The boy knows something ✔ (TBKS #1)

Capítulo 24

- ¿Que? - ella respondió, incrédula.
- Eso - repetí-  que me pasan cosas contigo y estaba tratando de evitarlo.
- Mira - alejó su mano de la mía y la usó para ponerse un mechón de pelo detrás de la oreja, nerviosa - no eres tu hablando, ¿si? Son los miles de analgésicos que te hicieron tomar.

Si, podía ser que estuviera un 110% cedado pero, ¿y qué? ¿y qué si era lo único que me hacía ver la realidad?

- ¿Que más puede ser? - comencé-     ¿por que otra razón me he pasado las últimas semanas pensando solo en ti?¿por que espero con ansias que se hagan las 11 para pasarte a buscar por tu casa y llevarme a cualquier sitio? Mack, no me había dado cuenta. Pensé... Pensé que esto era algo pasajero, pensé que se iría pero.... Eres lo primero que cruzó mi mente cuando desperté. Realmente, realmente creo que me pasan cosas contigo. No se que, pero me pasan cosas contigo.

No podia dejar de mirarla a los ojos. Esos ojos grises adornados por un pelo rubio brilloso... Estaba cansada, despeinada, con unas ojeras mas grandes que este hospital y aun asi era lo mas lindo que yo habia visto.

- Esto es una locura - dijo, riendo nerviosa-  de verdad te has golpeado la cabeza. Ya andas diciendo tonterías.
- Estaré cedado hasta la médula pero estoy cuerdo - le dije.
Se me quedó mirando. Seguro buscando un indicio de que esto era broma, pero no lo halló, porque no lo era.
- No creo que sea el mejor momento para hablar - se paró de donde estaba sentada.
- ¿No vas a decirme nada? Aunque sea mándame a la mierda pero no te vayas así.
- ¿De verdad quieres que te diga que pienso?
Asentí.

Aunque lo dudó unos segundos, comenzó a hablar.

- Pienso que te has agarrado de esa historia que te conté para darle forma a tu cuento - no estaba gritando, ni enojada, solo seria - Pienso que toda tu vida has obtenido lo que quieres y esto, Connor, es otro de tus caprichos. ¿Crees que soy tan tonta de comerme el verso? ¿Que después de años y años de ser indiferente conmigo porque era demasiado poco para ti y tus  amigos, hoy voy a caer, de un día para el otro?

- Mack, de verdad me importa...

- ¿Te importa? ¿Desde cuando? Porque hasta donde se, lo único que hacemos juntos es acostarnos y pasar a fiestas. Preocuparte por alguien es distinto a eso, y no creo este sea el caso.

- ¿No crees que te quiera? Pues a mi me suena a que te he dicho todo esto y quieres escaparte, como lo hiciste con Jack.

- ¿Disculpa? Tienes a tu novia embarazada y no has sido capaz de contarlo a tu madre, ¿y yo soy la que escapa de las cosas?

- Mackenzie, me dices esto porque siempre has creído que soy un patán y estas tratando de evitarlo.

- Connor, no lo entiendes - suspiró, con los ojos cansados - yo no te he inventado el mote de patán. Ese has sido tu, y lo has sido desde siempre. Llegaste al vecindario a los 10 años y en cinco minutos rompiste mi casita para pájaros favorita. ¿Algún día te disculpaste? ¿Alguna vez me saludaste cuando había gente al rededor? No, jamás. Y no digo que este mal que yo te de vergüenza, haz lo que quieras, siempre lo has hecho, pero eso si... No me vengas con que esta enamorado de mi ahora porque es imposible. La gente como tu,como yo, no nos mezclamos.

La miré.
Lo que había dicho que había caído como un balde de arena en el pecho. No lograría digerirlo jamás.
- Entonces... - recordé-  entonces el día en que te pregunté si yo estaba en el grupo de personas de mierda que solo viven de las apariencias, era así. Siempre has creido que yo era parte.

Se me quedó mirando un instante, pero no respondió.

Cuando decidí en literalmente diez segundos decirle la verdad de como me sentía, había pensando que sería diferente. 

Pero no, Mackenzie aún pensaba que yo era un patán. Y si, se que lo había pensando toda su vida, pero pensé que había cambiado de parecer en los últimos días... pensé que yo estaba cambiando.

- ¿Que tengo que hacer para que te des cuenta que si me preocupo? ¿Que de verdad me di cuenta que me importas?

Volvió a suspirar.

- Mañana vas a salir de este Hospital y te vas a dar cuenta que todo esto - nos señaló con un dedo - no tiene sentido.

Ben entrando a la habitación rápidamente nos sorprendió y dejamos de hablar.

- ¿Que ha pasado? - le dije, aunque aún seguía mirando a Mack.

- Ya he hablado con tu madre - Ben también miraba a Mack, pero aún con esa expresión de como si tuviera seis brazos en lugar de dos - Se ha vuelto loca, pero viene para aquí.

- Deberías irte - dije mirando a Mackenzie - Si mi madre te ve le dirá a tus padres.

- No, no - insistió - le diré que fue mi culpa, yo te he llevado allí.

- ¿Tu has saltado como un idiota del barco?  - dije, y negó con la cabeza - Entonces ve, no.. no quiero que te metas en problemas.

Las cosas habían quedado tensas entre nosotros y hasta Ben, en su máxima confusión mental, lo notaba.

Mackenzie se despidió rápido y salió del cuarto, como sin saber que hacer o que decir.

- Si no me he caído de culo aún - dijo Ben - es porque hay un Dios que me está atajando.

Se venía la peor parte, explicarle todo a Ben.

- ¿Que malditos demonios está pasando, Connor?