Capítulo 16: Las verdades en la cara y las mentiras de la cama

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Harry no se detuvo en ningún supermercado. Condujo directo a su casa, obviando el apartamento de Niall.

Le metió en casa y le llevó a un cuarto de invitados.

-¿Qué tal si duermes un poco? Te vendrá bien.

Cerró la puerta.

Niall se desnudó y se hundió en el colchón.

Su teléfono vibraba sin cesar.

-No me llames.

-Niall, por favor. Escúchame. Sólo escúchame. Unos minutos.

-No quiero.

-¿Estás en casa? Subiré al avión y estaré allí contigo. No voy a hablar nada con Zayn.

-Ve y habla con él.

-Niall...

-Yo no voy a estar con alguien que todavía tiene la cabeza en su ex. Ve, habla con él y decídete, porque yo no quiero los restos de nadie. Yo veré lo que hago cuando vuelvas.

Louis miró su teléfono. Niall colgó y su fotografía y estado de whatsapp desaparecieron. Trató de escribirle pero no recibía. Estaba bloqueado.

Se pasó las manos por el cabello. No sabía qué mierda hacer pero realmente necesitaba hablar con Zayn.



Liam estaba bocabajo en su cama.

-Bueno... me voy.

La cosa tampoco había funcionado con Kristen, y ella era definitivamente espectacular. Pero su pene  no pensaba lo mismo.

La guapa periodista deportiva acabó de vestirse y salió. El sonido de sus tacones por las escaleras resonó como balas en el cerebro del futbolista.

No había salido de casa desde el día anterior. Sólo pensando en solucionar eso. Pero ni las películas porno, ni Amanda el día anterior, ni Kristen ahora, habían logrado que su polla se pusiese dura.

Apretó los dientes.

Odiaba a Harry Styles como a nada en el mundo.

Iría a buscarlo. Y le gritaría. Y le diría que había estropeado todo. Que le odiaba. Ya se imaginaba su cara...

Su pene creció y se endureció.

Liam se apoyó contra el colchón.  Cerró los ojos y los puños con fuerza y trató de imaginarse a una mujer hermosa con las piernas abiertas pero lo único que aparecía en su mente era ese descarado de ojos verdes.

Se frotó contra el colchón.

Agarró el cabecero de la cama. Quería mantener sus manos lejos de la polla.

Pero su cuerpo se movió por iniciativa propia, la verga rozándose contra el colchón, arriba y abajo...

Arriba y abajo.

Rápido, más rápido.

El cabecero de madera crujió. El pene estaba en su máxima dureza. Bocabajo, en la cama.

Como en Turquía.

El semen manchó sus sábanas de raso morado como resto de placer culpable y Liam soltó las manos.

Le costaba respirar.



Louis esperó en el bar que Zayn le había dicho. Era el mismo bar dónde iban siempre cuando se escapaban a Londres.

Zayn entró por la puerta, y estaba tan sexy como siempre había estado. Se acercó a la mesa y se sentó frente a él.

-Te eché mucho de menos.

-Zayn, eso llega tarde. Yo te eché de menos increíblemente. No te despediste. Nada. De hecho ahora tienes una hija.

-No puedes culparme por tener miedo por mi carrera.

-Puedo culparte por muchas cosas.

-Louis... perdón.

Louis miró su mano. Le estaba agarrando del brazo.

-No...

Zayn se inclinó y le besó.



Niall estaba sentado frente a Harry, comiendo chocolate y viendo un talent show.

-¿Me vas a contar qué pasó? –dijo Harry al fin.

-Su ex novio. –Niall le contó todo y Harry se quedó con la boca abierta.

-Niall... a lo mejor él ahora se da cuenta de lo equivocado que está...

El teléfono de Harry empezó a vibrar con insistencia. Eran whatsapps de un amigo suyo, un jugador veterano del Liverpool.

"Éste no es Tomlinson?"

Harry miró a Niall. Le alargó el teléfono con las fotografías de Louis besando a Zayn.

-Niall, lo siento.

Niall miró la pantalla y poco a poco la imagen se hizo borrosa tras las lágrimas.

-Joder.

-Mi padre ha ido con su amante a Escocia, todo el fin de semana. Estamos solos. Vamos a comer dulces y emborracharnos.

-Quiero emborracharme de verdad. No tomar unas cervezas.

-Mi padre tiene de todo. Y creéme. Yo también necesito una buena borrachera.

-¿Vas a contarme qué te pasó a tí?

Harry no respondió, sólo fue a buscar hielo, chocolates y alcohol a la cocina.



Louis estaba en el sofá de su casa, con Zayn encima. Zayn le besaba, su barba le rozaba la clavícula. Y no llevaban camisa.

Zayn metió la mano por sus pantalones y de repente Louis gimió, apartándolo.

-No. No. No. No puedo.

-Louis...

-No. No, no.

-¿Es por el rubio?

-Estoy enamorado de él. –dijo Louis en voz baja. –mierda. ¿Por qué estaba haciendo esta mierda? – no de ti.

-Podemos volver a funcionar juntos...

-Vete. Largo. Fuera.

Zayn se levantó y se fue.

-Piénsalo. –dijo antes de irse.

Louis dio vueltas por la sala, nervioso. Tenía que arreglarlo todo. Tenía que ir a Liverpool y recuperar a Niall.



Liam estaba sobre la cama.

Rojo. Furioso. Avergonzado.

Había llamado a Beth. Ella nunca le fallaba. Tan tierna y tan caliente.

Por fin su pene había respondido. Con ella debajo, todo fue bien.

Hasta que cuando estaba follando con ella, el nombre de Harry se escapó entre sus labios.

Y entonces comprendió.

El cabello rizado y los ojos claros de Beth.

Saltó de la cama.

-Por favor... vete.

Iba a ir a casa de Harry. Iba a ir a casa de ese puto Harry y le iba a gritar su odio en la puta cara.

Minuto 91 |Nouis| Lirry||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora