ver, tu me conoces, Mack, siempre he sido un idiota. Contigo, con mi madre, con los demás. Siempre creyéndome el mejor, por encima de todos.
- Pero ayer.. - seguí - ayer, contigo dejándome en el Hospital y con mi madre tomándose la cabeza por las cosas que hago, realmente me di cuenta que no puedo estar más abajo. Estoy tocando fondo, realmente, y quiero salir. Y tengo millones de cosas para arreglar con muchas personas, y conmigo mismo, pero quise empezar por ti. Porque quiero demostrarte que realmente puedo ser mejor que lo que tú conoces.
- Connor, no entien...
- Abréla - dije, tomando la caja y extendiéndola hacia ella - es... para ti.
Me miró extrañada pero tomó la caja, la colocó en el piso y se agachó para abrirla.
Corrió el moño y abrió las solapas que cubrían lo que había dentro, hasta que lo sacó.
Era una casita para pájaros de ceramica, blanca y roja.- Connor - susurró sin poder sacar los ojos de la casita.
- Tiene... Tiene una fuente que si la conectas siempre tendrá agua.. Y tiene muchos agujeros para nidos... Todos me dicen lo mucho que te gastaba que los pájaros se acercaran a tu jardin... Y desde que llegué yo ya no lo hacen, sentí como que tenía que remendarlo.
Mackenzie posó los ojos en mi con una expresión de sorpresa, queriéndo hablar pero sin que las palabras le salieran.
- Ven, vamos a colocarla -le dije.
La tome de la mano y ella llevó en sus manos la casita. Nos acercamos a la parte de su jardín donde solía estar la anterior casa y la acomodamos ahí.- Yo... no se que decir - dijo mientras me miraba - Es una de las cosas más lindas que alguien ha hecho por mi.
- ¿Te refieres a romperla o regalarte otra? - pregunté riendo y metiendo las manos en los bolsillos.
- Ambas, creo - dijo soltando una carcajada - fui muy dura contigo en el Hospital, ¿verdad?
- No puedo negar que me dejaste una herida.. - bromeé - pero me hiciste ver la realidad.
- ¿Y esa realidad cuál sería?
- Que soy un completo idiota, básicamente - dije.
- Esto dice otra cosa - dijo mirando la casita, que tenía en el piso de arriba tres lugares para poner la comida de pájaros listos para llenar - Y no lo digo por el hecho de comprar la casita... Si no por haberme escuchado, cuando te lo dije en el Hospital. Y por haberte dado cuenta que era algo que yo realmente quería. Esas pequeñas son lo que demuestran lo que eres.
- Ya - le dije - ¿Y la otra parte? ¿La otra cosa que te dije en el Hospital?
Mack no contestó y miró hacía otro lado. Tenía los brazos cruzados y la coleta le ondeaba con el viento.
- ¿De que estabas... sintiendo cosas por mi?
- De que me estoy enamorando de ti - le solté.
Una expresión sorprendida inundó su rostro, luego reemplazada por un entrecejo fruncido.
- No tienes ni idea de lo que dices - dijo.
- ¿Que no tengo ni idea? - contrarrestré
- No, no tienes ni idea, estás confundido, Connor. No se que te suceda pero no es amor.
- ¿No? - comencé - Entonces busca otra palabra que signifique que una persona te importe a pesar de todas las diferencias y a pesar de que vives peleándote con ella. Busca otra palabra para que alguien te importe tanto que te lleve a hacer cursiladas como hablarle a tu mamá sobre ella o comprarle una casa para pájaros y ser realmente feliz con ello. Busca otra palabra para que explique por que demonios te vuelve tan loco y piensas en ella todo el puto día porque la verdad, Mack, es que yo no encuentro otra.
Los ojos le brillaban mientras miraba a los míos.
- ¿Y que si no tiene coherencia lo que me pasa? ¡Me hace feliz estar contigo! ¡Quiero estar contigo, hablarte, contarte cosas, que me abraces y que me beses me hace feliz! Y sé que tienes a miles de tipos mejores que yo, como Jack. Tienes a Jack que es un partido excelente, es un.. es un maldito Ken, Mack, y se que es perfecto y lo será toda la su vida y yo aquí soy un completo idiota pero quiero mejorar. Quiero ser mejor por ti. Y mira, que yo no veo telenovelas, pero sé que es amor porque me quiero convertir en una mejor persona, por ti. Y no te voy a decir eso de que tu me cambias, pero si me inspiras a cambiar.
Se quedó mirándome. Tenía una expresión como si fuera a llorar de repente. Y eso jamás en la vida lo había visto en Mackenzie. Dios, genial, ahora además de largarme fuera a patadas la he asustado.
- Ahora.. - dije - ahora si quieres decirme que estoy demente o algo y echarme, pues hazlo.
Pensé que iba a hacerlo, realmente pensé que iba a echarme.
Pero en lugar de eso,
en lugar de huir,
se acercó a mi rápidamente,
me tomó el rostro con sus manos,
y me besó.
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The boy knows something ✔ (TBKS #1)
RomanceMackenzie y Connor son vecinos. Se conocen desde los 10 años y siempre se han llevado fatal. Mackenzie tiene un gran secreto. Connor, una noche, lo descubre. ¿Que sigue después de eso? ¿Extorsión? ¿Humillación? Puede ser, pero luego de esa noche la...