Los Nuevos Vecinos♡ [Sin Editar]

Los celos de Bruno.

Narradora:
Simplemente se quedó dormida en medio de una gran platica con sus hermanos y amigos. Tenia mucho dolor en todo el cuerpo, no podía creer que era la segunda vez que estaba internanda en un tonto hospital.

Fernando le habló a sus padres para decirles lo que había pasado, los señores reaccionaron preocupados y corrieron a decirles a sus otros hijos, estos estaban en casa de los Larios preguntando por Daniela. Los gritos se escucharon hasta 2 casas despues.

-¿Mis hijos? Están en sus cuartos.-respondieron los señores Larios.

-SEÑORA! NADIE ESTÁ AQUÍ!.-llegó corriendo Conchita.-¿que fué lo que pasó?.-ella estaba comprando alimentos cuándo pasó el incidente.

-no sabemos con exactitud, pero sabemos que estan en el hospital, pero no contestan las llamadas ni mensajes y creiamos que ustedes ya sabían algo... pero, creo que no.-dijo Enrique.

La madre de ellos les llamó para decirles lo que le habia comunicado Fernando y entonces todos se metieron en sus casas dejando preocupados a los padres de Daniela.

Ya eran las 9:30 am y no sabían nada de nadie. Quizás Daniela ya estaría en la otra vida y nadie se habría enterado.

Mientras tanto en el hospital, habían dejado a Daniela sola en su cuarto con todo apagado para dejarla descansar. No soportaba para nada el maldito dolor e incomodidad por el suero.

Daniela.

Me tenía completamente harta esa porquería conectada en mí, quería salir de aquí, ya no aguantaba mas.

Estaba despierta desde hace unos 10 minutos y en mi cabeza no paraban de darme vueltas todo lo antes sucedido con mi madre, ¿que derecho tenía ella para golpearme? ¿porqué lo hizo?. Ni siquiera me vio con mis heridas por la pelea con la tal Charlotte, no le importó nada más que pelear y terminar golpeandome. Mis manos comenzaron a temblar del enojo de nuevo hasta que me empezó a doler la herida y me tranquilice.

De pronto, entró el doctor a la habitación con un termómetro en las manos.

-hey! ¿cómo te sientes?.-preguntó amablemente.

-bien, o eso creo. ¿Me va a tomar la temperatura?.-pregunté.

-si, habre la boquita.-yo obedeci riendo por la forma en la que me lo dijo.

-¿éste es nuevo?.-pregunté señalando el aparato.

-claro.-dijo el.

-me parece haber visto tecnología más avanzada.-me reí.

-yo también.-dijo asintiendo y riendo con la cabeza.

-Daniela!.-gritaron todos al verme. Pude percibir a un buen doctor checando mi historial, su cara me hizo saber que le sorprendió lo que ahí se mencionaba.

Volteé a ver a mis hermanos y les Sonreí con el termómetro aún en mi boca.

-houla.-dije tratando de decir "hola" pero el aparato me lo impedía. TODOS se me acercaron a abrazarme mientras me cantaban "felíz cumpleaños". Rode los ojos, no me gustaba eso, me sentía incómoda.

-hey, hey, hey!.-gritó el doctor en cuánto vió que me quisieron abrazar.-uno por uno o la mataran.-bajó la cabeza para que todos siguieran sus órdenes.
Al terminar los abrazos tuvieron que salir de allí, y el doctor checando lo que había medido el termómetro me dijo

-por cierto, Feliz Cumpleaños.-pero con seriedad, como si tuviera hasta pena.

-gracias(?.-Sonreí.