Cuatro

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Derek podía ser el hijo y compañero perfecto, lo sabía de sobra porque todos necesitaban de él en algún momento de la vida, ya sea para algún favor o solo por compañía.

Entonces se acostumbró a siempre estar en boca de la gente en buena forma, le encantaban las "desgracias" o necesidades de los demás porque a él le gustaba mucho ayudar.

Sin embargo, cuando Stiles aparecía en su día caminando por ahí libremente como si la vida se tratase de no tener responsabilidades, ahí es cuando sus nervios aparecían también porque él no tenía ni la más mínima idea de qué hacer con su hermanastro, lo que provocaba que su relación no fuera la mejor.

Tenía una suposición de que en el mundo según Stiles Stilinski, todo era fácil, no seguir reglas, promiscuidad, adiciones a todo y la libertad de expresión con todos esos derivados que a su persona , le parecían sencillamente tontos.

Pero él quería llevarse bien con Stiles, porque así era su personalidad además de que su madre le había enseñado que no debía relacionarse mal con las personas, porque cada uno de ellos formaban su día a día.

Aunque, el menor era muy diferente a su persona. El literalmente odiaba a medio mundo, si pudiese odiar a sus padres, él lo haría. Pero como John le dio la vida y su madre lo crió, nunca podrá hacerlo. Cada vez se preguntaba, si su hermanastro lo podría odiar a él también.

—¡Te odio! —gritó el castaño al llegar a casa, entrando por la puerta.

Bueno, al menos ya lo sabe.

—Es por tu bien, Stiles. Preocupas a nuestros padres y a mí también. —Derek cerró la puerta principal, siguiendo a su hermano menor hasta la sala.

—Papá me dejó ir y mamá no puede opinar en contra de eso. ¿Cuál es tu punto?

—Es jueves en la madrugada, estabas en una discoteca dónde no aceptan menores de edad, además de que había gente drogándose. ¿Necesitas más razones? —el castaño le miró, con una mueca combinada entre confusión y el enojo.

—No sabes cuánto te odio. —espetó el menor, lanzándole un golpe al pecho. Derek gimió, su hermano menor era fuerte.

El mayor se quedó en silencio, siendo mutilado mentalmente por Stiles aunque éste notó su repentina pasividad, más de la normal.

Le había dolido.

Stiles se quedó viendo si su hermano haría algo al respecto, pero éste sólo subió las escaleras con desgana. Rodó los ojos por el dramatismo de Derek y fue a la cocina a hacer la cena.

Al terminar, Derek no bajó del cuarto en todo el rato que estuvo en la planta baja y Stiles estaba preguntándose si fue tan malo lo que había dicho, entonces decidió tomar un plato con comida e ir a ver a su hermanastro.

—¿Derek? —preguntó, observando la marcada espalda del pelinegro, sus entrañas se contrajeron.

—Stiles... —respondió con un deje despectivo en su voz, sip, estaba enojado.

—Sabes que yo no te odio, ¿verdad? —Stiles fue acercándose donde su hermanastro, dejando la comida encima del escritorio en el proceso. Dio un gran salto acortando al distancia y cayó encima del mayor.

—¿Por qué me lo dices entonces?

—Hay cosas que decimos sin querer, porque estamos en el furor del momento. ¿Me disculpas? —Parte de él le gustaba pelear con Derek <léase, él insultando a su hermanastro>, pero otra parte de el le encantaba hablar normalmente con el mayor, sobre cualquier cosa que se le cruzara por la mente, por lo que la disculpa que estaba pidiendo era bastante sincera.

—¿Cómo puedo llevarme bien contigo? —Derek se giró con Stiles encima, el menor apretó sus mejillas con una sonrisa dulce que obviamente él correspondió.

—¿Estarías dispuesto a romper algunas reglas por mi? —Stiles todavía seguía en el regazo de su hermanastro, sin saber muy bien porqué acariciaba sus pectorales aunque Derek tampoco parecía darse cuenta. Le fue muy natural hacerlo.

—Si estás dispuesto a seguir algunas por mi.

—Escupe.

—Tu sales conmigo a algún lado para ver si nos gusta o al menos soportamos las preferencias del otro. —Derek expuso y Stiles con una sonrisa aceptó.

El menor siguió mirando a su hermano aún con las manos puestas en sus pectorales, cayó en cuenta de lo que hacía pero sin embargo no se quitó. Desde que había descubierto su nuevo "gusto", la visión hacia Derek cambió completamente hasta el punto de parecerle lo suficientemente atractivo como para querer "comérselo".

Y ¿por qué no? El morbo de ser familiares así no sea por lazo sanguíneo, le encantaba.

—Empezando ahora. —Stiles se levantó rápidamente de su lugar yendo hacia la puerta de salida. Derek se tomó dos segundos después en reaccionar y decidió correr tras él no sin antes agarrar las llaves del auto y dos chaquetas para él y Stiles.

Tenía que admitir su adoración a la actitud tan explosiva de Stiles, como si no tuviera alguna atadura o a quien rendirle cuentas, aunque él no se lo dijera para aumentarle el ego.

Alcanzó al castaño, desbloqueando el vehículo, subiéndose en él seguido del primero. No demoró mucho para ponerse en marcha sobre la carretera, miró a su hermano, calificando su atractivo y esperando a que éste le diera instrucciones a dónde ir.

—Tu sólo conduce hacia el sur, ya te digo donde hacer giro. —habló en voz baja, dejándose llevar un poco por el frío de la noche combinado con el aire acondicionado del auto.

[...]

Pasaron las horas y todavía no amanecía, iba en carretera abierta a una buena velocidad, entonces frenó en seco haciendo que su hermanastro se golpeara fuertemente la cara contra el tablero. Debido a que no tenía puesto el cinturón de seguridad.

Se había olvidado de que sus padres llegaban ese día en la mañana.

—Estúpido imbécil, ¿quien te regaló la licencia, maldito animal? Agh, mierda. —el ojo miel se frotó con ambas manos el puente de la nariz.

—Stiles, nuestros padres llegarán en la mañana —su tono de voz se estaba siendo alerta—. ¡¿Ahora que hago?! Mamá se va a decepcionar de mi y papá no me dejará leer más hasta tarde, soy un mal hijo. ¿Por qué tuve que hacerte caso?

—Ya lo sabía y lo tengo presente. —respondió el menor y Derek lo miró como si le hubiera salido otra cabeza, alterándose más. Stiles también sabía que vendría la pregunta de que si sabía lo que sus padres harían, aprendiéndosela de memoria.

—¡¿Y entonces por qué no me dijiste?! ¡¿Sabes que harán nuestros padres?! —Stiles rodó los ojos, adelantándose a responder.

—Dejarán de confiar en nosotros. Derek, tu madre jamás ha confiado en mí y papá siempre lo ha hecho. Además ellos te adoran, así que deja de ser tan marica y conduce. —dio por finalizada la discusión cuando su hermano hizo rugir el motor.

Momentos después, el mayor sintió la mano de su hermano sobre la suya, acariciandolo con cariño.

—Perdón por lo que dije.

Derek negó con la cabeza y una sonrisa. Stiles a veces podía ser tan bipolar.

***

N/A: Hello, espero que estén muy bien.

Me gustó el capítulo aunque no ocurriese nada interesante, literalmente me tarde tres meses en escribirlo.

Espero les guste, voten, comenten y recomienden.

Love ❤️👋🏾

Stop Being Gay |Sterek|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora