Blemish

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Las luces se fueron, de repente todo el lugar se puso a oscuras, el primer paso estaba hecho... pero no estaba segura si quería continuar con la misión que estaba planeada para esa noche en concreto.

Las cinco de la tarde, aquellos leales fans de la banda más popular de ese momento en el género Visual Kei, se encontraban en mitad de un concierto nada más ni nada menos llamada The GazettE hasta que se llevaron la sorpresa en cuestión de minutos cuando el apagón se presentó. Los gritos de todas las personas presentes de ese mismo estadio inundaron el lugar como si se tratara de una ola. Desde mi posición, que era sobre un elevador de mantenimiento de las vigas del escenario, podía distinguir algunas de las muchas preguntas que se hacían todos en ese preciso instante, "¿qué ocurrió?, ¿acaso es parte del espectáculo?"
Los mismos integrantes comenzaban a quejarse sobre el acontecimiento inesperado que se presentó, obviamente no sabían lo que les esperaba más tarde. Allí me encontraba yo, divisando cualquier movimiento que podía hacer en aquellos minutos el objetivo que se me había encargado, no sabía a que se debía tanto escándalo por ese hombre. Solo era un famoso guitarrista, ¿qué daño podía hacerle al negocio? Generalmente se me entregaba un informe con datos personales de la persona en cuestión, esta vez fue diferente y la orden fue directa desde mi jefe.

Solo se me dio un nombre, fecha y lugar, su nombre era Yuu Shiroyama apodado y reconocido como Aoi, cabello oscuro y con una perforación en el labio. Me era difícil distinguirlo, no por la distancia donde me encontraba sino por los lentes que llevaba de visión nocturna en aquel entonces, pero de que algo era obvio era su vestimenta de esa noche. Llevaba una chaqueta negra, una playera casi rasgada, un gran collar adornaba el cuello del hombre al igual que el distintivo piercing de su labio. No cabía duda alguna de que se trataba de mi objetivo, los gritos de los fans eran ensordecedores tanto que ya deseaba largarme de ese lugar lleno de conmoción pero... ¿Qué me estaba deteniendo a disparar mi arma? Estaba lista, con una bala en el cargador solo necesitaba una, jamás fallaba. En la punta del mismo rifle lo adornaba un silenciador aunque creía que si disparaba sin el los gritos camuflarían el ruido del disparo en ese instante. Tenía la mira de mi arma fija en el centro de su cabeza, un disparo limpio y directo era mi oportunidad de hacerlo, respiré hondo pero ni siquiera fui capaz de jalar el gatillo. << ¿Qué me sucede>> pensaba en mis adentros, no entendía que ocurría conmigo algo impedía que asesinara en pleno espectáculo al guitarrista.

De momento un brillo me cegó mi vista, perdí mi objetivo fue cuando entonces me quité las gafas y pude notar que habían vuelto a encender las luces. Me puse de pie, sosteniendo el arma entre mis manos escuchaba las lamentables palabras de quien imaginaba que era el vocalista de la banda, pidiendo su más sinceras disculpas. Yo por otro lado estaba más que en shock por lo ocurrido, como si mi conciencia me hubiera dicho, en el momento que tenía mi dedo en el gatillo a punto de jalar este, <<No lo hagas.>> confundida observaba como el show continuaba sin problema alguno, esos hombres no se daban por vencido por más que hayan pasado minutos sin luz y conmocionados.

Me sentía extrañada, tenía mi mirada perdida en un punto fijo del escenario como si estuviera en un tipo de trance, analizaba lo que había ocurrido minutos antes de llevar a cabo el asesinato. Luego de haber quitado varias vidas en nombre de nuestra compañía, de nuestro negocio "familiar" me arrepentí en el último segundo, fue allí que observé con detenimiento el hombre quien me había hecho cambiar de parecer, negaba varias veces con mi cabeza con lentitud, no sabía quien era, ni de con quien estaba lidiando, ni siquiera por qué no pude llegar a matarlo. Necesitaba respuestas concretas, pues algo llamó mi atención desde ese preciso instante en que pose mi mirada en el hombre de cabellos oscuros.