Tú Me Enamoraste ;rdg

Capítulo 19;

Capítulo 19; Un sueño hiperrealista

Pedían salseo, tendrán salseo :v

Entramos a casa todos y fuí hacia mis padres. Los tomé y los abracé. Los había extrañado mucho, mucho, ¡demasiado!. Después fuí a abrazar a mis hermanos.

—¡Que guapa estás ________!—me dijo Taylor y reí.

—No mucho más que tú—le dije y reí.

Saludé a mis cuñadas, con las cuales NUNCA me lleve bien, exceptuando a Olivia, la novia de Danny. Todas eran tan.. excéntricas. O sea, si, lo acepto, mi familia tiene dinero y todo, pero es que cada una parece que sólo están con mis hermanos por eso, por el dinero. Traen bolsos de marca, móviles de los que acaban de salir, uñas -o garras- postizas, la mejor casa que pudieran pedir y etc. Y lo peor es que así están haciendo a los niños, si, todos son niños -y me alegro, ¿se imaginan si fueran niñas? De grandes iban a ser como sus madres, ugh-. Si nos hubieran visto de niños, joder, ni siquiera se hubieran fijado en mis hermanos, por más dinero que tuviéramos.

—Hola Karen. Moly, Elle—saludé a las tres y me sonrieron.—¡Olivia! ¡Danny no me dijo que estabas acá!—fuí a ella y la abracé.

—Que mal novio tengo—dijo y reí.

—¡Ya se hizo tarde!—gritó mamá y la miré confundida. ¿Tarde para qué?—Vamos, vamos. Salgan señoritas

—¿A dónde van?

—Molly a puesto una cita para las seis en un spa—dijo Olivia y asentí.

—Vamos _______, sal.

Fuí detrás de Olivia y le sonreí cuándo me miró. No es que me emocione mucho ir a un spa. Una vez Mark me contó una terrible historia sobre una chica que murió en un spa. Obviamente yo no sabía que era eso hasta ahora. Recuerdo como me puse a investigar muertes en spa's, ¡encontré millones!. Le tengo mucho miedo, por eso no me emociona mucho ir. Pero supongo que será un método de relajación. Las últimas semanas no me é relajado nada. Aparte cada que salía de casa alguien me paraba y preguntaba "¿Eres la amiga de Rubius?" "¿Eres su novia?" "¿Hace cuanto le conoces?", Claro que alguno también me pedía una foto, cosa de la cual aún no me é acostumbrado aún, pero siempre referente a Rubén.

A todo momento alguien me lo recuerda, hasta yo misma me lo recuerdo. O simplemente, cualquier cosa que diga, le agrego una situación de ejemplo y eso me recuerda a Rubén. Es cómo si estuviera hablando de mi hermano Thomas, él es castaño y muy alto, justo como Rubén, y ahí, lo recordé. Pero lo que no entiendo es por qué.

—Hija, cuéntanos, ¿Madrid es bonita?—preguntó mamá sacándome de mis pensamientos, ella venía conduciendo.

—Es preciosa, si algún día vas con papá, te aseguro que te enamorarás de todo. De todo—dije y sonreí. Por un momento la sonrisa de Rubén pasó por mi mente.

—¿Y ya tienes novio?

—Con esa sonrisita que trae yo digo que sí—dijo Olivia y le dí un codazo.

—Por favor, algún chico a de haber por ahí—dijo Elle, quién venía de copiloto.

—No, no, no. Si tengo muchos amigos, pero ningún novio.—dije y todas se quejaron en el auto—Y adivina a quién me encontré madre. Al mismo Samuel que me sacaba a fiestas en la universidad.

—¿Enserio? ¿Sigue igual de guapo?

—¡Mucho más! Comenzó a ir al gym y joder.

El viaje hasta el spa continuó mientras yo me tomaba algunas selfies con Olivia. Al llegar al lugar era ENORME, por afuera se veía precioso.