Los días buenos.

Confesiones de la Universidad.

Mi madre me despertó el día lunes luego de haber llegado de su viaje a la playa con Jorge, mi padrastro, a las ocho de la mañana con un desayuno especial, luego de ver caricaturas y comerme el rico desayuno me metí a la ducha cantando cualquier letra que se me viniera a la cabeza. Hoy le hablaré nuevamente y como Aarón ya no va a estar enojado podremos hablar de muchas cosas, quizá hasta almorcemos juntos, no importa que me haya echado de su casa ya que de todas formas él tenía razón yo no pensé bien las cosas ¿A que chico le gustan las chicas regaladas? A los feos y buenos para nada, Aarón no es así y obviamente no iba a recibirme de buena manera. Hoy será mi segundo intento, espero que él me de una segunda oportunidad y perdone mi imprudencia.

Termino de ducharme y abro la ventana de mi habitación, el calor es insoportable y probablemente a medida que avance el día irá en aumento, lo mejor será usar un vestido.
Busco entre mis vestidos y encuentro uno blanco con corte princesa muy lindo y unas sandalias estilo griegas color café claro, me ordenó el cabello en una trenza de lado y dejo mi fleco suelto, observo mi atuendo sintiéndome satisfecha, es primera vez que iré tan arreglada a la universidad y eso que ni siquiera me he maquillado, aunque sinceramente encuentro que no es necesario. Salgo de mi casa con mi bolso lleno de libros y los apuntes para Connor, le debo una ¿Y qué mejor que darle los apuntes ya escritos de la semana pasada? La universidad queda a tan solo diez minutos en taxi de mi casa por lo que no me demoro nada en llegar, mi salon esta atravesando el campus y las habitaciones de los estudiantes que vienen desde lejos así que me dispongo a caminar lentamente, ya que voy con tiempo, por el sector verdoso y fresco lleno de árboles.

-¿Qué tal guapa?-dice Nick, el hermano de Hannah, pasando su brazo por mis hombros- Hannah me ha dicho que te dijera que lamenta no poder venir hoy pero perdió en piedra, papel o tijeras conmigo y tuvo que acompañar a papá al asilo de ancianos a ver al abuelo.

-¿Dejaste que fuera nuevamente ella? La ultima vez tambien fue Hannah-le digo entre risas e intentando que sonar demandante, no funcionó.

-No es mi culpa que tenga mala suerte, guapa -dice Nick justificándose sin dejar de sonreír mostrando sus hoyuelos que lo hacen parecer un niño pequeño.

-Claro que lo es-le sonrio- Los he visto, tu padre se para detrás de ella y te dice lo que Hannah va a hacer.

-¿De qué hablan?-Zoe se nos une un tanto agitada-¿Dónde está Hannah?

-Hablamos de que Angel me ama más a mi que a Hannah- dice Nick besando mi mejilla.

-Jamás he dicho eso-lo empujo riendo.

-Has dicho que sabes la trampa que le hacemos junto con mi padre para que ella vaya al asilo de ancianos y no se lo has contado-dice Nick casi gritando.

-¿Otra vez? La vez pasada igual fue ella -reclama Zoe- Es injusto, si Angel no se lo dice se lo diré yo. Nos dejó solas justo hoy que tenemos que hablar con Aarón.

Miro a Zoe con molestia y es que ella sabe muy bien que a Nick no le agrada para nada Aarón, nadie sabe realmente por qué lo odia pero así es, y más encima hoy que se encontraba de tan buen humor. Nick se aparta de mí por arte de magia, o por arte de la bocota de Zoe, y cortantemente se despide marchándose tan rápido que no me da el tiempo de explicarle nada. Vuelvo mi mirada hacia Zoe que está con los hombros levantados y sigo caminando.

-Se que la he cagado, lo siento Angel-dice abrazándome.

-Esta bien -soy sincera- de todas formas se iba a enterar.

-¿Por qué lo odiará tanto?-se pregunta Zoe mirándome confundida- ¿Será por ti?

-Hannah igual me lo comentó una vez pero no es posible, Nick habla del odio que siente por Aarón incluso antes de que yo conociera al mismo-le explico.