CAPÍTULO 16 RUBIOS SEXIS

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El ruido de la cafetera y el olor a café, hacen que me despierte. Abro los ojos y me encuentro a mi amiga vuelta hacia la estufa cocinando como siempre. –Hola, que hora es. –le digo.

-Hola Bree, lamento haberte despertado tan temprano. Son casi las 6 de la mañana. –quee las 6 pero que hace despierta tan temprano. –Tenemos un evento en el café a las 9 y nos han pedido que lleguemos a las 7:30. –eso explica todo. –puedes volver a dormir si queréis.

-Amm, se me ido ya el sueño, quieres que te ayude. –me ofrezco.

-No, Bree. Gracias ya casi he terminado.

Veo como Mel se pone a desayunar, yo solo la acompaño con una taza de café. La verdad a estas horas de la mañana, mi estómago no tiene hueco para la comida. Cuando termina con su desayuno le digo que no se preocupe por los trastos, ya yo los lavo. Asiente y se va a la regadera. Unos minutos después la veo salir de su habitación con su uniforme de trabajo y me dice adiós.

Yo, ya he terminado de limpiar la cocina. Así que es hora de tomar mi ducha para irme al trabajo también. Me meto bajo el agua y dejo que esta se deslicé por todo mi cuerpo. Una vez término me enrollo con una toalla y otra más para mi cabello. Durante el desayuno le he pedido algo de ropa prestada a Mel y me ha dicho que podía tomar lo que quisiera, estoy frente a su armario y veo la cantidad de ropa. Elijo un vestido con flores de tirantes y unas sandalias. Corro a mi habitación y me visto me hago una trenza de lado y creo que ya estoy lista.

Cuando llego a la librería aún es temprano. Pero veo el coche de Susan estacionado eso me sorprende. –Hola, Bree. Buen día. –me dice Susan al entrar, esta tras el mostrador.

-Hola. –le respondo. –has llegado muy tem...

-Listo tía, las cajas están acomodas. –me interrumpe una voz masculina y cuando me giro para ver de quien se trata, me encuentro con un chico alto, de piel clara, con unos ojos tan bonitos y rubio. Un rubio sexi.

-Gracias. Robert. –Susan me saca de mis pensamientos. –Bree te presento a Robert mi sobrino. –el chico rubio me da la mano. –Robert, es quien se encarga de traernos los libros de la bodega. –así que él es Robert. –Bob te presento a Bree, se encarga de atender la librería.

-Mucho gusto. –respondemos diciendo los dos al mismo tiempo, pero cada quien con su asentó. Él al estilo español y yo al estilo americano. Ambos reímos y entonces veo que se le forman uno hoyuelos similares a los de Darry pero mucho más bonitos y sexis me dice mi subconsciente.

El teléfono de Susan suena y eso me trae al presente. – ¿Bree? –pregunta Robert.

-Brenda. –me apuro a responder.

-Bonito nombre. –dice.

-Gracias. –le digo.

Al poco regresa Susan. –Bree, Robert seguirá acomodando los libros en las estanterías. –le hace señas a Robert para que haga lo que dice y este obedece y nos deja solas. –Yo ya tengo que irme, hoy no vendré en la tarde por un evento que tiene mi esposo así podéis cerrar temprano, y con temprano me refiero a las 4 vale.

Asiento, se despide de mí y luego va a ver a Robert. Yo me enfoco en hacer la limpieza del local como de costumbre. Minutos más tarde veo salir a Susan y me dice adiós con la mano. Termino de limpiar y me situó en mi lugar de trabajo, escucho como Robert tararea una canción que no conozco y veo como está concentrado acomodando los libros. Susan me ha dicho que puedo cerrar temprano así que tengo la tarde libre, saco el teléfono y me dispongo hacer un mensaje.

Un amor en MadridDonde viven las historias. Descúbrelo ahora