La mejor tarde de fútbol ⚽(Jinkook)

Escondidas.

Cuando desperté debido al llamado de mamá para desayunar, pensé que molestosa era para gritar tan fuerte desde la cocina, como si fuera tan difícil acercarse de manera cuidadosa a su hijo y levantarlo delicadamente. A pesar de eso, iba todo normal hasta ahí.

— ¡SeokJin, hijo, subiré ahora mismo!

Escuché a mi madre gritar furiosa— pero eso ya me parecía cuento repetido. No es que no le haga caso a mamá, yo la respeto mucho, pero sé que al decir que el desayuno ya está listo significa que falta que SeokJin se levante para comprar los cereales y demás aperitivos.

—Tan solo quiero dormir un poco más, mamá.

Empecé a escuchar los pasos de mi madre subiendo la escalera, los zapatos que lleva para trabajar son bastante ruidosos.

Cuando estaba a punto de hacerme el dormido para que no me grite y decir que estoy ignorando el mandado, escucho uno voz.

—Hum... Buenos días Jin — Musitó Kook aún con sueño.

Olvidé por completo la presencia de Jungkook, giré en su dirección y estaba con los ojos entrecerrados debido al cansancio y su mano derecha sobre su boca cubriendo un bostezo, que indicaba que también necesitaba descansar un poco más al igual que yo.

Entonces todo el estado de tranquilidad terminó.

Mamá esta subiendo la escalera...

Ella vine a mi habitación...

¡Mamá verá a Jungkook!

—Jungkook, levántate. —Dije al instante, los pasos se escuchaban cada más cerca.

—Tengo hambre, Jin... —Dijo aquello acompañado de un tierno puchero,a pesar de eso no tenía de otra que moverlo de una vez. Lo tomé del brazo, sin ejercer fuerza alguna y lo llevé al baño.

—Necesito que te quedes aquí, pequeño. Iré a traerte un poco de comida. —Lo metí a la pequeña bañera y traté de ocultarlo con la cortina.

—Jin...

— ¡SeokJin!, ¿dónde estás? —Gritó mi madre desde afuera.   

Si alguna vez hubiera vivido un suceso paranormal, sé que me sentiría de igual forma como lo estoy ahora.

Mi madre está a unos cuantos metros de mi pequeño.

—Jin, tu mami esta busc...—Le tapé los labios con mi mano y le susurré que hiciera silencio.

No tengo otra salida.

—Estoy bañándome, mamá. Ahora bajo.

Todo se quedó en silencio afuera, tan solo sentía mi corazón palpitando en toda la habitación.
La calma estaba reinando en mi interior hasta que tocaron la puerta del baño.

— Cúbrete, Jin. Entraré a sacar tu ropa para lavarla.

Estoy perdido.

Senté a un lado de la bañera a Jungkook y yo me coloqué al otro tratando de cubrirlo con mi cuerpo y a la vez no aplastarlo.

Hasta que me di con la sorpresa de que mamá vendrá por mi ropa.