La clase había comenzado y Sagitario no prestaba mucha atención.
Matemáticas, bla bla bla, ecuaciones, bla bla bla.
Vio su libro de matemáticas, no entendía nada, era como si el libro estuviera escrito en otro idioma que desconocía.
No entendía que estaba mal con el, todos sus compañeros parecían entender de la materia excepto el.
Se rasco la cabeza, tratando de entender lo que había en el libro.
Una chica se levantó de su asiento y revisó el trabajo.
"Ella es inteligente, por eso lo entiende", se dijo a sí mismo.
Otro chico se levantó a revisar, Josh, uno de los más estúpidos del salón.
¿En serio?
Suspiró y comenzó a golpear su lápiz contra el banco.
Cuando el timbre sonó todos guardaron sus cosas para irse.
—¿En serio no lo entendiste? —preguntó Josh.
Sagitario decidió no contestar.
—Eso es ser demasiado idiota —dijo el chico antes de irse, Sagitario terminó de guardar sus cosas y salió del salón.
Bien, tal vez era muy malo con las matemáticas, pero era bueno en muchas cosas más.
Cómo... ¿Leer? No, era pésimo para eso, escribir menos, tal vez tocar un instrumento... Oh, no, las notas lo confundían demasiado.
Bueno, era bueno en los deportes y, ¿Quien sabe? Podía terminar siendo un famoso deportista... o un viejo que vive en el sótano de su madre.
Sagitario se maldijo por tener una mente tan pesimista a veces, pero era la verdad, sin matemáticas sus posibilidades de ser algo en la vida eran de 0.
Caminó hasta su casa y subió a su cuarto mientras su mamá cocinaba algo.
—¡Sagi, baja a comer! —exclamó, cuando bajó vio un plato de spaghetti en la mesa.
Sonrió y se sentó.
—Y, ¿Como te fue? —preguntó su mamá poniendo un bote de queso en la mesa.
—Como siempre —se encogió de hombros, su mamá asintió, Sagitario no hablaba mucho sobre la escuela.
—¿Ya leíste tu capítulo diario? —preguntó, Sagitario negó con la cabeza, tenía que leer al menos un solo capítulo de lectura para no perder avances—. Cuando termines de comer tendrás que leer algo, no queremos que olvides...
—Como leer —completó la oración en un murmuro.
—No olvidaras como leer, sólo se hará más difícil.
—Es lo mismo, mamá —dijo enojado, su mamá asintió.
Sagitario odiaba tener lo que tenía, tener que ir con el psicólogo y ver a un montón de niños hiperactivos comiéndose los mocos o tener que leer un capítulo diario para no volverse más inútil.
Odiaba tener dislexia.
Nunca le dijo a nadie de su escuela que tenía eso, probablemente todos se iban a reir de el en su cara.
Las únicas personas que lo sabían eran sus papás y sus amigos, pero no había nadie que lo comprendiera, que comprendiera la desesperación de no entender algo que los demás si, o de no poder leer fluidamente.
Cuando terminó de comer leyó el estúpido capítulo y subió a su cuarto. Lo peor de leer un capítulo diario era tener que leer un capítulo diario de Crepúsculo ya que era el único libro que su mamá tenía.
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The Zodiac Life [EDITANDO]
HumorDoce signos viviendo juntos, seis hombres y seis mujeres, ¿Que tan malo podría ser?