Minuto 91 |Nouis| Lirry||

Capítulo 40: Problemas de Nueva York

-Es importante tener en cuenta que la salud sexual es salud.  Es mejor gastar un poco más que terminar en urgencias. Os daré unas muestras de lubricante cuando termine aquí.

Louis estaba rojo y no se atrevía a decirle a la doctora que su problema no era el dinero y menos la concienciación.   Solo esperaba mientras ella analizaba eficientemente la irritación de su entrepierna.

-Tienes una reacción alérgica severa.

-Lo supuse, si.

-Te voy a dar una crema pero antes te voy a poner una inyección para que la inflamación baje.

-Espere, ¿qué?

-Es un antihistamínico.  Va a ser un pinchazo muy rápido en la base del miembro, eso hará que baje mucho más rápido y tiene una anestesia local que hará que no le duela...

Niall se sentó.  Se estaba mareando.  Louis la miró y balbuceó pero bajó los hombros y se dio por vencido. 

Apretó los puños cuando llegó la inyección.

-Llevas veinticinco minutos en la ducha, ¿estás bien?

Harry salió envuelto en un albornoz y buscó apoyo hundiendo la cara contra el hombro de Liam.

-El desayuno con mi madre me asusta. 

-Todo va a ir bien.  Vamos, vístete. 

Anne estaba ya en la mesa del café del hotel.  Harry entró de la mano de Liam y se acercó a la mesa.

-Hola, mamá.

-Harry... y tú debes ser Liam.  Harry me ha hablado de ti y te he buscado en Google. 

-Hola.

Se sentaron.  Harry miró las bandejas que estaban sobre la mesa.  Dudo durante unos segundos pero se sirvió un croissant y un cupcake.  Ya iría al gimnasio. 

-Harry, tengo muchas cosas que contarte.  Mi amiga quiere ver alguno de tus diseños.  Un look urbano y algo de noche.  Que le pases los patrones y esta tarde puedes ir a su taller y mostrarle.  Elegir las telas... sé que te va a encantar.

-Pero ma...

-Se que no hemos estado muy unidos desde tu adolescencia, pero quiero recuperar el tiempo y estoy muy orgullosa de que a mi amiga le gustasen esos diseños que hiciste el año pasado.

-Sólo eran unos bocetos.  Sencillos.  Lo dijo porque soy tu hijo.

-Bueno, tú tranquilo.  Elige un par de tus mejores diseños y hazles alucinar.  Confío en ti.

Harry bebió un sorbo de café.  Anne se levantó y se puso una chaqueta que parecía carísima.

-Nos vemos esta noche.  Ven a mi casa a cenar y me cuentas que tal fue.

Liam espero a que se quedarán solos.  Harry seguía en silencio.

-Deberías haberle dicho que odias diseñar.

-Es la primera vez que está orgullosa de mí.

-Pero odias diseñar. 

-Puedo intentarlo.  Aún recuerdo algunas cosas y... no puede ser tan difícil.

-Odias diseñar, Harry. 

-Haré un par de diseños, cenamos con ella y al final le cuento que en realidad quiero ser entrenador.

-Entonces me estás decepcionando a mí.

-Liam....

-Piensa en eso.