3 (Editado 2023)

1.1K 101 10
                                    

Jaehyun fue un buen chico, se comportó de forma educada y dulce, e incluso me consiguió unos calcetines de su madre para que yo los usará y no pasara frío. Yo simplemente me dejé cuidar por él, porque al final tampoco podía hacer nada más. No me quedaba de otra que portarme bien y no intentar hacer nada tonto.

Eran las 3 de la madrugada cuando la música de la fiesta por fin se detuvo y se escucharon risotadas, además de algunos portazos. Jaehyun estaba sentado junto a mi mientras cambiaba los distintos canales de televisión que tenía disponibles. Antes había mencionado que si no encontraba nada, sería divertido si nos poníamos jugar algún videojuego. No podía creer lo calmado que estaba.

La verdad es que me sentía cansada, quería dormir, pero no sabía cómo hacerlo. Había dejado a Jaehyun sin cama y no quería que terminara durmiendo en el suelo, si es que en algún momento tenía ganas de descansar, claro. Decidí aguantarme y mantuve mis ojos lo más abiertos posibles, tratando de concentrarme en la televisión. Un golpeteo en la puerta me hizo dar un salto, y luego esta se abrió.

—Eh, Jae ¿A qué hora llegará tu mamá? —Un chico se asomó por la puerta casi sin darse cuenta de que yo me encontraba ahí.

—No lo sé, creo que hoy por la tarde –Jaehyun se puso de pie tras mirar el reloj para luego estar frente a él, sin siquiera tratar de ocultarme. El aún desconocido para mi solo asintió, hasta que se percató de mi presencia.

—¿Y ella? ¿Quién es? —Me apunto queriendo entrar a la habitación, pero Jaehyun le impidió el paso con mucha tranquilidad. Al parecer el chico estaba borracho, y mi ahora "cuidador" quería evitar cualquier momento incómodo para mi, aunque ya lo estaba siendo.

—Ella es Soyul, una amiga. Está mal ahora y debe descansar, al igual que tu, Johnny —Ahí sólo me quedé mirándolos con curiosidad. Había pasado ya mucho tiempo desde que alguien me había tratado de “amiga”. Para Jaehyun aún era una desconocida, al igual que él para mí, pero aún así escuchar eso me causó bienestar.

Ahora el llamado Johnny le dedicó una sonrisa pervertida antes de susurrarle algo en el oído. Tras eso volvió a mirarme y se fué tambaleando, sin decir nada más. Al parecer era de esos borrachos decentes. Jaehyun cerró la puerta y rió negando con su cabeza.

—Es hora de dormir, Soyul —Dijo acercándose a la cama para abrir las sábanas y acomodar los almohadones—. Te quedarás en mi habitación, ¿Está bien? Yo ahora iré a ordenar... El de antes era Johnny, mi primo, ya debe estar durmiendo así que no vendrá a molestarte.

—Vale... —Respondí tratando de ocultar la emoción que tuve al saber que por fin dormiría un poco. El tuvo intenciones de ayudarme a quedar bien acostada en la cama, pero no lo dejé. Hice todo sola, no quería que me tocara.

El chico era guapo, demasiado. Tenía una sonrisa muy bella acompañada de unos hoyuelos que se le formaban en las mejillas cada vez que sonreía, su piel era blanca y mucho mejor cuidada que la mía. Se notaba que el cuidaba de su aspecto físico, y eso me daba algo de temor. Durante todos estos años las personas que más me molestaban eran las que solían lucir bien.

El notó que yo lo evité, y creo que se sintió algo mal por su rostro desanimado. Iba también a arroparme mejor, pero nuevamente no lo dejé y me tapé sola. Suspiró y trató de sonreír, casi tan incómodo como yo. Esa sonrisa era típica en todos, sobre todo en mis padres cuando ya no sabían qué hacer conmigo.

—El baño está ahí –Apuntó la puerta que estaba en frente de la cama, cerca del televisor—. Si necesitas algo solo grita mi nombre y vendré tan rápido como pueda.

—Ok —Fue lo único que dije, planeando en mi cabeza como salir de ese lugar. Necesitaba escaparme en cuanto Jaehyun se quedara dormido.

—Espero puedas dormir bien –Dicho esto dio media vuelta y salió de la habitación a paso lento, dejando la puerta cerrada para darme privacidad.

Esperé unos minutos y cuando supe que no corría peligro de ser pillada me levanté aguantando el dolor que sentía al pisar. Abrí la cortina que ocultaba la ventana esperando poder escapar desde ahí, pero para mi sorpresa esta tenía unas protecciones de fierro. Mira tú qué bonito.

Tuve ganas de llorar solo por la rabia que me dio, tenía una mala suerte terrible. Debí escapar antes, debí golpear al chico para salir corriendo o bueno, debí lanzarme en cuanto llegué. Yo fui una cobarde.

Caminé hasta el baño desganada, encendí la luz y mi cabeza casi estalló por el dolor que me causó. Mis ojos estaban demasiado irritados y ardían. Esperé a acostumbrarme, y entonces vi mi reflejo en un gran espejo junto al lavamanos. Tenía un aspecto de mierda. Mis ojos estaban hinchados y rojos, mis mejillas y nariz también tenían ese color rojizo que adquirían cuando lloraba. Mi cabello estaba hecho un asco, todo despeinado, y mi bata rosada me hacía ver ridícula.

Otra vez quise llorar, pero no lo hice, ya estaba cansada de hacerlo y tenía que pensar en otras cosas, como en escapar o en qué haría si mis padres me descubrían y se enteraban de lo que iba a hacer esta noche. Eso no era para nada agradable, ni tenía un final feliz.

Mientras hacía mis necesidades sentada en el inodoro pensaba y pensaba, y por el cansancio estaba que me quedaba dormida ahí mismo. Me sentía afiebrada, pasando mis frías manos por sobre mis párpados, como intentando aliviar esa sensación tan incómoda.

Al terminar fui al lavamanos, me limpié y lavé mi rostro con agua tibia. Salí del baño y estuve a punto de escapar de la habitación, así como escapé de casa, y no, no pude hacerlo. El dolor en mis pies era cada vez más fuerte y no podía mentir, la cama era cómoda y el departamento tenía una temperatura muy cálida.

Me importó una mierda todo y me acosté, tapándome por completo con las sábanas, disfrutando el aroma que tenían. Olían al chico que me tenía de prisionera, y por alguna razón me pareció muy agradable. Cerré mis ojos y en poco me quedé dormida, así como siempre deseaba hacerlo. Por primera vez en meses pude dormir de esa forma sin necesidad de tomar alguna pastilla. Fue maravilloso.

. . .

Carly, si llegas a leer esto, te amo ♡

𝙎𝙖𝙫𝙚 𝙈𝙚 ❦ [𝙅𝙖𝙚𝙝𝙮𝙪𝙣]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora