Existen acciones que nos ubican en un universo real, que nos posicionan en el presente y nos hacen reflexionar, para voltear y darnos cuenta de dónde venimos y en qué nos estamos convirtiendo.
Entre mis acciones clasificadas están que:
Al cambiar las comiquitas por películas crecí en mi entretenimiento.
Al cambiar un lápiz por un bolígrafo crecí en la escritura.
Al cambiar un bolso por una cartera crecí como mujer.
Al cambiar el refresco por el café crecí al concentrarme.
Al cambiar las fiestas por horas de sueño crecí en prioridades.
Al cambiar de compañeros que restaban a amigos que sumaban crecí junto con mi entorno.
Al cambiar un solo brillo por maquillaje crecí en mi apariencia.
Y así superando cada etapa en mi vida...
Al estar cerca de cumplir mis 20 años, afirmo que soy fiel creyente que crecemos luego de cada atardecer, por lo que vivimos en cada día y lo que aprendemos de él. Porque sí, aprender también es crecer.
Esfuérzate en crecer cada día, te aseguro que valdrá la pena.
ESTÁS LEYENDO
Monólogos nocturnos
Historia CortaConsecuencias del café en la noche, gran sabor. Inspiración, desahogo, día a día... Motivación y reflexión 👣.