Capítulo 74: "Guardianes de tiempos remotos"

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Una embarcación surcaba el océano de Hoenn a gran velocidad. Su destino era Sootopolis dónde se bajarían dos de sus miembros. Estos dos en particular se encontraban ahora entreteniéndose jugando a los dardos. El movimiento constante del barco hacía todo más complicado.

Ash: ¡Que cerca ha estado esa! Casi le doy en el centro.

May: Si, ha sido un buen tiro.

Ash: Con este resultado la única forma de que me ganes es que le des en el blanco.

May agarra uno de los dardos y se coloca en posición para tirar. Se toma su tiempo para lanzarlo. Poco después de empezar a jugar se dio cuenta de que la paciencia era fundamental si quería ganar. Y con la apuesta que estaba en juego ella no estaba dispuesta a perder. Respira profundamente y contiene la respiración. Entonces realiza su movimiento.

May: ¡YEI! ¡Gané!

Ash: ¡Esto no es justo!

May: Acéptalo Ash. Te he ganado. De nuevo.

Ash: No seas tan presuntuosa. Esta recién es nuestra quinta partida.

May: Si. Y gané el desempate.

Ash: (suspira) De acuerdo. Terminemos con esto.

Como "castigo" el que perdiera tenía que besar al otro. Así que eso fue lo que hizo Ash. Siguieron besándose durante bastante tiempo, solo separándose para tomar aire. Hasta que fueron interrumpidos por el dueño de la embarcación.

Alfred: Veo que se están divirtiendo.

Ash y May pegan un sobresalto al escucharlo. Este hombre en serio parecía no hacer ningún ruido al caminar. La reacción de la pareja provocó una risa de parte de Alfred.

Alfred: Por cierto, han visto a mi hija.

Ash: Esta justo allí.

Ash apunta detrás de él dónde la pequeña Verónica se estaba hecha no una sienta sobre el sillón.

Alfred: Parece que esta cansada. Lo mejor será dejarla ahí.

May: ¿Cuánto falta para llegar a Sootopolis?

Alfred: A este ritmo llegaríamos allí a anochecer.

Ash: Genial. Pero si usted está aquí ¿quién está pilotando la nave?

Alfred: He dejado que Sergi se encargue de eso. Solía pertenecer a la Marina hasta que se graduó hace poco más de diez años. En cuanto a barcos Abe mucho más que yo.

Justo en ese momento se abre una puerta a espaldas de Alfred y el mayordomo aparece con una cara de gran asombro.

Sergi: ¡Señor! ¡Creo que tenemos problemas!

Alfred: ¿Qué tipo de problemas?

Sergi: Venga a verlo por su cuenta.

Los tres siguen a Sergi hasta el puesto del capitán dónde estaba el timón de la embarcación.

Ash: ¿Qué sucede?

Sergi: Miren.

Sergi apunta a la ventana desde la cual se podía observar una isla cercana.

May: Es una isla. ¿Qué tiene eso de raro?

Sergi: Que esa isla no aparece en el mapa.

Alfred: ¿Estas seguro Sergi?

Sergi: Totalmente. Observen.

Sergi se apartó para dejarles ver una pantalla donde había un mapa. Tal y como él les había dicho, ahora mismo deberían estar en pleno mar y no cerca de una isla.

Dos corazones por Hoenn (ADVANCESHIPPING)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora